Daryl siempre solía ser el más violento del grupo, después de salir de Atlanta y conocerlo jamás había cruzado una sola palabra con el hasta hoy.
Sophia se había perdido y el parecía ser el que más se preocupaba por aquello.
Era de noche, claro, no había luz y los autos que adornaban el fondo llenos de partes humanas o de sangre dentro hacían a cualquiera estremecer.
Dentro del auto sólo estaba yo.
Los demás estaban en la van.
La puerta se abrió de golpe y alguien cayó en el asiento de copiloto, me asuste tanto que estuve a punto de disparar.
-¡HEY!- escuche.
Conocía su voz, su forma de hablar y su forma de actuar perfectamente.
Era Daryl.
- ¡Maldición!, ¿Piensas matarme o que?. ¡Vamos!, baja la pistola.
Y obedeci, lentamente y con el corazón palpitante a mil por hora a causa del susto baje la pistola.
-¿Que quieres?.
Realmente quería saber la razón por la cual el estaba sentado en el mismo auto que yo.
-Saldré a buscar a Sophia.
-¿A esta hora?.
El me miro como si fuera un bicho, algo inferior, como si lo estuviera subestimando.
Apretó su Ballesta contra el hombro y salió del auto.
-Te iba a pedir que me acompañaras.- dijo desde afuera.
Recargue mi cabeza en el asiento, Daryl ya estaba afuera y su voz se escuchaba lejana.
Tenía miedo de salir a esta hora, con poca luz y con alguien a quien nunca en mi vida le había hablado.
-Ni lo pienses.
Pero el ya lo había pensado, pronto rodeó el auto para llegar a mi ventanilla, se recargo en ella y me miro con aquellos ojos penetrantes.
Aquellos ojos que muchas veces quise ver de cerca. Que muchas veces quise descifrar.
-¿No vendras?.
Negué.
No me pensaba mover.
Daryl abrió la puerta del conductor y me sacó de un jalón.
-¡Sueltame!- le exigí.
Pero al parecer el sólo quería tenerme de frente.
-Siempre me eh preguntado porque nunca me hablas.
Seguía apretando mi brazo.
-Porque eres un idiota.
Y realmente era un idiota.
Daryl soltó una carcajada tan sonora que por un momento pensé que miles de zombies vendrían al escucharla.
-Tu no me puedes juzgar.- me dijo.
-Yo puedo juzgar a quien yo quiera.
Si bien, el era duro, pero yo también lo era.
Daryl me miro disgustado, al parecer creía que yo era más indefensa.
-¿Entonces iras?.
Su mirada seguía perdida en mi rostro, pero no de una buena forma, el parecía esta estudiandome fisicamente para después decir algo que se llevó el viento.
-Esta bien.
Dije, pero no lo hacía por el, lo hacía por Sophia y porque si el iba sólo y lo perdíamos no tendríamos más a alguien que defendiera tanto el campamento, pero si yo iba al menos serviría de carnada.
ESTÁS LEYENDO
Una flecha por una respuesta.
Fanfiction°ONE SHOT° Daryl Dixon. El hombre sin sentimientos. No es fácil hablar con alguien a quien has mirado más de una vez.