CAPITULO 18 El fin de las vacaciones.

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---En el set---

Como vi que Alucard y Miketsukami caminaban hacia la sala donde estaba conversando con Alucard, sin pensarlo nos escondimos en el closet.

-Shh, no hagas ruido. –me queje.
-Eso trato pero, no hay mucho espacio.

Sebas y Mike entraron a la sala y en cuanto cerraron la puerta Sebas acorralo al peliblanco en la pared.

-¿Q-Qué haces? –se sonrojo.
-Mike no puedo aguantar más.
-Deja ya tus bromas y ammmhpp... -no pudo terminar su frase pues Sebas lo beso apasionadamente.

"Maldición como no traje la cámara conmigo"

Ambos seguían besándose, Mike se aferraba a los hombros del pelinegro, mientras Sebas bajaba sus manos hasta llegar al pantalón del peliblanco y meter su mano.

-S-Sebastián, n-no.
-Me encanta como te sonrojas. –sonrió lujurioso.
-No puedo ver esto. –murmuro Alucard.

Sebas bajo un poco la ropa interior de Mike.

-AHhh, -gimió Mike- n-no toques.
-¿Te gusta? –comenzó a mover su mano.
-N-No preguntes, i-idiota. –jadeo.
-Soushi eres impresionante. –lo beso.

Después de un rato Mike se estremeció y Sebas saco su mano lamiéndola lentamente.

-Eso fue rápido.
-Imbécil. –gruñó Mike con la intención de irse.
-Espera, que aún me falta. –sonrió lujuriosos y lo volteo restregando su erección.
-No te atrevas...
-No quiere entrar... -se quejó.
-ESO NO ENTRARA MALDICIÓN.

"Kyyyaaaa por dios...."

-Kris no te muevas que yo... -se quejo Alucard.

De un movimiento se abrió la puerta del closet y caí encima de Alucard.

-¿Kris? –me miraron los dos.
-Jejeje, digamos que buscaba unos atuendos. –sonreí.

Mike aprovecho para irse corriendo dejando a Sebastián en condiciones un tanto vergonzosas.

-Maldición otro poco y... -gruñó.
-¿Qué crees que hacías? –grito Alucard.
-Alucard tiene razón, no puedes embestir así a Mike primero debes prepararlo correctamente imbécil. –lo regañe.
-NO ME REFERIA A ESO. –se quejó el vampiro.
-Por su culpa, -gruñó Sebas con un aura siniestra- los mataré.
-Waaaaaaa. -grite.
-KRIS, ESTAMOS AL AIRE.




-MUY BUENOS DÍAS, TARDES o NOCHES tengan todos ustedes bienvenidos a su programa favorito, MI NUEVA VIDA, -sonreí- me presento mi nombre es Kris Landeros y soy la conductora de este bello programa, les presento a mi sexy asistente Alucard.
-Bienvenidos de nuevo...

-Y pues los otros dos tuvieron algunos asuntos que arreglar, -me limpio la sangre de la nariz- así que continuemos con el programa, veamos cómo les ha ido a nuestros semes en su último día...


---Con Miyagi---

Por fin era el último día que tenía que vestir de esa forma, rogaba porque su pareja actual llegará y así poder realizar el castigo que le tenía preparado al igual que los demás semes. Al llegar entro al salón encontrándose con varias chicas.

-¿Qué sucede? –pregunto.
-Miyagi-sensei ¿es cierto que usted tiene novia? –pregunto una chica.
-Je, algo así. –respondió.
-¿Y que estudia en esta Universidad? –comento otra.
-¿Ah?
-¿Y que precisamente no es mujer?
-Niñas, esto es...
-Entonces ¿también concursa en un programa e intercambio a su pareja?
-¿De dónde sacan tanta información? –gruñó el pelinegro.
-KYYYAAAAAAAAA. –gritaron todas.
-¿De qué me he perdido? –bufo el profesor.
-Se los dije, yo vi el programa, y se ven tan lindos como pareja. –suspiro una.
-Yo también lo vi y no me querían creer, creo que su nuevo novio trabaja en una empresa. –murmuro otra.
-Maldita sea la hora en que entre en esto. –dijo decaído.
-¿Por qué cambio al tierno rubio por ese hombre?
-Ya no me acosen más...

Las chicas siguieron preguntándole hasta que la campana sonó y las aparto para dar su clase, puesto no quería seguir dando explicaciones. Se sentía avergonzado de que sus alumnas supieran acerca del programa y más aún de que se enteraran de cada cosa.

Al terminar las clases se dirigió hasta su auto encontrándose con su jefe en el estacionamiento.

-Buenos tardes Miyagi. –comento.
-Buenas tardes suegro, digo señor Takatsuki.
-Por favor Miyagi, estamos en confianza.
-Gracias.
-Y bien, -suspiro- ¿Cuándo pedirás la mano de mi hijo?
-¿Ah?
-¿Lo amas?
-Sí.
-Entonces espero hablen conmigo adecuadamente y se casen lo antes posible.
-Pero...
-Nos vemos...

El pelinegro quedo con la palabra en la boca, puesto no se imaginaba que su suegro le pediría eso, aunque lo hizo feliz nunca lo admitiría.

Se dirigió a su hogar, se bañó y estuvo viendo la televisión esperando a su pareja.

-En unas horas te veré de nuevo y me pagarás todas las que has hecho.

---Nowaki---

Se encontraba el peliazul alzando todos los libros que había regados puesto el escritor al llegar tan cansado luego de trabajar tiro todo lo que tenía a la mano por el enojo que le causaron ciertos niños.

El pediatra ya se había acostumbrado a los ataques de enojo que le deba al escritor, puesto todos los días era lo mismo con él, no podía decirle nada pues era su asistente personal a petición de Misaki.

Se paseó por todas las habitaciones de la casa para limpiarlas por completo, ya que afortunadamente era el último día que tendría que trabajar para ese "niño malcriado", porque precisamente el día de hoy llegaban de sus vacaciones y era de lo mejor.

Se colocó delante de una puerta y giro la manilla.

-WAAAAAAAAAAAAAAA. –grito cuando una montaña de osos cayó encima de él.

Un peliplata se acercaba a paso lento al lugar donde escucho el derrumbe y encontró a un Nowaki con varias venitas en su frente.

-¿Qué le hiciste a mis osos? –pregunto el escritor.
-¿Por qué hay tantos osos en esta habitación? –gruñó el peliazul.
-Porque quiero. –encendió un cigarro.
-Usami por favor usted ya está muy grande para estas cosas. –suspiro.
-Digamos que Suzuki se sentía muy solo.
-¿Y para que rayos me pidió que le consiguiera una novia?
-¿Novia? ¿Yo te pedí eso?
-CLARO QUE LO HIZO.
-Mmm, no recuerdo nada, -suspiro el escritor- me iré a mi habitación, avísame cuando este la cena.
-¿No me piensa ayudar?

El peliazul miro al escritor con enojo, Akihiko resoplo.

-Lo siento pero fue tu culpa. –se fue a su habitación.
-MALDITO ESCRITOR SOBREVALUADO...

Nowaki como pudo escapo de aquella montaña de osos, colocándolos de nuevo en la habitación, asegurándose de que no se fueran a caer.

Preparo la cena y le aviso al escritor despidiéndose de él.

-Aunque eres un poco perezoso y quejumbroso, sirves muy bien para ayudante. –lo felicito.
-Espero sea una broma de mal gusto. –murmuro Nowaki.
-Para nada, es un alago, deberías de estar feliz.
-Sabe Usami, -lo miro el peliazul- no sé cómo lo soporta su pareja, siento tristeza por él.

El peliazul se dirigió hacia su casa, pero decidió pasar a una tienda a comprar unas cosas ya que tenía algo muy especial que hacer para su pareja...


---Kaoru---

El hombre se dirigía a paso lento a su último día de trabajo, se alegraba tanto de que no se iba a volver a exhibir de esa forma, aunque su jefa Nicole le había pedido que su baile de hoy fuera más sensual que las otras veces, para que fuera una dulce despedida para las personas que lo admiraban.

Al llegar al club se dirigió a su camerino, entro y lo miro.

Unas venitas se le podían ver en la frente, cerró sus puños y quería insultar a alguien... Y ese alguien era Rintaro.

Su camerino cambio por completo, todo estaba ambientado con rosas y velas, viéndose "romántico" también en medio había una cama matrimonial y sobre ella se encontraba Rintaro que solo vestía una bata y tenía en su mano una copa de champagne.

-Oh~ Kaoru-san por fin has llegado. –se levantó de la cama.
-¿Qué rayos le hiciste a mi camerino? –gruñó.
-Nada del otro mundo, -sonrió- solo quería ambientarlo de manera romántica para tú primera vez.
-¿Ah?
-Seré gentil te lo prometo, -le ofreció una copa- ¿gustas?
-No gracias, -suspiro- AHORA SALTE QUE DEBO CAMBIARME.
-¿Tan rápido me quieres tener dentro?
-Rintaro...
-Me siento tan excitado por tu actitud sumisa Kaoru...
-RINTARO ¿DÓNDE DIABLOS ESTABAS? YA ES HORA DE TU ACTO. –gruñó Nicole tomando al chico por la oreja.
-Au, me lastimas. –se quejó.
-Lamento lo ocurrido Kaoru, puedes ir al camerino 7 para arreglarte, yo le daré una lección a este pequeño diablo.
-Gracias Nicole.

Kaoru suspiro aliviado y se fue al camerino, se arregló vistiéndose de doctor puesto ese era su traje y salió al escenario donde todos sus fans lo esperaban ver. Comenzó a bailar animando el ambiente del lugar.

Al terminar su show se despidió de cada uno de sus compañeros de trabajo.

-Lo extrañaré tanto Kaoru-san. –comento Rintaro lo más uke posible.
-Yo no. –murmuro tanto.
-Aunque también extrañare tu hermoso trasero. –sonrió en forma seme- Tan redondito y firme.
-HASTA NUCA. –grito.

Kaoru se dirigió hasta su casa más aliviado puesto no tendría que ver a ese maniaco, ahora quería ver a su pareja, ya que tenía un plan en mente junto con los demás semes.


---Akihiko---

Un peliplata estaba en la concina junto con el chef profesional, y afortunadamente para él no había alguna foto rota como las veces anteriores, que gracias a su negligencia y por quererse zafar del problema el chef rompió fotos exclusivas de "Misaki" con poses ultra-mega-hiper sexy y con poses uke violable.

-Muy bien Akihiko, has aprendido las artes culinarias.
-¿Debería agradecer? –bufo el escritor.
-De hecho es lo más recomendable.
-Sí claro, después de romper así un tesoro invaluable.
-Ya que no fue para tanto, además es mejor que te vayas a apurar puesto que hoy es tú último día con los niños.

El escritor se resistía a ir a la escuela puesto no quería encontrarse otra vez con esos demonios, nunca le gustaron los niños y ahora que había convivido con ellos mucho menos le gustaba, pero se sentí más tranquilo al fin y al cabo era su último día... ¿qué podría salir mal?

Preparo sus cosas y se subió a su auto, manejo hasta el lugar donde estaba su calvario que él decía que era el mismísimo infierno.

-Buenas tardes Usami, gracias por habernos apoyado todo este tiempo. –comento una de las maestras.
-Lo vamos a echar de menos. –comento otra.
-Incluso los niños.
-Sí claro. –dijo sarcásticamente.

Entraron al salón donde todos los niños jugaban.

-Bueno niños, hoy es el último día que Usami estará con nosotros. –comento una maestra.
-Awwwww, no... -sollozaron los niños.
-Ya ve como si lo quieren tanto. –dijo una maestra.

Usami se sorprendió de la actitud de los niños, puesto que todo el tiempo se la pasaban tratándolo como un juguete. Las maestras prefirieron dejar solo al escritor para que se despidiera de los niños.

-Están a su cuidado Usami.

Al quedar a solas, los niños cambiaron su semblante y comenzaron a reírse.

-¿Eh? –se asustó el escritor- ¿N-Niños?
-¡¡¡¡¡AL ATAQUE!!!!!!!!! –gritaron todos.
-Waaaaaaaaaaaaaaa, sáquenme de aquí. –grito el escritor.

Todos los niños se le fueron encima.

Horas después un peliplata salía de la escuela todo destrozado, con la ropa un poco rota y desarreglada, el cabello pintado y una cara que daba susto.

Se subió a su auto y manejo hasta su hogar.

-Me las pagarás, créeme que me vengaré Shinobu...

El escritor se metió a la ducha cuando llego a su casa y encendió la televisión tomando una taza de café y encendiendo un cigarrillo.

Afortunadamente su tormento había acabado...

Ahora debía llevar a cabo el plan que había acordado con los demás.


---En el set---

-Siento lástima por los semes, sus castigos fueron muy malos pero se los merecían, -como galletas- gracias Lucero, me encantan, por favor envíame más porque mis asistentes son re-codos.

-Kris... -gruño Alucard.
-Es verdad, vayamos a ver a nuestros amados ukes, que en unos momentos estarán en sus casas...


---Con los ukes---

Después de que fueron acosados, y besados por sus rescatistas los ukes decidieron que todos dormirían juntos en la misma habitación...

Pero también sabían que debían tener guardias...

Así que entre todos decidieron premiar a sus guardianes si los llegaban a proteger.

Ijuuin le pidió a Misaki una cita en el parque de diversiones por cuidarlo cosa que el castaño acepto.

Satoru le pidió a Isaka ir juntos a sauna, cosa que acepto.

Raito le pidió a Shinobu que fueran a un antro o club nocturno.

Mientras que Tsumori le pidió a Hiroki que fueran a una cita por todo un día.

Los guardianes estaban bastantes felices y alejaban a cualquier pervertido que se les quisieran acercar.

-Por fin se acabó este tormento. –suspiro Misaki al subir al avión.
-No le volveré a pedir nada a la loca esa. –gruñó Hiroki.
-Nunca pensé en extrañar mi hogar. –comento Shinobu.
-Aunque eran guapos, fue de lo peor. –cruzo los brazos Ryu.

Su vuelo fue tranquilo. Al llegar al aeropuerto cada uno se dirigió a su casa, sin saber lo que sus semes les estaban preparando.


---En el set---

-Ya quiero ver qué ocurre.
-Tranquila Kris, eso será en la siguiente emisión.
-¿Ya se acabó?
-Así es. –suspiro Alucard.
-Muchas gracias por habernos acompañado, espero que nos ven en la siguiente emisión de MI NUEVA VIDA, les mando un gran saludo y abrazo.
-No dejen de sintonizarnos, hasta la próxima...




---corte---

-¿Y los otros dos?
-No lo sé, ¿tú crees que...?

Ambos nos dirigimos a una de las habitaciones de premios y nos acercamos a la puerta.

-Ahhh, S-Sebastián no tan fuerte. –gimió.
-Me encanta tu interior Miketsukami.
-KYAAAAAAAAAAAAAAA. –derrame nasal.
-No pienso limpiar nada...  

CAMBIO DE PAREJAS - Junjou RomanticaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora