Temptation || Vinny Mauro y Tu ❤ ||

Ella

Vinny veintidós, Devin veinticinco, Josh veintiséis, Ryan veinticuatro. Eran colegas desde que tenían memoria, vivían en la misma ciudad y habían pasado por cosas similares en sus vidas. Los cuatro con los mismos ideales, a pesar de la edad de cada uno su especialidad siempre había sido robar, robar de manera limpia y sin que nadie sospechase sobre ellos.  Más que un talento una habilidad grandísima. Los cuatro, pertenecientes a la mafia más grande del país, la mafia "Temptation".
Devin sacudió las bolsas de dinero y los billetes cayeron agrupados en grandes paquetes sobre la madera maciza del tablero, una sonrisa grande se instaló en devin, el robo había sido un completo éxito justo como los cuatro lo habían planeado desde hace muchísimo tiempo
-Esta...- Balz sacó una lata de cerveza de la nevera -es porque pudimos contra esos imbéciles -¡se los dije! No sería difícil- tomó de su cerveza dejándola por la mitad, al terminar  se limpió con su propia piel
-En tiempo récord hermanó-  le codeó Ryan que apareció detrás de los tres
-El robo del siglo- le siguió Devin - insuperables- mencióno susurrando ya que toda su atención estaba  concentrada en esa montaña de billetes que estaba sobre el tablero de su viejo departamento
-¿Han visto las noticias?-  preguntó Vinny
-No... pero seguramente todas las encabezamos nosotros- se burló devin, todos rieron excepto Vinny  
-¡Sí imbécil! Las encabezamos nosotros y la estúpida cajera que me ha visto en el banco- se quejó vinny, Aquello le afectaba sobre manera  pues era la primera vez que había aceptado dejar ver su rostro por sus víctimas
-¡Oh joder! no me digas ¿está hablando? 
-Más que eso me está describiendo- le explicó Vinny seguido de eso tomo las llaves de su viejo Mustang que adornaban su pantalón -Si no la quito del camino, va a joderme-  refunfuñó, Balz se río en su sitio. Su amigo era capaz de cualquier cosa, y eso les enorgullecía de alguna forma, los tres lo vieron salir del departamento de Devin.
Explicar lo que era Vinny, era un completo misterio, ni siquiera él mismo se conocía. Hace dos años había entrado a rehabilitación por voluntad propia. Era un tipo malo,  perdía el control muchas veces sin necesidad de que alguien lo hiciera  enfadar, era enérgico y totalmente impulsivo, frío, calculador y egocéntrico apesar de ser el menor de los tres conocía perfectamente lo que era la vida y lo mal que esta jugaba a veces, Por eso y por muchísimas cosas más era quién era y nadie nadie podía con él.
(Vinny Narra de nuevo)
Encendí el auto y "Empire State of my mind" sonó de inmediato, pense en muchas cosas, El auto avanzó. ¡Joder!  pobre Sara ni siquiera se imaginaba lo que le costaría haberme conocido esta mañana, pero se lo merece, si se meten conmigo se hunden -Qué lástima- pense en voz alta, pero no me arrepentiré ni tendré ningún remordimiento al contrario me divertiré mucho esta noche, tal vez ni siquiera matarla hará falta tal vez Sara pueda darme algo mejor a cambio. Seguramente mantendrá la boca cerrada si la hago gozar un poco, es solo cuestión de pensarlo un par de veces. Por suerte, eh estudiado muy bien la vida de cada uno de los trabajadores de ese banco, conozco sus nombres, sus casas, sus vidas, las personas que los rodean, todo... absolutamente todo,  lo único que no conocía... era a ella, un recuerdo vago vino a mi mente, seguí manejando al compás de lluvia que empezaba a caer de pronto un recuerdo más un ligero recuerdo de ella ¿Por qué no la conocía? ¿Acaso no los había estudiado perfectamente a todos?  ¿Por qué ella no? -se me había escapado de una manera increíble- mojé mis labios con delicadeza.  Estaba buena no podía negarlo ni lo haría no lo haría nunca, me había llamado mucho la atención, de tan solo recordar ese precioso trasero que adornaba su cuerpo ¡Joder! Me ponía muchísimo el solo recordarla, cerré los ojos y los volví a abrir tratando de no tensarme demasiado si lo hacía tendría que parar a medio camino para hacer ciertas cosas pensando en ella... detuve el auto el primer semáforo de la calle me lo ordenaba, el parabrisas se llenó de varias gotas de aguas continuas baje la ventanilla un poco, necesitaba sentir el aire fresco que la lluvia me ofrecía jale un poco de aire fresco cerrando mis ojos cuando los abrí me tope con la silueta de una mujer que estaba a punto de cruzar la pista, Era... ella.