"Amores Perdidos"/ Vocaloid/

Capítulo 2| Siguiendo.

Ya no es algo que no quiera dejar. No puedo hacerlo.

(...)

— ¿Alguna frase que le guste?

— El querer y el poder no es lo mismo.

(...)

Cuando estuvieron en el cuarto de Rin, los niños se encontraban asombrados por el tamaño de la habitación, por lo en solterón un «Guau». excepto Len quien se encontraba sin fuerzas para siquiera respirar, claro que por su orgullo no pediría un vaso de agua.

— Que cómodo. — exclamo Meiko recostada en la cama junto a Kaito.

— Si, es muy cómoda. — afirmó él azulejo.

— Gracias. — se limitó a decir.

— ¡Dijeron que les gustaba mi cama! — molesta Miku e inflado sus mejillas.

— Si, pero esta más. — contestó Meiko sin problemas. — ven y prueba lo si quieres. — invitó.

Miku la miro aún más molesta.

— Si, ven. —le sugirió también Kaito a lo que la niña muy ilusionado sonrió.

— ¡Si! — aceptó.

— ¡Ustedes también chicos  vengan el suelo se abre!

Así, los niños la pasaron bien por un rato entre risas y cosquillas. Hasta que...

— ¡Juguemos a preguntas y respuestas así nos conoceremos! —sujerio Meiko.

— Yo empiezo. — se aprontó a decir Kaito.

— Bien, ¿cual es tu nombre completo?

— Fácil, Kaito Kion Shion.

— Edad y eso. — evito usar la palabra sexo.

— 12 años y niño bien masho. Otra.

— ¿De los que estamos aquí a quien prefieres? — soltó de pronto sorprendiéndolo.

— ¿Qué?

— ¿A quién prefieres a Len, Miku, Rin o a mí? — susurró lo último por la cercanía.

Todo estaba en silencio.

— Yo...¡prefiero a Len es mi favorito y lo amo! — grito por el estrés sorprendiendo a todos pues por la tensión que se había formado y sonrojando al rubio.

Meiko no lo soporto mas y fue la primera en carcajear,— ¡No jodas! — dijo entre carcajadas.

— ¡Pero, Len no te quiere! — chillo Miku.

— La verdad no. — afirmó el rubio agitando la cabeza de arriba a bajo.

La niña rubia que había estado observando en silencio sin en tender comenzó a reír en compañía de Meiko, mientras que los demás la miraron reír.

— “Lindas ” — pensaron los chicos incluyendo a Miku.

— ¡Ah, pero que lindas! — gritó Kaito quien beso las mejillas de ambas con una mano y las tiro.

— ¡idiota! — le empujó una sonrojada Meiko para luego levantase y caminar hacía la puerta,  antes de irse comentó. — Iré por algo de tomar.

— Puedes pedirle a Maika que te ayude, es la que tiene el cabello...— no tuvo tiempo de decirle nada pues esta ya se había ido.

— Deja la, así es ella. — le resto importancia Kaito.