GABRINETTE TODOS ESTÁN SORDOS.

NOCHE

Una noche de Halloween en la mansión Agreste se celebraba un gran desfile y una fiesta de disfraces en el gran jardín, todo París asistió a la gran celebración.

Los más grandes diseñadores se reunieron, entre ellos una de las más jóvenes diseñadoras que estaba escalando tan rápido con sus diseños inspirados en ladybug y chat noir, la señorita marinette de 28 años, asistió con un Vestidos tubo cortos rojos con un velo en la parte de atrás con un antifaz estilo ladybug.

La fiesta transcurría aburrida, el desfile comenzaría hasta la media noche, la pobre azabache estaba sola su mejor amiga alya se encontraba fuera de la cuidad celebrando su luna de miel junto a su nuevo esposo nino, el ex-amor de su vida estaba rodeado de muchas señoritas, marinette no podía siquiera acercarse a saludar.

Al dirigirse al daño se encontró con el gran Gabriel Agreste el cual llevaba un traje negro y un antifaz del mismo color, el cual la detuvo para decirle que el desfile se adelantaría que estuviera lista para las 10:30, un grupo de paparazis se acercaba, ambos estaban cansados de dar entrevistas y de las miles de fotografías que estos les tomaban.

Gabriel tomo la mano de marinette y los 2 entraron a un pequeño armario el cual estaba lleno de los abrigos de los invitados, cuando los 2 se aseguraron que no hubiese nadie cerca intentaron salir, pero la perilla de la puerta no giraba, ambos estaban muy cerca el uno del otro que podrían incluso oler sus respectivos perfumes.

Marinette se sentía un poco asustada por la gran oscuridad que avía, uno de los meseros tiro cerca del pequeño armario, una gran olla de metal haciendo un gran eco, el cual hizo a marinette saltar a los brazos de Gabriel, este la abrazo su vestido dejaba su espalda descubierta, Gabriel toco la suave y delicada piel de la joven.

Sin previo aviso el rubio tomo el mento de la azabache y le dio un delicado beso en sus labios que tenían un perfecto color vino mate, marinette se sorprendió bastante, cuando se separaron un fino hilo de saliva aun los unía, nuevamente se unieron en un más apasionado beso, las manos de Gabriel comenzaron a acariciar la espalda de marinette, mientas con su boca besaba su cuello provocando en esta pequeños suspiros.

Marinette se dio la vuelta pegándose contra la puerta, a lo que Gabriel levanto el velo rojo del vestido y comenzó a acariciar sus piernas los sonidos que hacia la azabache, excitaban cada vez más al gran Gabriel Agreste, sus manos subieron de golpe la parte inferior del vestido dejando su ropa interior expuesta, marinette hizo su cuerpo hacia atrás tocando la gran erección que Gabriel tenía en ese momento, dolía, ya no soportaba ni un minuto más.

Girando su cuerpo la joven quedo de frente a este, el rubio en un ágil movimiento bajo la parte superior del vestido dejando expuestos sus pechos, acariciando una de sus piernas comenzó a levantarla, sin soportarlo, la azabache abrió la cremallera.

Gabriel movió a un lado la ropa interior de marinette coloco su miembro cerca de la entrada de la azabache, mordiendo uno de sus pechos, en un momento sorpresivo y de dolor, la penetro, para que esta no diera un grito la Beso rápidamente, al comienzo las embestidas fueron lentas, dolorosa y un poco placenteras, poco a poco fueron aumentando su ritmo, ambos se movían al mismo ritmo, mordiendo ahora el otro pechos y levantando ambas piernas, las estocadas aumentaron marcando el gran final, marinette se abrazó a la cabeza de Gabriel, ambos soltaron gemidos al sentir el orgasmo.

Gabriel salió de su interior con mucho cuidado bajo las piernas de marinette y esta se recargo en su pecho intentando recuperar el aliento, las piernas le temblaban cual gelatina, Gabriel le reacomodo el vestido a la azabache.

Por fin la perilla giro y ambos, sintiendo el frio aire en sus rostros, Gabriel se acercó a su oído y le dijo que mantuviera esto en absoluto silencio, que era lo mejor que le avía pasado en un muy largo tiempo y que tal vez se volvería a repetir, dándose media vuelta el gran diseñador se dirigió a ver como seguían los preparativos para la pasarela.

Marinette se quedó sorprendida al notar que el pequeño armario estaba en medio de los dos grandes baños para invitados y que nadie se haya dado cuenta de lo que avía pasado o es que la música era muy alta o es que todos los invitados estaban realmente sordos, como fuera marinette entro en el baño de damas para arreglarse y estar lista para el gran desfile.