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—Seré tu amigo.—él solo sonrío, yo respondí a aquella tímida sonrisa.

Me siento mal, no lo se, como si fuera una basura, estoy jugando con un chico que puede morir, ¡Dios!

—¿Que hay con lo de la FBI?—Sirvio mi desayuno.

—La verdad, no se por que me despidieron, tampoco es como que me importara, pero no tengo nada más que...—Calle de golpe ¿Que debía hacer? ¿Contarle sobre Peggy? Mala idea.

—¿Que qué? —Levanto su ceja mirándome.

—Que... A mi perrita.—Dije mintiendo.

—Algo ocultas Jin, ¿Quieres ser encerrado? ¿Torturado, tal vez?—Me negué.

—Esta bien, pero si alguien se entera, te matare.

—Tranquilo, ahora somos amigos... O el intento dé.

—Peggy, es todo para mi...—Comence a decir, cosa que me interrumpió.

—Si tienes novia ¿Que haces aquí?—Creo que esta enojado, o algo parecido.

—¿Qué? ¿La altura te quemo la ultima neurona existente dentro? Si tuviera novia no estaría contigo, pedazo de idiota, ella... Es mi hermana menor.

—¿Peggy? ¿No es un nombre Neoyorquino?

—Si. Mis padres eran padres guardadores.—Me estaba mirando con nostalgia.—Claro, aun lo son, solo que yo nunca fui parte de ello.

—Que triste...

—Es mejor así... Cuando la veo sonreír me llena de alegría, al menos se que no hicieron nada malo con ella.

—Contigo tampoco.—Me sonroje.

—¿Me cuentas algo de ti?—Evite hacer contacto visual, enfocándome en mi tostada.

—Tenia diez años... Mamá tenia un trabajo de noche, en las calles de New York, ya sabes...—Miro sus manos.—un día, llego hecho un mar de lágrimas, estaba embarazada y ella no lo sabia, tenia cuatro meses, pero lo aborto, ella no pudo seguir yendo a trabajar, su estado mental no se lo permitía, lloraba día y noche, así que yo fui el que se encargo de ambos, robe, humille, golpeé a la gente, pero jamas me vendí, hasta que llego un hombre, uno que me prometió mucho, quería ser grande, así que acepté, mi primer intercambio de marihuana—¿Por que justo esta conversación? —Teniendo doce años, me acostumbre a ese mundo, luego conocí a TaeHyung.

—¿Es tu novio?

—Es un idiota, pero no es mi novio, puedo jurar que nadie se fijaría en mí.—Esa manera de mirarme, es como si tuviera que decirme algo pero no lo dice, pero lo expresa con los ojos.

—¿Por qué lo dices?—Me impresiono a mi mismo formulando la pregunta.

—¿Porqué? Pues, mira me ¿Que piensas cuando me ves? Soy horrible, como persona, como hombre, como todo.—Le detuve, le sonreír y le dije, «Puede que sea un idiota, pero no eres horrible NamJoon, eres mas de lo que te imaginas, solo debes tener un sueño»

—¿Sueños?

—Si, con una meta, todo es mas entretenido y fácil.

—Eso es para la gente idiota, ¿Sueños? ¿Con que propósito?—Alegó.

—Mira, una de las cosas que la gente hace, es tener una meta.

—¿Que pasa si eso no se cumple? Te frustras, desesperas y te decepcionase, todo por un capricho.—Sonreí ante su argumento.

—Si, pero de errores se aprende Nam, la vida te enseño a no confiar en nadie, pero aun así quieres que no toda la gente sea igual, pero no te fíes de cualquiera.—Me miro un momento.

Disparame (NamJin)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora