Dangerous Love [NARRY STORAN]

Capitulo-8

Niall y Harry habían pasado algunas horas en el hospital revisándolo que todo estuviera bien, finalmente llegaron a casa. En cuanto entraron a la casa los padres del rubio lo esperaban con más de 30 hombres que inmediatamente esposaron al castaño.

— Papá que carajos te pasa, ¿Por qué detienen a Harry? — El rubio al igual que el castaño se encontraban confundidos.

— ¡Porque creímos que este tipo te había secuestrado! — Señalo al castaño.

— Suéltalo, no me secuestro de hecho él fue quien estuvo conmigo todo el día en el hospital porque esta mañana, por si no estabas enterado sufrí un pre-infarto. ¡Así que no tienes ningún derecho a tratarlo de esa manera! — Harry a pesar de la situación en la que se encontraba, sentía tan bien de que el rubio le hubiese dado su lugar, sobre todo que lo defendiera de su propio padre.

— Hijo yo no lo sabía creí que... —Donald el padre de Niall sabía de lo que era capaz de hacer su hijo, y de lo que eran capaz de hacer las demás personas por obtener algo de él.

— ¡Tú siempre con tu paranoia!, ¡Deja de fingir que te importo! Y por si no fui lo suficientemente claro, no vas a despedir a Harry. Suéltenlo— Niall estaba cansado del comportamiento de su padre sobre todo que fingiera que de verdad se preocupaba por él ya que un día lo escuchó decir que hubiera preferido que nunca naciera, él estaba consciente de que no le importaba a nadie excepto el castaño, aunque no se hacía muchas ilusiones ya que quizá el de nuevo lo abandonaría como hace años lo hizo.

— Yo siempre me preocupo por ti eres mi hijo —

— Por favor hace un par de meses te escuche decir que hubieras preferido que yo naciera, pues déjame decirte que existen los condones, tal vez si los hubieras conocido antes yo no estaría aquí— Niall de su bolsillo de sus pantalones saco 4 paquetitos de condones y se los lanzo descaradamente en la cara a su padre para después subir hacia su habitación. Harry y la señora Louisa solo se habían limitado a observar la escena sin pronunciar palabra alguna. Soltaron a Harry que no dudo ni un minuto en ir detrás de Niall.

Harry toco un par de veces la puerta pero no obtuvo respuesta por parte de Niall, con sigilo abrió la puerta, sabía que en cuanto el rubio lo viera se molestaría con él, pero conociéndolo temía que hiciese cualquier locura.

— ¿Niall? Te encuentras bien... Niall — Harry reviso toda la habitación y no había rastro del rubio. Entonces recordó su lugar favorito, sin pensarlo dos veces se dirigió hasta ahí y entonces lo vio que se encontraba observando a través de la ventana, sintiendo el gélido aire como despeinaba sus cabellos dorados.

— No te enseñaron a respetar la privacidad de los demás —

— Es que yo creí que... —

— ¡Con un carajo! Estoy cansado de escuchar esa puta palabra "yo creí", todo el mundo al parecer es la única palabra que sabe decir— Niall estaba molesto pero no precisamente con Harry sino con su padre y con las demás personas que lo rodean, pero se estaba desquitando con alguien que no lo merece y que solo intenta ayudarlo.

— Niall solo estaba preocupado por ti, no te encontré en tu habitación y temía que hicieras cualquier estupidez. Lo único que quiero es ayudarte— Niall respiro profundo y después se dio media vuelta para mirar a Harry quien se encontraba a unos dos metros de distancia y lo miraba preocupado.

— Lo sé, es solo que ya me conoces —

— En realidad ya no conozco a este Niall que esta frente a mí pero quisiera hacerlo, quiero conocer todo de ti tus defectos, tus virtudes — El rubio se acercó hasta el castaño y lo abrazo, por alguna extraña razón se sentía bien en los brazos del castaño, sentía que su sola presencia lograba calmarlo y darle un poco de serenidad. El castaño, cada vez que el rubio ponía sus brazos alrededor de el sentía una sensación que jamás había sentido con nadie, Niall lograba despertar en el sensaciones tan profundas que aparentemente no tenían explicación, en su mente. Pero sabía que debía tratar de descubrir que era eso inexplicable.