Capítulo 46

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- Que? Me vas a acompañar?- pregunte al ver como Sole recogía todas sus cosas y las metía dentro de su cartera.

- Si, obvio.- me sonríe mientras bajamos del vehículo.

Apenas salimos del auto y yo ya comencé a temblar de frío, odio el invierno la puta madre.

- Tenes frío no? Yo te dije que te abrigar... La puta madre.- su cara cambia drásticamente, y era obvio, apenas mire para la puerta del colegio y ahí estaba el, con sus típicos vaqueros ajustados y encapuchado con una campera negra acercándose a nosotras.

Apenas lo veo y voy corriendo hacia el auto. Consigo llegar antes de largarme a llorar de nuevo. Por que mierda aparece? Por que puta me busca? Por que garcha me hace esto.

Soledad se acerca rápido, enciende el auto lo antes posible, y nos vamos.

- Perdón Male, te juro que yo no sabia que el estaba acá, no tenia por que obligarte a venir...- dice luego de un rato de silencio en el que sólo se oian mis llantos.

- Vos no tenes la culpa, que ibas a saber que el estaba acá, al contrario, vos me tragiste para distraerme, para no estar encerrada por el resto de mi vida...

- Es que, si yo no te hubiese obligado a venir, vos no habrías pasado ese mal momento.

- Yo sabia que algo así iba a pasar en cualquier momento, y era obvio, y no iba a poder evitar encontrármelo o verlo en donde el me busque, pero vos no tenes la culpa.- conteste intentando que no se sienta culpable mientras me limpiaba las lágrimas y le sonreía leve.

- Me bancas 5 minutos? O venís conmigo?- me pregunta cambiando de tema mientras estaciona el auto frente a un supermercado.

- No, deja, te espero, con esta cara no pienso salir a ningún lado, parezco un payaso en blanco y negro.- dije riendo leve.

La verdad, es que apenas bajo del auto me large a llorar, me siento bien para la mierda, sólo que no quiero que Sole se eche la culpa.

El dolor sólo parece ir cada vez de mal en peor cuando no tengo con qué distraerme, cuando me quedo sola con mis pensamientos y mis recuerdos y, por supuesto, cuando veo las 15 llamadas perdidas de Agustín en la pantalla de mi celular y los 10 mensajes de texto que no pienso leer por nada del mundo.

Todo en mi cabeza da vueltas, y la verdad me cuesta entender toda esta situación, después de todo, sigo siendo una nena a la que cualquiera puede venir y hacerla mierda, esa pendeja ingenua que pensaba que él le iba a dar bola de verdad...

•10 minutos después•

No se por que Soledad demora tanto, que mierda fue a comprar vooooo.

Miro hacia por la ventanilla en donde caían mi una gotas de lluvia, y a lo lejos, veo a su figura acercarse, siento como mis ojos se llenan de lágrimas por milesima vez en todo el día, si, se acercaba Agustín, esto no va a terminar bien.

Para El Amor No Hay Edad ~ Agustín Casanova (EN EDICIÓN)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora