Me llamo Kim (TN), tengo 20 años, trabajo como mesera y vivo con mi hermano Kim Jongin, alias "Kai", el es bailarin y pide que lo llamen así profesionalmente, ambos vivimos en un departamento, mis padres viven en China y nosotros en Corea, mi relación con mis padres no es muy amigable que digamos, según mis padres yo siempre suelo buscarme problemas y que no soy muy responsable en mi vida, a si que mejor opte por irme a vivir a otro lado yo sola, pero tiempo después mi hermano se mudó conmigo, ya que en Seúl tienen una buena escuela de baile, lo recibí con brazos abiertos y así ya no estaría tan solita, a pesar que mi hermano es más grande que yo por un par de años, nos llevamos bien, es divertido hacer fiestas de vez en cuando en el departamento o salir los fines de semana, buscamos la manera de pasarla bien.
Una tarde después de llegar de trabajar, me sorprendí al ver que Kai había hecho la cena, por lo regular yo lo hacía o salíamos a cenar fuera, cuando llegue sentí que algo no estaba bien.
-Hermanita llegaste, vete a lavar las manos para cenar.- me gritó desde la cocina.
-claro- contesté de inmediato.
Me apresure y fui a la mesa minutos después.
-Hermanito, ya estás listo para casarte.- mencioné en tono burlón.
*El me lanzó la servilleta* -Espero que si-
-Esta muy rico-
-Si oye tengo algo muy importante que hablar contigo- *note como notablemente fue cambiando su tono más serio*
*Lo mire detalladamente* -Dime-
-Regresare un tiempo con mis padres-
*Mis ojos se abrieron más de lo normal* - Y eso por que-
-Porque ya es algo de tiempo que no los veo o más bien vemos, tú también tienes que regresar y arreglar las cosas con ellos-
*Rodé mis ojos y deje escapar un suspiro* -No lo creo, ¿porque tengo que ser yo quien los busque?- dije algo molesta.
-Porque también son tus padres (TN), no estarás enojada con ellos para siempre.-
-¿Quien sabe?, Jongin has lo que quieras, yo decidiré eso después- me levanté algo molesta de la mesa, era la primera vez que discutíamos así, por lo regular nuestras discusiones son por tonterías, pero esta vez fue acerca de Algo real, caminaba hacia mi habitación cuando escuché: "Me iré en dos dias" entre a mi habitación y me tire en la cama, con la mirada al techo, pensaba en las palabras de Kai, "¿y si tal vez tenía razón?" "¿ya debería de hacer las pases con mis papas?" esas preguntas invaden mi mente, pero no estoy segura de que hacer, preferí dormir y olvidarme de eso.
Al día siguiente me desperté y me arreglé como todas las mañanas para ir a trabajar. Llegaba puntual a mi trabajo, ser mesera tiene a veces varios lados buenos y a veces malos, entre los buenos me agrada conocer a varias personas y en los malos es que a veces suelen aparecer personas un poco arrogantes y presumido, tal era el caso de un cliente en especial, es muy alto, guapo, cabello obscuro y siempre viste elegante oh por lo menos siempre suele usar camisas, siempre viene a comer, suelo atenderlo yo, a ninguno de mis compañeros les agrada él. Simplemente el a veces era amigable y otras veces muy arrogante...
Como siempre el se sienta en una mesa para dos, yo me acerqué para anotar su orden.
-Buenos días, ¿puedo tomar su orden?- fijen en tono amable.
*Me miro fijamente, sentí in poco pesada su mirada*-Un café, ahorita ordenó lo demás- me dijo en un tono muy grave.
Asentí con la cabeza y me dirigí a la cocina para que prepararán el café, minutos después otro chico entró y se sentó en la silla enfrente de el, el era muy diferente a este chico, no era muy alto, cabello castaño claro y portaba una hermosa sonrisa, que se contagia. Lleve el café.
-Buenos días ¿que va ordenar?- le dije aL chico de cabello castaño.
*Me dio una sonrisa*-Chocolate y unos waffles, por favor- dijo con una sonrisa.
-Claro, enseguida lo traigo-
Note como la mirada del chico de cabello obscuro me seguía, trate de no ponerme nerviosa y como automáticamente se giraron a ver al chico que estaba enfrente de el. Lleve las orden que faltaba. Ellos hablaban mientras comían, en eso poco después note como se empezaron a poner tensas las cosas en la mesa en la que estaban sentados, cuando iva para ver si había un problema, choque con el chico de cabello obscuro, golpeó mi hombro, pero siguió caminando, no dije nada ya que mi contrato de trabajo me lo prohibía pero, note qhe iva enojado, así que sólo me dirigí a la mesa donde se encontraba el otro chico de cabello castaño.
-Emm ¿Todo bien?- me acerqué tímidamente.
*Note la mirada ida y confundida del chico* -Si, no te preocupes, cobrate de la comida y el cafe-
*Lo hize*
El chico se levantó y antes de marcharse dijo: "Siento mucho si te causó problemas, lo siento"
-No te preocupes, sólo espero que se solucionen los problemas-
-Gracias, no te preocupes- me dedico una sonrisa.
Mire como se marchó y al regresar con los compañeros me preguntaron que había pasado, les conté lo que más o menos se, escucharon con atención. Me quede pensativa en que hubiera pasado, no había visto a ese chico tan enojado, a veces gritaba pero sólo era por que no le llevaban las cosas como el queria, pero está vez era deferente. Término mi turno y regrese a casa, al llegar pude ver varias cajas, no pude evitar ponerme un poco triste, me quedaría sola, pero ya no había otra cosa que hacer.
-Hermanita, vamos a comer- dijo al Kai
-Claro, deja me cambio- decía mientras entraba a mi habitación.
Minutos después, íbamos a algún restaurante, encontramos uno de comida china, nos sentamos a comer, estuvimos hablando y recordando grandes momentos. Aunque no quería admitirlo, tenía miedo de quedarme sola, ya me había acostumbrado a la compañía de Kai. Regresamos a casa, me acosté en mi cama mirando al techo, pensando en lo que había pasado en el día.
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Love me Right
FanficTN Kim Lee, una chica de 20 años, vivía con su hermano Kai, su vida un cambio cuando su hermano se muda y la deja con un par de deudas, en su trabajo conoce a un chico frío y un poco arrogante sin pensar que el también tiene problemas, ambos se con...