Capitulo 3

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Al amanecer del dia siguiente, mi abuelo llamo a mis padres con la intencion de invitarnos a la misa del domingo, del valorado como uno de los templos con estilo gotico realizado por un arquitecto italiano, conocido como la treceaba obra arquitectonica de tal estilo.
Otra de las razones del crecimiento exponencial del pueblo, segun cuenta mi padre, la iglesia estuvo inconclusa durante mucho tiempo, y cuando por fin se termino de construir, las alabanzas del vaticano retumbaron por todo el globo.
Asi que mi domingo pasaria de ser mi domingo a ser eo domingo de cientos de personas, desde devotos hasta curiosos en busca de un milagro, claro que todo con intencion de ganar algo, no siempre la religion se basa en la esperanza y reconocida fe, pero de igual manera no quiero entrar en temas de ese indole; y dedicarme el resto del dia a caer sobre el sentimiento de ahogamiento o mejor dicho, sonreir toda la mañana a desconocidos.
Ese dia fue suficiente para que sintiera nauseas, en el templo faltaba el aire, las personas me empujaban pero gracias a mi abuela, que consiguio con unos vecinos que se encontraban en una banca, la aceptacion para sedernos algo de espacio.
El banco era comodo, las campanadas de aviso resonaban por todo el sitio, al fin y al cabo, resulto ser como una platica motivacion que me subio los ánimos, las personas subían al escenario por asi decirlo, a leer un versículo o a contar como gracias a su fe; la felicidad, el dinero, salud y demás cosas interesadas, trate de no reirme de un hombre que tenia pinta de ser un granjero, decir que gracias a la decisión del señor por hacer que la compete ncia desvelara la verdad sobre sus pecados.
Era obvio que fue mala suerte para la competencia que unos clientes denunciaran falta de salubridad a hacienda, dato del cual me di cuenta dias despues.
La misa concluyo y tome la esperanza de salir al exterior a respirar.
Pero para mi mala suerte, todas las salidas se vieron llenas de personas, salir fue un chiste.
Ver a esa multitud de personas reunidas en un lugar hizo que me doliera la cabeza.
Al llegar a casa de mis abuelos, ya que estos nos imvitaron a almorzar, y como quede facinado por el sabroso pay del dia anterior, denote que seria un gusto pasar tiempo con ellos. A lo que mis padres aceptaron tambien, pero mi madre noto algo en mi actitud. Soy tan antipatico bueno solo a veces, es decir, soy buena onda con mis amigos, o eso creo, ya que mis padres me ven como amargado pero hago bromas al respecto y se les olvida.
-¿Quieres un trozo mas de pay Ken?
-Claro abuela -Tengo que aceptarlo, probablemente twnga una obseccion con el pay de mi abuela.
La conversacion entre mis padres y abuelos era aburrida, asi que sali de la casa y fui al patio trasero, subi por el tronco de arbol, asomandome asi por la cerca, pero para mi sorpresa no habia nadie, me quede esperando mirando hacia las esquinas de las cuadras...
-Oye Ken no te vayas a caer -dijo mi abuelo mientras se acercaba para sentarse en una banca que estaba proxima a la puerta trasera de la casa.
-Eres muy graciosa, pero es una cerca y no una valla.
-Lo se, pero te reiste y es lo que cuenta -me lanzo una seña para que me acercara a ella -¿quieres que te cuente algo?
-Si claro, que me quieres contar.
-Que me gusta como te comes mi pay, pero si no haces ningun deporte -en ese momento pense en como lo habria sabido, pero recorde que mis padres son de esos padres que no se guardan nada y terminan contandole todo a todos los conocidos- vas a engordar como tu abuelo.
En ese momento vi toda mi vida pasar, bueno, pensar en tener sobrepeso no me ayudaria mucho, seria genial comer todo el pay del mundo.
-¡Ken! -grito mi madre desde lo que parecia ser la parte del frente de la casa de mis abuelos.
Mientras caminaba hacia el origen de la voz de mi madre, mi abuela me toco el hombro deteniendome, de inmediato volte.
-Uno de ellos pregunto por ti ayer despues de que te fuiste.
-Gracias abuela -la abrace con cariño, esas palabras me habia alegrado y quitado un gran peso por irme abruptamente.

Pasaron las horas y termine leyendo un comic que me regalo mi mejor amigo de la ciudad, no he tenido conversaciones con el desde que me fui, aunque dejar en visto a un tu mejor amigo por dias para contestar solo cuando quisiera, quitaba mucha importancia a las redes sociales, ademas de tener un telefono heredado, cuando les pedi a mis padres un telefono hace varios cumpleaños, ellos consideraron que regalarme el celular de mi padre seria algo mas sentimental, asi que solo puedo recibir mensajes y llamadas en el telefono, algo de lo que nunca me voy a aburrir sera el celular, he tratado de desacerme de el, pero resulta indestructible.
Cada oportunidad que tengo para asi poder conseguir un celular nuevo es aprovechada pero sin exito, por ejemplo; aquella vez que avente el telefono celular a la piscina publica, claro que mis padres lo pusieron en un reciente con arroz y dias despues estaba como siempre; o ese dia que se me ocurrio aventarlo a horizonte, el vecino se quejo de tener que recoger las cosas que caian a su propiedad, asi que me regañaron por olvidar el celular en el jardin del vecino, a decir verdad, lo tuve que lanzar hacia la casa del otro vecino; pero despues de tantos intentonces, le eh tomado cariño al celular en forma de ladrillo.
La noche llego, pero para mi suerte, mi madre entro a mi habitacion.
-Mañana iremos para inscribirte en la secundaria asi que, a las 10 nos iremos.
-Entendido.

A la mañana siguiente paso lo tipico, me duche, desayune, subi al auto, partimos, y demas.
Pero para mi sorpresa, lo cual ya habia predecido, mi padre se estaciono en el estacionamiento de la enorme secundaria que habia visto antes, y que por la seccion de la ubicacion en donde vivimos, me tocaria estudiar en esa escuela, algo simple.
Habia mas personas caminando hacia la entrada, noa bajamos y caminamos, al llegar al edificio donde se exponian los trofeos y reconocimientos, un maestro nos daba la bienvenida.
-Los de nuevo ingreso al edificio de la izquierda, los de reingreso al edificio de la derecha.
Habia una larga fila, lo suficiente para agotarme de aburrimiento.
Era mi turno, espere durante mucho tiempo, o escasos siete minutos para que me entrevistaran con preguntas tontas, me revisaron la vista, el tipo de sangre, me preguntaron si tenia alergias, problemas psicologicos, lo normal.
-Eres el aspirante 0173, se te asigno el salon B-3 para la prueba de ingreso el lunes de la proxima semana.
-Gracias -dije tratando de ser amable, mi padre pago el examen, y nos retiramos.
Cuando caminabamos de regreso al auto por la entrada, me tope con JP que venia agarrado de la mano de su madre, la cual se veia como una mujer importante de negocios y su padre igual, salvo que este cargaba un maletin.
El me sonrio, le regrese la sonrisa y trate de voltear atras, pero mi padre me cargo para subirme al auto.
Durante toda la semana me prepare para el examen de ingreso, yo no era como las personas que no estudian y sacan una nota excelente en los examenes, o como las personas que se memorizan, yo tenia una forma diferente de aprender, adi que me sentaba en el escritorio a repasar lo mas importante, pero por alguna extraña razon, cuando tenia que estudiar me daban ganas de barrer, trapear, limpiar el cuarto, comer, o hasta de sacar a pasear el perro del vecino.
El dia llego, me presente puntual, al acabar el examen, indicaron que publicarian una lista con los alumnos aceptados para el nuevo curso escolar.
Pasaron los dias con la incertidumbre, hasta que llamaron a la casa, una mujer que era conocida de mi madre y antigua amiga de la infancia, la cual tenia una hija de mi edad, llamo para decirle que habian publicado la lista en el edificio donde exhibian los trofeos.
Tan rapidamente como fue posible partimos hacia la secundaria, al llegar mi padre no encontro estacionamiento, asi que mi madre y yo nos bajamos, mi padre continuo dando vueltas a la cuadra para conseguir estacionamiento.
Caminamos hacia el grupo de personas buscando el nombre de sus hijos en la lista.
Trate de buscar mi nombre entre la multitud de madres desesperadas, pero no lo encontre, mi madre seguia buscando, se retiro y se sento a lado de mi. Mi padre llego y nos vio sentados en el suelo.
-¿Que hacen exactamente?
-Esperamos a que se retiren las demas madres -dije impaciente.
¿Asi que no pudieron con esas mujeres desesperadas?
-Nos dominaron totalmente -dijo mi madre mientras otra madre llegaba aventando a las demas- hay que esperar a que se disipe.
Mi padre se sento junto a mi madre, mientras un maestros se reia de las madres que buscaban en las listas.
-Tranquilas, pronto se iran -dijo el maestro mientras me daba una paleta, camino por el pasillo perdiendose en la direccion, me comi la paleta.
Pasado el tiempo las madres se fueron, nos dispusimos a buscar mi nombre en la lista.

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⏰ Última actualización: Aug 22, 2016 ⏰

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