Él siempre tan indiferente y frío. Y le gustaba serlo.
Ella tan cálida y rota. Y no quería serlo.
Ella quiere a él.
Él a veces actúa como si quisiera alejarla y otras, como si quisiera quererla.
Ella, no sabe que está haciendo con su vida.
Él, tampoco.
Ellos son los polos opuestos.
El agua y el fuego.
El calor y el frío.
Una vez dijeron que los polos opuestos se atraen.
No obstante, ellos existen para destruir al otro.
Porque al final, uno va a terminar por consumir al otro
Hasta llevarlo a la muerte.