Lexa le dio un sorbo a su cerveza y miró a Costia. La rubia parecía muy complacida con todo el jaleo que había armado al llegar a la barbacoa. Tendió un plato de costillas humeantes frente a ella y a la morena se le hizo la boca agua. Su estómago se retorció de hambre y se frotó las manos. La verdad era que había decidido ir a la barbacoa porque necesitaba despejar la mente luego de la llamada que había recibido esa tarde y porque adoraba las costillas. Nunca desechaba una invitación a comerlas.
Gracias a su metabolismo de nadadora, podía comer lo que le diera la regalada gana. Claro que como buena profesional y obsesiva que era, cuidada su dieta... hasta cierto punto.
Un par de cervezas de vez en cuando tampoco venían mal. Siempre con moderación.
Notó que Costia comenzaba a encenderse un cigarrillo y la miró de reojo.
-Costia-La aludida la miró-Sabes lo que odio el humo...
La rubia puso los ojos en blanco.
-Si mal no recuerdo, cuando entraste a la universidad se te podía ver echándote un pitillo por los pasillos-Respondió divertida dejando el cigarrillo a un lado.
-Sí, pero eso era cuando tenía dieciocho y podía nadar ochocientos metros hasta dormida-Suspiró-Cuando te vas haciendo mayor las cosas cambian.
-Qué responsable-Dijo Costia irónica hincándole el diente a sus costillas, embadurnándose la cara con la salsa.
Lexa sonrió divertida.
Le agrada Costia. De hecho le gustaba bastante y le pareció divertida la relación que tenía con su hermana menor.
Lexa no tenía hermanos, pero estaba segura de que no era normal tanto odio.
-Tu hermana está mirándote como si quisiera asesinarte-Murmuró Lexa comiendo con ganas. Casi gimió de lo bueno que estaba aquello.
Costia miró hacia donde estaban sentadas Raven y Clarke.
La menor de las rubias estaba comiendo con tenedor y cuchillo y de forma muy pulcra. Mientras que la mayor seguía con la cara sucia como una niña pequeña.
Costia le lanzó un beso y Clarke puso los ojos en blanco.
La rubia mayor notó que los ojos de Clarke se iban escurridizos hasta Lexa. No podía culparla, Lexa era una obra de arte, pero se suponía que a Clarke no le gustaban las chicas.
-De hecho está mirándote a ti, cariño-Lexa levantó la vista y Clarke apartó sus ojos sonrojándose.
La morena sonrió a medias.
-Probablemente también quiera matarme.
Costia le dio un gran sorbo a su cerveza riendo.
-¿Tú también quieres una foto?-La imitó partiéndose de risa-Esa ha estado buena.
Lexa frunció el ceño.
-Su amiga se acercó a tomarse una foto ¿Cómo iba a saber que ella no?
Costia siguió riendo y la miró con intensidad.
Dios mío, Lexa Woods era sexy incluso cuando comía costillas asadas.
-Sabes que no eres el centro del universo ¿verdad?
-¿Ah no?- Lexa rio-He vivido engañada toda mi vida-Dijo irónica y le dio otro sorbo a su cerveza.
-Además, mi hermana probablemente no tenía idea de quien eras. Sácala de sus libros y va perdida por el mundo.
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In Too Deep
FanfictionAU: Clarke Griffin pensó que a su corta edad, el mayor de sus problemas (además de la nefasta relación que tiene con su hermana mayor Costia) era estudiar en una universidad tan exigente como Harvard. Sin embargo, cuando regresa a San Diego para pas...