Capitulo 15

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~Capítulo 15~

Niall al ver esto me rodeo con sus brazos para darme un abrazo.

En eso llegó mi mamá para llevarme a casa y así poder descansar.

...

El día siguiente mi mamá me dio permiso de faltar a la escuela por lo que había sucedido el día anterior. La verdad es que no se lo agradecí ¡sólo era una pequeña cortada! aparte quería ver a mis amigos antes de las vacaciones culturales ya que lo más probable es que no los vería en esas dos semanas.

Me desperté como a las seis de la mañana porque olvide quitar la alarma de mi despertador.

Comencé a leer mi libro que días anteriores había comenzado. Yo jamás leía, pero mi adicción por la lectura aumentó cuando leí los libros que se encontraban en el librero que pertenecía a mi padre.

Leí al menos por cincuenta minutos hasta que mi estómago me impidió continuar. Vi la hora y eran las siete y media, no había desayunado aún así que me puse mis pantuflas moradas para dirigirme a la cocina.

Mi mamá no se encontraba en casa ya que había salido para arreglar unos asuntos de su viaje de trabajo así que supuse que hoy me tendría que hacer el desayuno.

Al bajar me encontré con un plato lleno de fruta, huevo y tocino y junto al plato una taza de café. Agradecí a mi mamá por hacerme de desayunar porque sinceramente yo nunca había servido para la cocina.

Me senté para así poder comenzar a desayunar cuando oí que tocaron la puerta.

¿Quien tocaría a las siete y media de la mañana entre semana?

Me levanté de la mesa para dirigirme a la entrada algo frustrada porque tenía hambre pero mi frustración término cuando abrí la puerta.

-Niall...-dije algo confundida. ¿No se suponía que estaba en la escuela?-.¿Qué haces aquí?

-Vine a ver si estabas bien-Dijo.

-Entra-dije invitándolo a pasar-.¿Por qué no lo estaría?-Continué.

-No fuiste a la escuela-Dijo mientras se sentaba en el sofá.

-Es que mi mamá me dijo que me quedara en casa por mi brazo-Dije y en ese instante Niall se paró y se sentó junto a mi.

-¿Por qué?-Dijo con un tono de preocupación-.¿Te duele?

-No, ya estoy mejor solo que mi madre se preocupó mucho- dije tratando de calmar su preocupación. ¿Esa preocupación era por mi?

-Me alegro- dijo sonriendo.

-No era necesario que vinieras-dije-. Me pudiste mandar un mensaje o llamarme.

-Quería verte, aparte no hacíamos nada en la escuela-dijo y yo reí por su comentario.

-Estaba desayunando, ¿quieres algo?-dije mientras me dirigía a la mesa y lo invitaba a sentarse.

-No gracias-dijo sentándose en la silla de alado.

Seguí comiendo y sólo veía como me observaba comer. Era extraño y una vez que me había terminado de desayunar hable.

-¿Que?- pregunté algo extrañada.

-Nada-dijo-.¿Oye por qué no vamos a algún lado?-continuó.

-¿A dónde quieres ir?-pregunté.

-Que te parece si vamos por un café.

-Pero y mi mamá...-dije ya que si llegaba mi mamá y no me encontraba en casa se infatuaría.

-Tranquila no iremos tan lejos- dijo.

-Esta bien- dije-. Sólo déjame arreglarme porque no pienso salir en pijama.

Subí las escaleras y me puse un pantalón, una blusa y unos converse. Sujete mi cabello con un chongo mal hecho y tome mi bolsa. Yo no era de las chavas que se tardaban horas arreglandose, era todo lo contrario.

-Listo-dije.

Cuando baje el se encontraba recargado en una pared esperándome y cuando me vio se ofreció a abrirme la puerta. Esos eran los detalles que me enamoraban.

Comenzamos a caminar hacia un Starbucks que se encontraba a una cuadra de mi casa. La verdad es que yo no tenía idea de que se encontraba ahí ya que casi nunca salía pero ahora que sabía que había una cafetería ahí, podría ir a leer mi libro mientras tomaba una taza de café.

Al llegar nos formamos en la fila para así poder pedir nuestro café.

Niall se ofreció a pagar el mío ya que había olvidado mi dinero en mi tocador pero algo me decía que igual lo habría hecho si sí llevara dinero.

-Gracias por su compra, vuelva pronto-.Dijo la señorita que nos cobró.

Nos sentamos en una de las mesas. Todas estaban vacías ya que era martes y usualmente todos los papás trabajaban y los hijos iban a la escuela.

-Te ves muy linda hoy-. Dijo Niall y yo solo lo mire extrañada.

-Claro que no Niall, estoy más desarreglada que nunca-. Dije.

-Para mi siempre estarás hermosa-. Dijo y sentí como la sangre me subía a mis mejillas. No sabía si lo decía en plan de amigos o en plan de... novios, ese tema ya lo habíamos aclarado aunque de eso ya había pasado un mes...

Hubo un largo silencio, yo lo veía a los ojos y el me veía a mi. No podía negarlo, aún me gustaba. Nuestros rostros comenzaron a acercarse y sentía como su respiración acariciaba mi piel hasta que sentí sus labios chocar con los míos.

The Fire Inside Our HeartsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora