El Niñero *Rubius Y Tú* (Adaptada) [TERMINADA]

Capitulo 59

Entramos a la cocina, cruzaba mis dedos porque mi familia tomara así mi relación con Rubén. Aunque convencer a Josh iba a ser más que complicado. Pero ya llegaría el momento de hablar con él.
—Ya sabía que había algo especial entre ustedes…— me dijo mientras comenzaba a servir jugo en un vaso de cristal. Solté una pequeña risita tímida y seguramente mi rostro ahora estaba de un intenso color rojo. —La primera vez que viniste, la forma en la que te miraba era tan especial— me senté en la barra y ella se sentó frente a mí con una taza blanca llena de café en sus manos.
—Él… él es increíble…— dije sincera
—Me alegra mucho que esté contigo… — sonrió — ¿Tus padres ya lo saben?
—Aún no…— confesé —Estábamos esperando un buen momento para decirles— y no como lo de anoche.
Un pequeño chillido nos sobresaltó a ambas, reímos. Había sido el tostador. Tomó una bandeja donde seguro colocaría las rebanadas de pan. En ese mismo momento sonó el teléfono.
—____… ¿cariño puedes responder el teléfono?— me pidió
—Claro— respondí y caminé hacia donde estaba el teléfono que no paraba de sonar.

— ¿Diga?
— ¿Casa de la familia Doblas?— una gruesa voz provino del otro lado de la bocina
—Así es
—Solo para informarles que el joven Rubén Doblas Gundersen ha sufrido un accidente automovilístico—Sentí como si todo a mí alrededor comenzara a derrumbarse. Escuchaba a lo lejos los llamados del sujeto y también los de Pathy. Pero el gran nudo en mi garganta no me permitía emitir palabra alguna.

— ¿___ que te sucede?— la mano de Pathy en mi hombro me hizo reaccionar, tapé mi boca y le entregué el teléfono. Las lágrimas invadían mi rostro. No podía ser cierto. Si hace tan solo unas horas todo era más que perfecto. Limpié mis lágrimas ya que nublaban mi mirada. Pathy escuchaba con atención mientras negaba con la cabeza, al igual que yo cubría su boca con una mano.

—Gracias ya mismo estamos allá—confirmo Pathy en la línea, justo en ese momento bajaba por las escaleras 'el padrino', quien obviamente se sorprendió/asustó por nuestros rostros. Pathy trataba de contener las lágrimas. — Rubén tuvo un accidente, una camioneta perdió el control y se impactó contra su auto… y se volcó— no resistió más y se soltó en llanto mientras que el mío no cesaba

—A ver, tranquilas…— nos dijo a ambas —____ avísale a los chicos… creo que será mejor que Jazzy no se entere… — tenía razón
—La llevaré a mi casa, ¿está bien? así se distrae con Ana— pensé y le comenté solo asintió con la cabeza.
—Nos adelantaremos los esperamos allá— Pathy fugazmente subió y bajó con un abrigo, en cuestión de segundos estaba parada sola en el living de la casa de mi hospitalizado novio. Subí a grandes zancadas las escaleras, llegué a la habitación de Janathan, toqué la puerta dos veces y entré. No podía esperar a que el chico se despertara y me abriera la puerta.
—Jonathan…— lo moví un poco pero solo conseguí que se quejara un poco y se girara —Jonathan despierta…— insistí aumentando la fuerza de los movimientos, las lágrimas comenzaban a salir nuevamente al pensar en Rubén — ¡Jonathan despierta ahora!— le grité y este se sobresaltó lanzando las sábanas
— ¿Qué pasa?— preguntó asustado y aún más se asustó al ver mis lágrimas — ¿Qué pasa ____? —preguntó nuevamente, pero mi estúpido dolor en el pecho no me dejaba hablar
— Rubén... Rubén, Jonathan—alcancé a decir en un hilo de voz —Tuvo un accidente y está en el hospital.
— ¿Qué?— soltó un grito ahogado — ¿Y mis padres?— preguntó tomando sus pantalones de uno de los sillones, ni cuenta me había dado que solo vestía bóxers
—Ya van rumbo al hospital— le informé —Me dijeron que les avisara, que Jazzy no se enterara, la vamos a dejar en mi casa…— le dije y salí corriendo de la habitación para ir hacia la de Daniel.

Le expliqué todo a Daniel, el se ofreció en avisarle a Jazzy, ya que la pequeña no me creería que ‘no sucedía nada’

—Tranquila, todo va a estar bien…— me trató de tranquilizar Jonathan—Ese Rubén es más duro que una roca—bromeó pero no podía evitar sentirme así. Abrió la puerta y una oleada de aire helado nos envolvió —Ya vuelvo— cerró la puerta y corrió escaleras arriba para después bajar con un par de gruesas chaquetas.
Me entregó una mientras él se colocaba la otra. Apenas la tomé entre mis manos, el perfecto aroma de Rubén inundó mis fosas nasales. Haciendo que las lágrimas volvieran a acumularse en mis ojos. Jonathan volteó a verme cuando los pasos en las escaleras se acercaban. Aniquilé toda lágrima con el dorso de mi mano. Respiré profundamente y traté de verme lo más normal posible.

— ¿A dónde iremos?— preguntó la pequeña
—Nosotros a unas compras que tenemos que hacer y tu iras a mi casa ¿Quiéres jugar con Ana?— le pregunté y esta sonrió
— ¡Sí!— dijo alegre
—Vamos…— le dije y todos salimos.

Subimos a la camioneta de Jonathan, yo de copiloto y Jazzy y Daniell atrás. Introdujo la llave para que encendiera, pero como hecho intencionalmente, no encendió. Intento tras intento Jonthan se rindió
— ¡No puede ser!— gritó al mismo tiempo que golpeaba el volante
—Te dije que necesitaba arreglo…—hablo Daniel
—Si, gracias Daniel…— le dijo molesto Jonthan, sin siquiera darles tiempo a pensar en una solución saqué mi celular y marque a la primera persona que me pasó por la mente. Josh.

Bajé del auto seguida por Jonathan ya que le había hecho una seña a Daniel de que nos esperara dentro.
— ¿Josh?— ese estúpido nudo como amaba atascarse en mi garganta
— ¿Qué pasa ___?—preguntó preocupado ante mi tono de voz
—Necesito que me hagas un favor…—trataba de que no se cortaran las palabras
—Lo que sea
— ¿Puedes venir por mi?
— ¿Dónde estas?— me preguntó acelerado
—En… en casa de Rubén — rogaba que no se molestara
— ¿Qué haces en casa de ese? ¿Qué te hizo?
— Josh…— mi llanto había aumentado —Josh, Rubén tuvo un accidente y está en el hospital

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Lo prometido es deuda, aquí está el capítulo.
Ya falta muy poco para que la novela acabe