We are Liars|| Rubelangel

Capitulo VIII

La atmósfera en el cuarto era incómoda, silencio alrededor de ambos, asustados de hablar y romper el silencio. Miguel miró hacia sus zapatos, tosiendo un poco para tratar que Ruben haga algún sonido. Afortunadamente, Ruben habló.

"Así que..." comenzó. "Esto no era lo que tenía pensado para un lunes." Ruben murmuró, tratando de hacer que la conversación fluya.

Por alguna razón su odio hacia Miguel desapareció en el aire como si nunca hubiera existido, y se siente vacío cada vez que mira a Miguel. Como si toda su vida hubiera sido arrancada de su cuerpo, o cómo si estuviera descubriendo cómo se siente alrededor del pelinegro. ¿Lo odia? ¿Quieres ser amigos con él? No tiene idea, así que por ahora, sólo actuará normal.

"Yo tampoco. Pensé que estaría en casa en mi laptop, pero aquí estoy." Miguel soltó una risita mirando hacia arriba.

"Oh, ¿es lo que haces los lunes? Yo hago lo mismo." Ruben contestó, y Miguel quería corregirle y decirle que estar en su laptop era algo que hacía todos los días.

Pero quería verse cool. Así que sólo asintió. Con la excepción de que le hubiera gustado decirlo antes de que Ruben vuelva a hablar.

"Eso es lo que hago cada noche. No tengo vida, realmente y no me gustan los deportes. Y probablemente sólo vea los de televisión." Ruben dice con una sonrisa.

Miguel ríe, "Sí lo sé, e igualmente. Hago lo mismo."

El momento incómodo volvió, y el silencio fue rápidamente interrumpido por gritos de afuera.

"¿Qué fue eso?" Ruben se preguntó así mismo en voz alta, y los ojos de Miguel se abrieron en sorpresa. Era Troye, y Miguel trató de encontrar alguna forma de cubrir su presencia.

"¡Olvídalo! Creo que.. c-creo que deberíamos hablar sobre la revista." Miguel dice y lamenta haber dicho aquello. Obviamente Ruben no ha pensado en aquello, y de seguro pensará que sólo vino a hablar sobre aquello.

Ruben suspiró mostrándole a Miguel que estaba pensando. "Tengo una idea." Ruben dice de la nada después de minutos.

"¿Cuál es tu idea?" Miguel pregunta, y el castaño se sienta en su cama.

"Deberíamos salir."

Miguel casi se cae. ¿Salir? Estaba tratando de safarse de su estúpido crush que descubrió hoy, pero en realidad estaba camuflado con molestia, y diciendo que deberían salir no era esperanzador. Ruben habrá notado el rostro de Miguel porque lo siguiente que hizo fue corregirse así mismo.

"¡No, no! Quiero decir, salir falsamente. Todos no crearan que no estamos saliendo, y no importa lo que haremos o digamos, ellos no pararán. Así que pretenderemos que estamos saliendo oficialmente, y decir luego de varias semanas, o quizá después de un mes romperemos y todos se olvidarán de que alguna vez salimos." Ruben dijo tratando de convencer a Miguel.

"¿Crees que funcionará?" Miguel preguntó dudoso, y Ruben alzó los hombros.

"No tengo ni idea, probablemente será como un tirar una moneda y esperar a que salga cara." respondió, alzando los hombros de nuevo.

"¿Qué hay sobre Troye?" Miguel murmura, tratando de no incomodar a Ruben con tantas preguntas. Y trató de no irse de la pieza al ver como la sonrisa del castaño se agrandaba al escuchar aquel nombre.

"Él entenderá, es una encantadora persona. Necesitan introducirse mutuamente, todavía no se conocen. Oh, haz escuchado.. ¡Estamos saliendo! ¡Troye y yo! ¿Es por eso que preguntaste? ¿Quién te lo dijo?" Ruben preguntó repentinamente.