Desperté en el suelo, con la cobija en la cabeza y las almohadas en las piernas, reflexione, mirando al techo, últimamente no hacía más que dormir, comer, ver películas y leer. Todo eso completamente sola.
Sentí un jaloneo en la pierna derecha, unas manos frías se habían colado en mi pierna y con fuerza habían tirado de ella, como si fuera una bolsa de basura. Me senté sobresaltada, no dormía con nadie y siempre, antes de dormir, le echaba pestillo a la puerta. Intente ver con la poca luz que se colaba por entre las cortinas, entre las cuales logre ver la ventana levemente abierta. Y corrí, corrí como no lo había hecho en años, corrí como cuando se me quema la comida, solo corrí, quitándole es pestillo a la puerta y bajando las escaleras a trompicones, pasando por la sala e ignorando los gritos de mi padre. Termine en la puerta de entrada, apoyando mis manos en las rodillas, tratando de regularizar mi respiración.
Mire hacia atrás, procurando no desnuncarme ante la velocidad obtenida en mi cuello y observé todo a mi alrededor, asegurandome de que nada me hubiese perseguido. Finalmente no hallé nada, pero tenía el leve presentimiento de que estaba teniendo los primeros síntomas de la locura.
Camine con pequeños pasos, aún sin bajar la guardia completamente, debía asegurarme al 100% de que nada raro estuviese pasando en mi casa – o que me estuviese pasando a mi – y así poder llamar a la policía o algo por el estilo.
Estaba llegando a la cocina cuando me puse a pensar, ¿Podría yo, una humana normal, vencer cualquier tipo de anomalía?. No. Obviamente no. ¿Quien siquiera podría hacer algo de ese grado de magnit...?
-Nicole West Collins, ven aquí en este instante- La voz autoritaria de mi padre hizo eco en el pasillo, haciéndome entender que se hallaba enojado –cosa que no pasa todo el tiempo– .
-Si señor, ya voy- Agarrándome de las paredes, me guie hasta llegar a la sala de estar, posando los ojos en mi padre, quien se encontraba sentado en el sofá -¿Podrías explicarme en este momento que diablos te pasa?-
Objeté unos segundos, dudando en si contarle o no a mí padre lo que me había pasado hace un rato.
Decidí no decirle nada, sólo que había salido corriendo de esa manera porque esperaba un "paquete" desde hace unos días, él dudo un poco pero al final terminó creyendo me.
•••
En todos estos días había estado haciendo un poco de frío, y hoy no era la excepción, el frío era, sin duda mi clima preferido, en esta época del año en especial. Era simplemente perfecto, el poder quedarse en casa durmiendo hasta tarde sin preocuparse de el calor, el poder leer un libro y tomar café o chocolate caliente, el hacer galletas o el simple hecho de tirarme al suelo y no hacer nada me fascinaba.
Me arrope hasta la nariz con la mantita más cálida que tenía, me encontraba en la sala, bebiendo chocolate caliente y viendo por la ventana como caía la lluvia, Gravity falls era sin duda un lugar hermoso, raro pero hermoso. Su singular fauna era maravilloso, y que hablar de la flora, este lugar siempre me fascinaba con sus tonos en las mañanas, el cálido de las tardes y el silencio de las noches. Pero, aún no lograba entender la rareza de este lugar, una rareza que siempre provenía desde lo más profundo del bosque, o por los alrededores de aquella extraña cabaña, Mystery Shack.
La vida es una ilusión, el universo un holograma, compra oro.
Esa frase.
La había estado soñando con frecuencia, y cada vez que la soñaba, algo malo ocurría. Tenía tantas preguntas sin respuestas lógicas, como centenares de formas de como resolverlas pero sin dar resultados.
Desde la ventana, ví correr a dos niños, como de once o doce años, al parecer gemelos, corrían detrás de un cerdito, que llevaba un objeto extraño en el hocico. El niño, se detuvo por unos segundos, como buscando algo, hasta que sus ojos se encontraron con los míos, eran raros, como de un color amarillento y un tipo de línea sustituyendo las normalmente usuales pupilas.
Que extraño.
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Bien, hasta aquí el primer capítulo, espero que les haya gustado.
Un saludo a lily-Cipher , mi prima del alma. A la cual amo mucho –la quiero matar–
Bye.
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Soilless; Bill Cipher & Tu
Romance- ¡Sabía que no debía confiar en tí! - Le grité, mandándolo todo a la mierda. - Pero igual lo hiciste - Y la que valió mierda, fui yo. ... portada por: Lily-cipher - Por la fotaca que nos tomamos, cheketetah No se aceptan copias Ni adaptaciones, est...