Una princesa rebelde y un amor no correspondido

UN DÍA LIBRE.

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La gente, personas, seres humanos....Llaman mi atención realmente, no soy superior por ser de la Luna.

Ni siquiera me siento una reina, princesa o algo grande. Me defino, como algo más de este planeta...No entiendo porque mis padres se sienten superiores, somos nada mas gente con poder.

Por fin es sábado, mi día libre.

Con el dinero que dejó mi padre, con eso podré mantenerme un rato mas, Serena de nada....

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Rini -cepillo su cabello hasta acomodar cada pelo rebelde, miro alrededor sonriendo malvada, tomó su maquillaje tapando su luna de la frente para no sentirse superior y se levantó haciendo planes-; Cierto, no he visto al caballo. Supongo que estará bien, de todos modos nunca me casaría con el. -salió por la ventana, cayó de pie mirando alrededor caminando a la plaza-

El día soleado pasaba lentamente, sofocaba como en los veranos. Niños corrían alrededor jugando sin parar, los más grandes con bebidas en mano, las gotas caían en el suelo, el viento refrescaba un poco el ambiente haciendo el día.

Haciendo el día indicado, para ir de compras para una pelirrosa que llamaba la atención por su estilo tan rudo y raro, pero para ella solo era gente que protegería así que le daban igual las miradas de la gente.

Rini -volteo a ver alrededor, dio una media vuelta con una gran sonrisa en su rostro y a Luna pelota en sus manos, observó como a un niño se le atasco su pelota. Tomó la iniciativa para bajar la pelota, toco al árbol manipulando la sombra y tiro la pelota hacia el suelo-; De nada. -El niño observó asustado "Gracias.", mencionó atonito- tranquilo.

Aquel día la pelirrosa se encargó de dar una buena presentación a todos, quería ganarse el afecto de sus futuros amigos como ella lo veía y dar a saber que ella no era mejor o más que la gente. Si no, que estaba con ellos en todo,

Atte; Rinni