Después de mis casuales incidentes con el profesor de interpretación ando bastante despistada, Sofía me ha estado preguntando todo lo que va de día si me pasa algo,le digo que no pero no parece satisfecha, y es que realmente no me pasa nada, sólo estoy tensa, los cambios no son algo que me agraden, y tampoco los profesores tan sumamente guapos,osea no, a ver, quiero decir que la mayoría de profesores que me han tocado todos han sido mayores, carcas, viejos, no se, me acostumbrare supongo.
-oye María que te parece si quedamos esta tarde- me pregunta Sofía mientras vamos camino de la última clase.
Me parece buena idea, así podré indagar más sobre su vida, es decir,aunque parece mi mejor amiga y la acabo de conocer, realmente no se nada sobre ella.
-me parece buena idea, podrías venir a mi casa y nos vemos una peli o algo- va a ser una buena tarde entre compañeras,amigas, dos desconocidas unidas por el estacionamiento.
-me parece perfecto- me dice batante animada- a las seis o así me paso por tu casa.
-okeyy.
(...)
Voy en dirección al aparcamiento por fin ha acabado el primer día y yo diría que superado con éxito, quitando el incidente del aparcamiento, el de clase de interpretación y el del pasillo, por Dios a quien quiero engañar, ha sido un completo desastre, y por fin ha terminado.
Llegando ya al estacionamiento de motos diviso mi vespa negra, me aproximo y al llegar veo a un chico mirando a mi dirección, enseguida lo reconozco, es Iván, parece como si me estuviese esperando.
-¿Qué haces aquí?- estoy bastante confusa, me ha pillado por sorpresa totalmente.
-He venido a por ti- esa frase suena tan horrible de su boca que un escalofrío me recorre el cuerpo.
-Ni en tus mejores sueños- dicho esto subo a la moto.
El se pone delante para no dejarme paso, comienzo a tocar el claxon como una loca hasta que corre hacia mi y me tira de la moto.
Una vez en el suelo se agacha, me tira del pelo hacia arriba y me golpea una mejilla.
-a ver si te enteras puta, que el que me envía es tu padre.
-¿Que crees que estas haciendo hijo de puta?- dios, esta aquí, menos mal.
-¿quien es usted?- en ese instante en el que aparece el profesor me suelta, pero yo sigo en el suelo- no se meta donde no le llaman.
Sin comerlo ni beberlo le da un puñetazo en la mandíbula ocasionando que este caiga al suelo rendido de una. Será maricon, luego si es valiente para tocar a una mujer.
Se apresura hacia mi y me ayuda a levantarme.
-No quiero meterme donde no me llaman, pero no puedes dejar que tu novio te pegue- ¿que? ¿Mi novio? ¿Por que no dices nada María?.
Yo me quedo en silencio mirandole y el hace lo mismo, yo tengo los ojos llorosos y el parece que también, no entiendo el por que pero me hace estremecer.
-Mañana quiero que en la hora del descanso tengamos esa conversación pendiente- me acaricia la mejilla a modo de consolación, levanta a Iván del suelo y se lo lleva, y mientras ahí estoy yo, como una estúpida mirando como se desvanece en la lejanía.
(...)
Son las 17:43, estoy tumbada en mi cama desde que llegué del instituto, no puedo pensar con claridad, no entiendo por que mi padre le permitiría a Iván tratarme así, quizá deba decírselo o quizá no, no se estoy muy confundida, sólo quiero que llegue Sofía y podamos pasar la tarde juntas y poder despejarme.
Se hacen las 18:07 cuando de pronto se abre la puerta, para mi sorpresa no es Sofía, cosa que me trae mucho disgusto cuando descubro a mi padre apoyado e el marco.
-¿Te ocurre algo hija?- pregunta desinteresado.
Me giro recostada hacia la pared para evitar mirarle a la cara.
-Estoy perfectamente- le suelto- pero la próxima vez que quieras algo de mi, esperas a que venga a casa y no me mandes a nadie.
-Sólo quería llevarte a comer por ahí- me giro y le veo sonriendo.
-¿enserio?- me descoloca su respuesta más de lo que esperaba.
-Claro hija, ¿que creías que era?
En ese momento llaman a la puerta y salto de la cama para evitar cruzar más palabras con mi padre, no me apetece hablar con el como si fuésemos una hija y un padre que se quieren, por que estaríamos mintiendo.
Abro y mi efusividad vuelve al descubrir a Sofía al otro lado, la verdad.
-hola maria- me sonríe tan tierna que no me resisto a un abrazo.
Me engancho a su cuello y masajeo su espalda a modo:"no nos hemos visto en 2 años".
Es increíble lo bien que puedes llegar a estar con una persona a la que acabas de conocer, es decir no con cualquiera, pero ella es diferente, le da igual la opinión de la gente, te da su ayuda si ve que la necesitas, piensa más en los demás que en ella, es muy agradable.
-hola Sofia- le digo a la vez que corto el abrazo-pasa.
-buenas...-dice cortada.
-hola bonita ¿cómo te llamas?¿eres amiga de mi María verdad?- ya está mama agobiando a mis amigas, en verdad es divertido ver como atosiga a preguntas a la gente, soy mala.
-hola, soy Sofía y si soy amiga de su hija- mira hacia el sillon de mi padre y las mejillas se le tornan rojas ¿por que tiene las mejillas de ese color?
-nos vamos al cuarto-le digo, tampoco quiero que este aquí si va a estar tan agobiada.
Una vez que llegamos al cuarto Sofía pasa y cierro sobre mi espalda.
-¿Que te ha pasado Sofía?- le pregunto un tanto extrañada.
-¿Por que lo dices?- vuelve su vista hacia mi.
-mirate- me acerco a tocarle la cara, pero se aparta de golpe.
-lo siento, yo...yo me voy, adiós- sale corriendo de la habitación.
-¿Sofía espera donde vas?- salgo corriendo detrás de ella y cuando esta justo por entrar al ascensor la agarro y la empujo hacia mi ocasionando que caigamos las dos como retrasadas al suelo.
-¿Pero que haces?-me dice Sofía.
-¿Que haces tu?¿Por que te estas comportando así de raro?- le digo bastante ofuscada.
-Solo una pregunta y te dejaré en paz, ¿el hombre del sillón era tu padre?- me pregunta achicando los ojos e impidiendo lágrimas.
-si, ¿Por que?- estoy muy confundida.
-suficiente - se va llorando.
¿Que coño acaba de pasar?
Vuelvo a casa y el estrés y la confusión se apoderan de mi, por lo que decido expresarme en una libreta, como mi diario, pero haciendo una historia, escribo todo lo sucedido con el profesor y recientemente con Sofía es raro, pero se siente mejor echar fuera todo. Echo esto ceno y me voy a dormir, pero justo antes de planchar la oreja suena mi teléfono, lo miro y es Sofía, no dudo un segundo y lo cojo.
-Dime Sofía- le digo con tono comprensivo.
-María yo...Yo lo siento...No quería...-esta llorando.
-¿Pero que ocurre Sofía?- me interrumpe .
-Mañanas no iré al instituto pero quiero hablar contigo sobre lo de esta tarde y aclarar las cosas.
-De acuerdo- corta la llamada y me acuesto intentando conciliar el sueño.
Son las 2:00 de la mañana y no puedo dormir por lo que decido escribir en mi diario la conversación con Sofía por teléfono.
A la media hora caigo rendida, sólo dios sabe lo que me espera mañana.
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El Profesor
Romance-¿Que quieres de mi?- dice ella un poco confusa. -Ni yo mismo lo se. Todos los derechos reservados.