Una princesa rebelde y un amor no correspondido

Planes...de...¡¡¡NUESTRA BODA!!!

°Narra Rini;

"Por fin, bueno.

¿Qué pasa?, se dirán.

Pues secuestre a el "Principito", ahora más que nunca, lo molestare a el y a mis padres. La mejor broma que se me ocurrió fue "Los planes de nuestra boda", se desmayarse con eso es poco de lo que les va a pasar a todos."

-solto los últimos papeles en un folder, su mirada traviesa la hacia ver maldosa y junto con su conjunto de Black Lady, la hacia un peligro total, quien la mirara correría para no caer presa de su maldad.

Acomodo a un Diamante profundamente dormido, lo sentó en la silla principal. Aventó un vaso de agua a su rostro, con todo y vaso para despertarlo mejor, el peliblanco despertó asustado por el golpe- Bien, ahora que el princeso, despertó.

Podemos hablar claramente, como adultos.

-sonrió un poco malvada, paso sus dedos por los papeles lentamente hasta sacar un acta de matrimonio, fotos de banquetes, vestidos y anillos- Todo será pesado, así que acomodate querido.

Diamante -se movió entre las sogas que ataban su cuerpo, la miraba con odio profundo pero se callaba sólo mirando que hacía, esperaría el momento para darle donde más le doliera a aquella conejo insolente que lo obligaba-; Está bien.  -dijo sin interés mirando el techo.-

Pasaron las horas como el agua, para la Dama que se ilusionaba con molestar a sus padres...Pero para el Príncipe, fue la mayor tortura durante esas 6 horas hablando de cosas sin sentido.

Pero su plan debía intervenir con eso también, si quería lograrlo debía ser perfecto, por fin coincidió en los gustos oscuros con la Dama pequeña, la boda sería como un funeral y no era broma.
Todo seria de color negro y con flores llamativas, un insulto a los reyes del Tokyo de Cristal.

Diamante -estaba algo fatigado por los preparativos, masajeo sus manos que hacía rato que fue liberado y sostenía una foto de un vestido negro, corto y escotado-; ¿Es todo?

Estoy cansado de todo esto, a quien le importa de que color serán los manteles o como se servirá la comida, bueno eso si. Todo tendrá lunas invertidas y de color negro.

-sonrió triunfante, pero lo que más feliz lo ponía era que tendría la oportunidad de secuestrar a su amada reina, esa idea lo mantuvo  extasiado un buen tiempo hasta que algo golpeó su cabeza-

Rini -tomó los papeles de nuevo, sonrió un poco y le dejo clavada una pluma en la cabeza-; Nos vemos dentro de una semana, no hagas nada hasta ese día. -sonrió saliendo del cuarto,  hace rato que sintió la presencia de Helios y fue mejor retirarse- Bye.

Cualquier comentario, voto o sugerencia se agradece.

Atte; Rinni