Gracias, maestro. *Bon y Bonnie FNAFHS*

Parte 1

Holi(?) Welp bienvenidos a mi primer fanfic gracias gracias por los aplausos hohoh~. Como dice la descripción, no hay sexo, no hay besos, nada subido de tono mas que unas 2 groserias(?). Todo esto es narrado por Bon y... Eso. Disfrútenlo <:  

Hace poco conocí a un chico, ese sujeto de la banda de los animatrónicos. No había nadie que me llegara a los talones en la manera de tocar la guitarra pero él... Él me dejó sorprendido. Cuando comenzó a tocar aquella melodía, no pude creerlo y casi instintivamente saqué mi guitarra para corresponderle. Ambos tocamos, yo con esfuerzo, tanto que me hizo sudar. Pero él, se veía tan feliz, tan confiado, estaba en su zona. Nunca creí ver a alguien así. Y cuando terminamos de tocar:

"Si tan solo pudiera tocar como tú"

En ese momento sentí como mi rostro se enrojecía con su mirada. ¿Por qué? ¡No lo sé! Supongo que es la primera persona que conozco que me puede igualar tocando la guitarra, quizá hasta lo haga mejor que yo. Pero no por mucho, voy a tocar más que antes, a practicar toda la tarde si es necesario. No puedo dejar que nadie me gane.

Los días pasaron, y como dije, estuve entrenando en casa mucho. A veces ni siquiera dormía o lo hacía un par de horas solamente. En momentos me hablaban mis amigas, y yo raramente reaccionaba. No dejaba de pensar en aquel sujeto, el de cabello morado y no sé si se trataba de celos, admiración o... cualquier otra cosa eso da igual. Me perdía en mi propia mente, recreando ese momento cuando ambos tocamos con el corazón. Pero debería dejar de pensar así, después de todo él y yo somos enemigos. En lo único que debo concentrarme es en vencerlo.

Aun así al parecer él tenía otros planes. Una vez me lo encontré de camino a la escuela para practicar con mi banda. Resulta que me había buscado para que yo fuera su nuevo maestro. ¿Pero qué le sucede? Traté de esconderme en todos lados pero al final me encontró en la copa de un árbol en las afueras de la escuela. Y no sé cómo pero logró convencerme. Siempre que hablo con él o aunque solo esté cerca de mí no encuentro escapatoria, no sé cómo reaccionar y termino cediendo a lo que me dice. Maldita sea. Ahora soy el maestro de Bonnie. Y nadie debe enterarse de eso o Mangle me cortaría la cabeza.

Esos tipos brabucones que siempre están afuera de la escuela lo molestan mucho porque no les lleva dinero. Los escuché discutir con él una vez, y yo intervine. Tuve que decirle a Mangle que no podría dejar que tocaran una guitarra aunque en verdad era Bonnie el que me preocupaba, pero uno de sus amigos de la banda llegó y los ahuyentó antes de que pudiera hacer algo. Otro día logré llegar antes que él y me enfrenté a los Nightmare para defenderlo. Bonnie se levantó y les dijo también que se fueran, eso me extrañó, ya que él nunca se defendía. El pequeño tiene agallas.

A medida que íbamos juntos al parque a practicar, me encariñé un poco con él. ¡Solo un poco! Pero no sé por qué su voz, su cabello o algo en su mirada me dejan inquieto. Me doy cuenta que cuando me habla para preguntarme sobre una parte especial de la melodía, mi rostro sigue enrojeciendo. Me lleno de vergüenza y sé que él lo nota, porque deja salir una gran sonrisa y hace como si no me hubiera preguntado nada. Parece que hasta disfruta verme así. No sé si se trata de un plan que tenga para hacerme quedar mal con la banda o... En realidad no tengo idea. Solo sé que ese sujeto es un caso especial.

Hoy me fui yo antes que Bonnie en la práctica. Dijo que se quedaría un poco más para ensayar una parte que no le convencía del todo. "Está bien, cuídate mucho". ¿Cuídate mucho? ¿Enserio dije eso? Me puse aún más rojo que antes al ver que él me sonreía mientras guiñaba un ojo. "No te preocupes sé cuidarme solo". Pero claro que me voy a preocupar, tonto.

En este momento estoy caminando a mi casa. Casi llego a ella, cuando me di cuenta de algo: Había olvidado mis plumillas en el parque. Por dios, cómo puedo ser tan despistado. Ya estaba bastante oscurecido, eran como las 8 de la noche, pero daba igual debía regresar por mis plumillas, son especiales.

Así que doy la vuelta y me dirijo hacia donde había venido. Me pregunto si Bonnie seguirá ahí, espero que no.

Ya casi voy llegando al parque cuando escucho unas voces familiares. Era ese tarado de los Nightmare, el que parece ser el líder. Por un momento iba a proseguir caminando, solo lo evitaría e iría por mis cosas, pero en eso...

-¿Qué tenemos aquí? Las ratas no deben estar afuera tan tarde, podría venir un exterminador.

-Cállate, solo quiero irme a casa.

-¿Ah sí? ¿Y crees que te vamos a dejar?

-Oye, ¡Oye! ¡Déjame!

Era Bonnie.

Dejé mi guitarra en el piso y corrí hacia donde estaban. Fui tan rápido que ellos ni siquiera se dieron cuenta de que llegué. Me llené de valor y le solté una patada al peliazul que tenía agarrado a Bonnie de la espalda.

-¡AAGH! ¿Pero qué...?

Pongo al chico atrás de mí para protegerlo. Estoy furioso.

-¿Qué no tienen nada mejor que hacer? ¡Déjenlo en paz y váyanse!

-Maestro...

-¿Pero por qué te metes, idiota? Si eso quieres, vas a tener que vencernos para llevarte sano y salvo a tu "noviecito".

Esas últimas palabras fueron suficiente para mí. Corrí hacia su jefe, estaba listo para darle un puñetazo en la boca, pero antes de que pudiera llegar a él alguien me tomó de la pierna y caí al suelo. Era ese otro tipo de cabello naranja.

-¿A dónde vas a tan rápido? Primero tenemos derecho a divertirnos un ¡po-co!

Tomó ambas piernas mías y me jaló hacia él. Yo soltaba patadas desesperadas pero no le causaban nada al sujeto. El otro tipo se puso sobre mí y agarró mis dos brazos sobre mi espalda. Yo no podía moverme, solo soltaba gemidos y gritos enojados.

-¡Suéltenme bastardos!

Pude levantarme en un movimiento rápido, pero fue en vano, ya que el pelinaranja, que es mucho más fuerte y pesado me tomó de los brazos en mi espalda y con su otro brazo apretaba mi cuello. Sentía como me ahogaba y comencé a desesperarme.

-¡Déjenlo en paz!

Aún no le habían hecho daño a Bonnie y eso me alegraba, pero tenía que soltarme para darles una lección a esos tres idiotas.

-Ya les dijimos, primero queremos divertirnos un poco.- Dijo el líder, al momento que agarró a Bonnie del cabello y lo lanzó al suelo bruscamente.

-¡BONNIE!

Fue lo último que pude decir porque me habían vendado la boca con algo. Yo seguía ahí, completamente inmovilizado, tratando desesperadamente de liberarme para salvar a mi chico.

-Solo quiero que tengas un lindo recuerdo de esta noche, Bon.

Volvió a tomar a mi Bonnie del pelo, lo levantó del suelo. El maldito me miraba a los ojos y sonreía, seguro estaba disfrutando mi rostro desesperado al borde del llanto. Dirigió su mirada a Bonnie, levantó la pierna y con un movimiento...

-¡NOOO!