Karma camina hacia su casa, después de haber sido noqueado por Karasuma había comenzado a calmarse un poco pero eso no hacía que dejara de preocuparse por su pequeño amigo *Nagisa... ¿Dónde estás? Por favor regresa* ni él mismo podía reconocerse, el fuerte, egocéntrico y malvado Akabane Karma no había hecho ninguna broma de mal gusto ni molestado a ninguno de sus compañeros durante los últimos 6 días y es que estar tanto tiempo sin saber sobre el paradero de la persona a la que amaba lo había cambiado *parezco una adolescente enamorada...* pensó, se detuvo en seco ~lo soy~ dijo casi en un susurro esbozando una sonrisa resignada ante su cambiante actitud y continuó su camino
Al llegar a su casa pudo sentir un escalofrío recorrerle la espalda ¿Qué era eso? Lo había estado sintiendo toda la semana y empezaba a preocuparse, algo malo ocurriría pero aquel hormigueo en su cuerpo solo conseguía que se inquietara más *dime que estas bien por favor* pensó antes de entrar a su hogar y ser saludado efusivamente por su madre
Pov. Karma
Al abrir la puerta de mi casa pude notar la deslumbrante sonrisa de la mujer que me había traído al mundo, ella al verme vino corriendo hacia mí y se me colgó abrazándome por el cuello
~¡KARMAAAA BIENVENIDO CARIÑO!~ dijo la mujer súper feliz
¿Qué le sucedía? Ella solía ser un poco más seria y solo mostraba ese lado efusivo suyo cuando algo verdaderamente bueno iba a pasar
~madre ¿Qué te sucede?~ pregunte intentando descubrir la razón de su sonrisa
Ella solo me miraba, y me seguía mirando, su mirada comenzaba a molestarme y finalmente después de tanto tiempo (6 míseros días) volví a hablar con mi sarcasmo habitual, debía admitir que aparte de Nagisa mi madre era la única persona con la que podía actuar tan naturalmente.
Mi madre es una mujer muy perspicaz a la que no le puedes esconder nada ya que si ve algún cambio en tu personalidad hace de todo por descubrir que fue, lo que me llevo a llamarla "vieja chismosa" sobrenombre por el que se ha enojado muchas veces pero ella me conoce y sabe cómo soy así que nunca llega a tomárselo en serio
Ella, al igual que mi padre, había estado de viaje las últimas 2 semanas por lo que me sorprendió que no me avisara que estaba en casa. Su sonrisa no desaparecía sin importar lo que le dijera pero seguida a la "sofisticada" conversación que llevábamos esta se cayó me miró fijamente y finalmente hablo
~Karma ¿Qué me escondes?~ dijo con tono serio y mirándome sin una pisca de la felicidad que hace solo unos segundos desbordaba de su cuerpo
~tu siempre consigues descubrir lo que le pasa a la gente ya deberías saberlo ¿no?~ respondí con el mismo tono
~esta vez es diferente... esto no me gusta no he podido encontrar nada de información todo lo que te rodea está muy bien protegido, demasiado para mi gusto~
~si no tu sabes que es lo que pasa ¿Cómo esperas que yo sepa algo?~ trate de desviar la conversación hacia otro lado, sabía que todo lo que tuviera que ver con Koro-sensei estaba fieramente resguardado por el gobierno era normal que no descubriera nada
~Karma a mí no me engañas~ dijo haciendo un puchero ~cuando llegue la casa emanaba una fuerte sed de sangre y para que esta se sienta sin que haiga alguien dentro de la casa algo muy malo debe haberle sucedido a mi pequeño sádico ¿me equivoco?~ dijo con una sonrisa triunfadora tan parecida a la mía que me hizo enfurecer
~no deberías meter tus narices donde no te llaman madre~ dije sonando tan frió como era habitual en mi ~es solo una advertencia de tu pequeño hijo~ continúe esbozando aquella sonrisa sádica con la que me caracteriza
ESTÁS LEYENDO
Te Perdí... Regresa A Mi Por Favor (Karmagisa)
FanficNagisa a desaparecido después de pelear con Karma, teniendo todo en contra para poder ser libre Dejando a todos sus amigos confundidos y mucho mas a un pobre pelirrojo que se quedo con tantos sentimientos atrapados dentro de él. La clase 3-E hace lo...