Nuevas vacaciones Malec [TERMINADA]

"Magnus, llegaremos tarde"

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    Buenaaaas ¿Cómo están después de tanto tiempo? Aquí _HeyBoys_ voy a comenzar a edita    las partes de ésta obra, tal vez una por semana o una por día, no lo sé pero haré los               capítulos más extensos. Espero que les guste el cambio.

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El avión saldría a las 9 pm del jueves, y Magnus aún no decidía que llevar. Tenía planeado poner en la maleta todo su armario literalmente, era alguien con tanta ropa que seguramente estaría toda una eternidad guardándola. Alec, por su parte, ya había terminado de llenar su pequeña, al pensar de Magnus, maleta negra. Lo que llenaba más dicho equipaje eran: las armas y su cinturón. Luego venía el equipo de cazador de sombras, con sus botas; pero también había ropa que comunmente Alec usaba cuando no iba a cazar demonios.

Magnus afirmaba que no había necesidad de aquello puesto a que eran vacaciones y las mismas siempre se tratarían de descansar, el ojiazul sólo se limitó a encogerse de hombros como si no quisiera tener una pequeña charla con su pareja de que los demonios no descansaban y que probablemente serían atacados. El brujo pensaba que su novio estaba siendo dramático con respecto al tema.

—Magnus ¿Tardaras mucho tiempo más en la ducha?

Alec miraba el reloj pegado en aquella pared purpura, ya eran las 7:30 pm y Magnus todavía no salía del baño lo cual no extrañó para nada al nephilim, después de todo quien era su pareja parecía ser la pareja más meticulosa del mundo, sin nombrar obviamente que se había comenzado a arreglar a las 3 pm. Era obvio que cuando los vieran juntos pensarían como era posible que un nephilim simple como Alec estuviera con alguien tan llamativo como Magnus, sin mencionar que era el Gran Brujo de Brooklyn.

Fuera de la puerta se encontraba un exasperado Alec, caminando de lado a lado como si con eso pudiera apurar a su marido que se quejaba porque el delineado no le quedaba de la misma manera en ambos orbes "¿No puede simplemente usar magia y ya?" Había preguntado un día llevándose una larga y muy tediosa charla de que el maquillaje era algo que la magia no podría arreglar. Obviamente su hermana Izzy estaba fascinada de oír al brujo, el pelinegro sólo contaba los segundos para irse a entrenar con su parabatai.

Se habían casado hacía unas 2 semanas y ya Magnus, con anterioridad, ya tenía pensado todo el viaje y a qué países irían teniendo una lista de eso:
·Argentina,
·Brasil,
·Alemania,
Y algunos países más.

—Ya voy Alec, este cuerpo hermoso que te comes no se arregla solo. -contestó Magnus con una risita de por medio.

Alec ya acostumbrado a esto sólo sonrió y puso los ojos en blanco negando con la cabeza, cuando estaba por salir de la habitación hacia la cocina apareció el brujo por la puerta del baño ya cambiado y maquillado. Realmente se veía tan sexy, pensó Alec mordiéndose el labio inferior. Llevaba una camisa purpura con lentejuelas sobre las solapas abierta hasta por debajo de las costillas, el jean apretado de un color más bien rosa chillón con unos zapatos negros y suela roja. Obviamente era de esperarse que las falanges largas y bronceadas las tenga llenos de brillantes anillos y su pelo en puntas con purpurina de varios colores.