No soy contagiosa

665 46 11
                                    

-¿Que? -Pregunto arrastrando las palabras.

Zack cambia su mirada de mí al frente y de nuevo a mí.

-Nada solo que la última vez que te vi borracha me obligaste a estamparte contra una pared.

-Bueno, dudo que puedas hacer eso dentro de un coche.

-¿Me estas subestimando?

-Solo llévame a casa -digo recostando mi cabeza y cerrando los ojos.

-Estamos estacionados hace casi media hora -se ríe

-¡No es vedad! -Miro por la ventana -Oh, sí, es verdad. Bueno gracias, adiós. -Intento abrir la puerta pero esta con seguro.

-Te ayudare -dice y se baja.

Se acerca a mi puerta y la abre. Me ayuda a bajar posando su brazo en mi cintura y el mío en sus hombros. Caminamos por todo el patio delantero y entramos a la casa.

-Oh, ¿Cuándo decoramos? -pregunto

El solo rie y me ayuda a subir las escaleras. Entramos en la habitación.

-Qué bonito cuarto tengo -digo con una sonrisa.

-Gracias -dice.

-¿Hace cuánto tengo una televisión?

-No es tu cuarto Gio, es el mio. -dice riendo -no iba a dejar que llegaras a tu casa asi.

-¿Te vas a aprovechar de mi porque estoy borracha? -pregunto sentándome en la cama. Resvalo y caigo al suelo.

-Solo si me dejas -dice levantándome con fuerza y pegando mi cuerpo al suyo. -Acuéstate, yo dormiré abajo.

-De acuerdo -sonrío y me alejo de él. -¿Me prestas alguna camiseta?

-Toma. -se saca la que lleva puesta y me la entrega.

Me quito la ropa, lo escucho respirar agitadamente. Ni que fuera tan bonita. Me recuesto en la cama y lo veo salir por la puerta. Tomo mi celular y marco su número.

-¿Si? -dice a través del celular al mismo tiempo que abre la puerta.

-¿Por qué te fuiste? -pregunto.

-Estoy aquí.

-Ven, aquí -digo dándole palmaditas a la cama.

-¿Segura?

-Sí.

Veo como se acerca a la cama, se quita las zapatillas y se acuesta a mi lado quedando frente a frente.

-¿Segura? -pregunta de nuevo todavía a través del celular.

-No -digo echándome a reír.

Pega su frente a la mía y sonríe. Cierro los ojos. Cuelgo el teléfono y lo meto debajo de la almohada, siento que él hace lo mismo antes de quedarme dormida.

Siento como algo vibra escandalosamente bajo la almohada. Abro fuertemente los ojos y veo que ya es de día, la luz del sol entra por la ventana a través de las cortinas y se refleja en un espejo que hay tras la puerta formando un arcoíris en el techo.

Meto la mano bajo la almohada para sacar el celular de Zack. No para de vibrar y él ni siquiera se mueve.

-¿Si, quién es? -digo al contestar. No llegue a ver el nombre antes de hacerlo.

-¿Tú quién eres y dónde está mi novio? -dice una voz chillona del otro lado.

-Oooh, así que tú eres su novia, bueno, él está aquí, a mi lado.

OPUESTOS (editando)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora