2:00 a.m.

182 25 19
                                    

De: @amolastortas.anonium.com
Para: @blogprincipalA.anonium.com

El cuerpo me dolía horrores, y aunque parezca estúpido caí dormida pero llorando mientras lo hacía.

Recordaba que mis abuelos habían dicho cosas. Cosas como:

--Estúpida.

--Pendeja.

--No te vas a graduar.

--No irás al baile de graduación.

--No irás a la Universidad.

Y todo se escuchaba en un eco tremendamente sonoro y molesto.

Este era mi fin. Aurrine mi futuro con algo que no valía la pena. Yo misma ya no valía la pena.

El día después de los suceso mi abuelo entró a mi cuarto, y dijo que iríamos a la preparatoria para darme de baja.
Yo no podía hablar.

Llegamos a primera hora a la escuela y directo a la oficina del rector.

Y yo me moría de vergüenza. Porque ya saben que el rector es el padre de Dereck. Y no sabía realmente lo que el sabía de mi. No sabía que le platicaba Dereck a el.

Mi abuelo me dijo que me quedara afuera y esperara. Y así fue como pasó.

No logré escuchar nada de nada de lo que decían dentro. Estaba sentada y llorando como una maldita loca. Los alumnos pasaban y me miraban y decían cosas como:

--Que impresionante. ¡Nunca había visto a una ballena llorar!

--¿desde cuando los cerdos lloran?

--espero que lloré grasa para ver si así baja de peso.

Y todo eso solo provocaba que yo llorara más. Hasta que alguien se sentó a mi lado.

--¿esta todo bien?

Y reconocí su voz entre millones de voces que lograba escuchar. Porque su voz era mi salvación. Porque su voz era el canto que le gustaba a mi corazón. Su voz lo era todo.

Y abracé a Dereck con todas mis fuerzas. Sin escatimar. Sin pensar en quien putas me viera. Y lloré como lloraría una gata haciendo cosas raras con un gato a mitad de la noche.
Ya ya, lo se no es para tanto, pero de verdad que lloraba.
Y el pasó uno de sus brazos sobre mi y me levantó. Y me llevo con el a la cafeteria. Y compro un té verde para mi (Joder, sabía que me gustaba el té verde) y un café capuchino para él.
Y se lo conté todo, y la forma en como me miraba me hacía saber que en verdad me estaba escuchando.
Y cuando termine de contarle, me sentí profundamente aliviada.

Aliviada hasta que mi abuelo entró a la cafetería acompañado del rector y me hizo una seña de que fuera con él.

Y Dereck lo hizo conmigo.
(¡me acompañó mal pensados!)

Buscando amarte.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora