Capítulo final

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Abro los ojos y la luz me ciega los vuelvo a cerrar e intento de nuevo abrirlos, pero con mas calma y despacio, todo se ve borroso. Cuando logro enfocar la vista veo  dos cunas, Por  lo que alcanzo a ver una de ellas está vacía, sigo mirando el cuarto y veo a Harry dormido en un sillón que se ve súper incómodo con uno de los bebés en brazos. Me da mucha ternura, sonrío. En eso el bebé comienza a llorar y Harry se despierta, me mira y sonríe. Se pone de pie con el bebe en brazos y camina hacía mí.

-Hola dormilona -me besa y miro al bebé.

-Es hermoso y muy pequeño -acaricio la mejilla de mi hijo con mi dedo índice y Harry asiente.

-¿Lo quieres cargar? -pregunta y asiento.

Me lo da y lo miro con cariño, le sonrío y él sólo me mira atento, me río al ver que no espabila y él sonríe.

-Reconocieron tu risa -se acerca Harry con el otro bebé, son idénticos.

Va a ser un gran trabajo diferenciar a mis pequeños traviesos.

-Al parecer sí, Harry tienen tus ojos -los dos tienen los ojos verdes.

-Y tu cabello -dice Harry y yo asiento.

-¿Ahora a quién le ponemos Daniel y a quién le ponemos Benjamín?¿cómo los diferenciamos? -le pregunto.

-Al que estás cargando le pondremos Daniel y al que yo tengo Benjamín. Eso pensé desdd que los vi y me di cuenta que Daniel tiene un lunar en el cuello y Benjamín no -yo asiento y comienzan a llorar a la vez, mezo a Daniel y su llanto cesa, pero su hermano todavía sigue llorando. Harry me lo pasa y le doy de comer.

-A dormir mis pequeños rubios -dice Harry mesiendo a Daniel.

Ya Benjamín está dormido pegado a mi pecho. Se lo sacó de la boca con cuidado de no despertarlo.

-Ahora sí somos una familia completa -le digo a mi esposo y nos besamos.

Cuatro años después...
-Mamá -lloriquea Daniel y me señala el carro que tiene su hermano.

-Mi moto -Benja se cruza de brazos y se ve precioso.

Mis minis hombrecitos.

-Ya dejen de pelear niños, son hermanos. Benja devuelvele el carro a tu hermano y Daniel devuelvele la moto a Benja -los regaño y hacen puchero, pero me obedecen.

-Así me gusta, obedientes, ahora sigan jugando sin pelear -advierto y ellos siguieron jugando felices.

Como ya leyeron pasaron cuatro años mis bebés están súper grandes y cada vez se parecen más a Harry, hoy ireamos a la boda de Peyton. Después de cuatro años mi amiga por fin se casa. En estos cuatro años, Melany y Liam se casaron y tienen una hija, se llama Bleer y tiene dos años; mi hermano también tiene un hijo, se llama Brayan y tiene tres años, se lleva muy bien con mis bebés. Nosotros nos casamos por la Iglesia tres meses después del nacimiento de nuestros hijos.

-Mi amor se nos hace tarde -Harry me saca de mis pensamientos.

-Ya, vámonos, llama a los niños -lo beso y trae a los gemelos.

Los trae cargados, Daniel se baja y corre hacía mi, beso su mejilla.

-¿Qué pasa mi amor? -le pregunto con voz dulce.

-¿Amos con tía Peton y Tío Ein? -dice y yo sonrío.

Mis hijos todavía no decen tan bien los nombres de sus tíos y pues algunas letras se las comen .

-Sí mi corazón, vamos -tomo su mano y caminamos al auto.

Nos acomodamos y Harry arranca al llegar ya están entrando a la iglesia, tomamos asiento y la ceremonia empieza, la verdad no presto mucha atención.

Cuando la ceremonia termina nos vamos a la casa que Zayn y ella compraron aquí en Londres, los niños se van a jugar con sus abuelas.

-Felicidades amigos -los abrazo.

-Gracias -responde Zayn cuando nos separamos.

-Dani y Benja crecen cada día más -dice Peyton y yo asiento.

-A bailar -grita Niall y todos vamos a la pista de baile.

Está sonando una canción lenta, beso a Harry y él me sonríe.

-Te tengo una sorpresa -le susurro al oído.

-¿Cuál? -pregunta y lo tomo de la mano.

Salimos de la pista y vamos a un lugar donde no hay tanta gente.

-¿Cuál es la sorpresa? -me pregunta nuevamente cuando nos detenemos.

-La luna está muy bonita hoy -digo mirando al cielo y él me toma de la cintura.

-No me cambie el tema señora Styles -me río.

-La sorpresa es que... Estoy embarazada -digo y cuando reacciona, me alza y me da vueltas.

En ese momento vemos que hay fuegos artificiales en el cielo y sonrío feliz.

-Te amo -me dice y nos besamos.

Sin duda viajar a París me cambió la vida. Todo comenzó con una hermosa casualidad que se convirtió en una linda historia de amor.

FIN

Hermosa Casualidad [EDITANDO]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora