Verte acostada a mi lado me recuerda a las flores. Con vida, brillante y muy hermosa; pero a veces peligrosa y con muchas experiencias tristes y solitarias, incluso marchita. ¿Las flores hermosas alegran la vida de una persona? Ese no es nuestro caso, o por lo menos no el mío. He llegado a amarte tanto mi bella flor como te he lastimado, estás a punto de marchitarte, necesitas sol y agua para sobrevivir y lamentablemente yo soy como un fuerte aire que arranca tus bellos pétalos.
Pero me encargaré de que tu sol salga y te salve de este mundo al que te he condenado.
—¿No has dormido?— preguntas al despertar y verme sentado a tu lado.
—Me quedé viendo las flores.— respondo con sutileza, tú me miras confundida.
—Pero aquí no hay flores, Taemin.— no contesto y le restas importancia. Quitas las mantas sobre tu cuerpo y sales de la cama. Me supongo que vas a la cocina.
Me paro al estar solo en la habitación que compartimos. Observo la foto que una vez obligaste que nos tomemos y sonrío. Yo en verdad no odiaba esa fotografía como tanto decía. Entonces recuerdo el por qué estoy contigo, a tu lado y amándote.
Salvaste mi vida que estaba a punto de sumergirse en la oscuridad del mundo, llegaste con ese esplendor de tan digna flor, me iluminaste un poco el camino y tomado de tu mano nos aventuramos a caminar por él. Por desgracia, esa luz que llegaste a compartirme ahora te la estoy opacando con la oscuridad que me rodea. No. No quiero arrastrarte a un lugar como éste después de que me ayudaste.
Juré protegerte y eso hago, eso estoy por hacer. Espero que lo comprendas.
Salgo de la habitación y te encuentro en la cocina. Dejas de tomar agua al verme y dejas el vaso en la mesada. Tus ojos incrementan su brillo y muestras la expresión que haces cuando algo anda mal. Cuando notas que algo anda mal conmigo.
—¿Pasa algo? ¿Robaste de nuevo?
Lo hice muchas veces. Tenía que mantenerte, a ti y a nuestra vida. Lamento habértelo ocultado, no tengo de otra. Pero eso no es lo que sucede esta vez, por lo que niego con la cabeza y me acerco a ti.
Tomo tu mano y te llevo al pequeño sofá. Captas la indirecta, me sigues y terminas sobre mis piernas a horcajadas. La misma mirada sigue. Decido evitarla y te beso. Correspondes el beso, mis manos empiezan a acariciar tus mejillas, las tuyas juegan con mi cabello.
—Te amo.— digo separando nuestros labios y te miro.
— Taemin...
— Y lo siento.— ahora tú eres la que me besa.
Mis besos bajan a tu cuello a la vez que mis caricias a todo tu cuerpo. Te encargas de quitarme la camisa, yo de besarte. Nos encontramos sin ropa. Y entonces te hago mía por última vez.
Nos duchamos juntos y salimos de la misma manera. Creo que sería lo último que haríamos sólo tú y yo. Nos encontramos en la cama. Te mueres de sueño pero eso no es impedimento para que me observes. Mi mano reposa en tu cabello y lo acaricia. Mi intención es que duermas. Son alrededor de las tres de la mañana y seguimos de la misma manera.
—Es todo, me voy a dormir.— el sueño te gana. Te reincorporas, me besas y te acuestas de nuevo dándome la espalda.
Con el sabor de tus labios en los míos aún, me hago a la idea que estoy a punto de irme de tu lado. Apago la última luz que queda en la habitación aparte de ti y hago como que dormiré también. Pasa exactamente una hora y me encuentro saliendo de la cama. Me visto, tomo la chaqueta que me regalaste y te miro a la vez que me la pongo. Te miras tan tranquila y hermosa. La luz de la luna que entra por la ventana hace combinación con la luz que posees, mi bella flor. Saco el sobre lleno de dinero de la mochila que llevo y lo dejo en la mesa de noche junto con la carta que te escribí esta mañana cuando fuiste al supermercado. Te observo de nuevo, nuestros rostros están a pocos centímetros. De mis ojos salen las lágrimas que estaban guardadas. Beso tu frente con mucha delicadeza y me alejo de ti.
Y entonces dejas de ser una hermosa flor brillosa, y te conviertes en una hermosa flor solitaria.
Adiós, hermosa flor solitaria.
Me voy de tu lado para que puedas seguir tu vida sin ningún obstáculo. Sin ningún estorbo como en el que me convertí sin que te dieras cuenta. Mereces un hombre bien, justo y con moral. Todo lo contrario a mí, un cobarde ladrón con una vida y pasado demasiado oscuros como para ser salvados. Mi presente y el tuyo a partir de este momento tiene un futuro diferente. Alejarme de ti es lo mejor que puedo hacer. Lo hago por ti y sólo por ti, no pienso condenarte más. Te amo mi flor, siempre te amaré y desde lo lejos estaré viendo como floreces en todo su esplendor.
Adiós, no estés triste por estar sola.
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Heeeeeeey, esto es nuevo para mí; empezando por el hecho que es la primera escribo con esta forma narrativo y de que es de Taemin de SHINee. LOL. La verdad es algo que he hecho rápido porque se me ocurrió de la nada y bueno, Taemin es mi bias y amo la canción Sayonara Hitori, so, las cosas se dieron solas.
Espero les haya gustado, o bueno, leído ¿¿¿. No estoy segura de haberlo hecho bien, pero bueno, con la práctica se aprende.
Aquí les dejo al bello de Taemin:
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Nos leemos a la próxima. Gracias de antemano. Jae's xx ❤️✨.
