La Primera Guerra Entre Mundos

Capítulo 2: (día 1) El ataque.

Planeta tierra: Estados Unidos, 1/12/2016, 10:00 a.m.

El primer día del mes, 1° de diciembre un día cálido como los los demás lo raro es que no pertenecen a está parte del año, como las demás estaciones, en todo el mundo cambiaron si es debía ser otoño es primavera, invierno verano, primavera otoño, verano invierno y viceversa según en que hemisferio te encuentres. Pero no le dan mucha importancia ya que no cambia nada mas en la atmósfera terrestre. 

Hoy en la base militar de Los Ángeles, todos los soldados se quedaron en la cama hasta más tarde, ya que es tradición de la base que el primer día de todos los meses, los soldados pueden descansar mas tiempo y no tienen entrenamientos, solo para que recobren algo de fuerzas y tomen un poco de descanso de tanto trabajo duro. Ezequiel y Carl se despiertan y levantan primero, que sus otros dos amigos. Así que aprovechando el momento deciden hacerles una broma a Matias y Juan:

-¿Quieres tirarles unos cubos de agua helada? Ya tengo todo para hacerlo- Le pregunta Carl su amigo no tarda en responder:

-Vale, pero por cualquier cosa, fue tu idea, no mía no me quiero llevar otro golpe... Pero antes espera que me cepille los dientes- Dice ya que les habían hecho antes y la reacción no fue buena, acribillaron a golpes a Ezequiel, esto es  para que los otros dos no se enojen con él y le hagan lo mismo de la última ves. El joven se dirige al baño y de ahí toma la pasta y coloca un poco de ella sobre el cepillo. Se lo mete a la boca y por último se enjuaga con agua de la canilla. Para que luego ambos hagan un poco cada uno para la broma, Eze busco los baldes y algo que le sirva de escudo a los dos y por su parte Carl el hielo y lleno ambos cubos.

Se colocaron delante de la litera en la que Juan y Matias duermen tranquilos sin que nada malo les pase. Pero antes de lanzarles el agua Carl comenzó a contar:

- Tres... Dos... Uno... ¡Ya!- Al tirarle los cubos de agua a los dos, estos se levantaron asustados, uno se golpeo la cabeza con la cama de arriba. Pero cuando se dieron cuenta de lo que pasaba, se levantaron y se enfurecieron tanto que le golpearon en la cara a Ezequiel unas dos veces, este dolorido (y algo asustado)  se salvo de más golpes culpando a Carl de lo que sucedió:

-Yo no tuve la idea. Fue Carl, si van a pegarle a alguien peguen le a él, no a mi ya me toco mi paliza ahora le toca a él- Les dice antes de que lo golpearan otra vez. Las víctimas de la broma miraron a Carl y se abalanzaron sobre él para desfigurarle la cara a golpes, cosa que lo dejaría sin pareja por el resto de su vida ¿Quien quiere un tipo con cara destrozado como pareja?. Pero se detuvieron con lo que se empezaron a reír a mas no poder.

-Buena broma, digno de los dos- Dice Juan entre risas que no parece parar y los que hicieron la broma lo miraron con cara de desconfianza, esa no es la reacción típica de ellos ante una broma como la que les acaban de hacer, lo que hizo que Matias riera aún mas.

Era una risa un poco extraña. Los dos bromistas no se confiaban de sus amigos para nada. Algo malo les va pasar en el futuro.

En lo que los reclutas se hacían bromas, en el cuartel general es todo un caos, ya que todas las computadoras captan una señal muy fuerte que provenía de la órbita terrestre, aún mas cerca que la Luna misma, ya se ven varias resacas por tantas puntos rojos titilando y haciendo pi pi pi pi. Pero todos saben que es esa señal. La extraña nave de esta alianza alienígena llamados covenant, de los cuales no se sabia nada, solo su nombre, son tres razas y que son mas inteligentes que los humanos (como ellos habían dicho).

Lo que tampoco se sabe es su propósito, si son hostiles y quieren dominar la tierra, extinguirnos, esclavizarnos, etcetera. Hay miles de posibilidades si son hostiles. O por el contrario inofensivos, con el propósito de ayudarnos con nuestros problemas, darnos tecnológica nueva o hasta incluso defendernos de otras razas alienígenas, etcetera. Todos estos pensamientos se interrumpen cuando el general decide que den la orden que avisen a toda la base de lo que sucede, para estar preparados en caso de que se inicie un conflicto entre razas: