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Un día el cielo estuvo despejado y el mar en calma.

cuando atardeció no había ni una sola nube y el mar estaba en completa paz.

El niño se quedo observando a las familias que lo habían ignorado, viendo el cielo, estaban tristes, desesperanzados.

vio en ellos su propio reflejo. Entonces llamó a todos a la orilla del mar, se adentró un poco en ella, y comenzó a agitar los brazos sobre el agua, recogió la espuma y la llevó a la orilla. 

lo miraron agradecido por compartir su secreto y ahora todos pudieron dormir sobre cómodas burbujas,  en los días de calma y de tempestad.

FIN.

Siesta en la Orilla. (cuento corto)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora