Agonia

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Han pasado 3 años desde que te fuiste y tu recuerdo aun esta latente. He rayado en las paredes tu nombre, hasta el rincón más pequeño. Sigo esperando a que regreses. A veces pienso que es en vano.
El silencio a mi alrededor es mortal. Todo está callado. Puedo escuchar como mi sangre fluye lentamente por mi cuerpo moribundo. Me he preguntado día tras día si valió la pena todo esto. Si pude encontrar la paz eterna o simplemente dio inicio a una inmensa agonía, no lo sé.
He imaginado una nueva escena, es algo ridícula, en cierta forma, algo quizá inadecuado, pero que va puedo imaginarme lo que quiera, total de mi retorcida mente no pasará. Vienes a visitarme, no dices nada. Me miras a los ojos y tomas mi mano. Caminamos por un bosque inmenso, copado por cientos de árboles inmensos, un olor fresco a vida y una brisa de primavera que incita a soñar nos invade, que ridículo. Me cuentas una historia y mientras tanto suena de fondo una sonata deprimente, choca totalmente con el paisaje brillante a nuestro alrededor pero de repente todo cambia. El sol se oculta tras un montón de inmensas nubes espesas y grises, el aire se vuelve denso y el ambiente toma un tono mórbido. Veo tristeza a mi alrededor, por un momento te pierdo de vista y me siento mal.
¿Pero qué sabes tu de la vida si no has vivido?
¿Qué sabes tu sobre el mundo si no lo conoces?
Dime, ¿Qué sabes sobre el amor si nunca has amado?
¿Qué sabes sobre el odio si nunca has odiado a nadie?
¿Qué sabes tu sobre mi si ni siquiera tu mismo te conoces?
Eres un imbécil, crees saber todo pero no sabes nada. Crees conocer todo pero solo eres un maldito ignorante. Algún día sabrás, que la vida no se trata de como la acomodes, sino de como la vivas, como decidas vivirla...
Te escribí un poema, no se por qué lo hago, no te ha de gustar, nunca te gustan, pero solo quiero hacerlo.

Yace en lo profundo de un mar de incertidumbre
El deseo inmenso de palpar tu delicado cuerpo
Con una vela encendida y una copa de vino, contarte
Que hace mucho tiempo te había estado esperando

Y el impulso que por mucho tiempo contuve
Las cadenas de sensatez, las que me ataron
Las rompí desmedidamente y no me importaron
Es hora de bajar de esa blanca y densa nube

Dime, ¿donde estuviste todo este tiempo?
¿Has pensado en mi como yo te pienso?
Arráncame los ojos ahora que ya guarde tu rostro...

Es mierda, siempre. Jamás lo entendí. Como hago para decir tanta estupidez, pero se que no me escuchas, se que no me ves.
Han pasado muchos años y aun recuerdo ese día. Todos me abandonaron en este frío y solitario lugar. Daría lo que fuera por volver en el tiempo.
Este maldito lugar, estas paredes, el recuerdo y la música a mi alrededor, todo se ha vuelto una absurda agonía. Quisiera salir y encontrarte, pedirte perdón y abrazarte, devolverte todo lo que te quité, pero no puedo. No se dónde te fuiste...

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