Un gris atardecer.

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Poco después de que Jack dejara las flores que había traído a su madre, comenzó una caminata afuera del cementerio para cruzarse con el encargado del mismo.

--- Jack ¿te vas ya?.

--- Si, esta oscureciendo, será mejor que deje dormir a mi madre, hemos hablado lo suficiente hoy, pero le contare todo cuando la vuelva a ver.

---Tienes razón, esta oscureciendo y será mejor que vayas a descansar, por cierto felicidades, se que hoy fue tu graduación, ¿crees poder venir mañana? Tengo algo para ti.

--- Si, claro vendré mañana, bueno nos vemos don Andrés.

---Cuídate muchacho.

Tras a ver intercambiado palabras con el encargado del cementerio, Jack camino hasta llegar a un parque que ya nadie visitaba, estaba tan descuidado que las plantas cubrían la mayoría de juegos, sin embargo a Jack no le importaba esto, pues era su parque favorito donde su madre y el reían juntos todas las tardes mientras comían un helado.

Jack lleno de recuerdos, se sentó en la misma banca, al lado de una lámpara vieja, que mostraba un prado seco debido al otoño, mientras veía un gris atardecer lleno de matices inventados, y un sol agonizante.

---Sabes yo también la extraño, fui a hablar un rato con ella y noté que dejaste rosas blancas eran sus...

---Eran sus favoritas, siempre dijo que esas rosas eran como el alma, blanca y pura.

---Parece que fue ayer cuando caminábamos los tres por este viejo parque, ya han pasado dos años desde entonces.

---Es extraño ¿no?

---¿Qué?

--- Que siempre nos enseño tanto, pero nunca nos enseño a vivir sin ella.

---Creo que eso debemos aprenderlo nosotros ¿no crees?

---¿Y que tal el viaje?, me has traído una taza.

---ja, tienes la misma costumbre que ella, solo espero que te agrade el diseño, oye Jack.

---¿Qué pasa Bluwen?

---Feliz cumpleaños, ya eres todo un hombre, te traje un regalo especial.

---¿Es una taza?

---Que no, hombre, se que te gustan los autos clásicos así que me encargue de buscar uno, solo espero que te guste el color.

---Que va, si se que lo has traído de color negro, conoces mis gustos muy bien, ¿pasamos por algo de pastel? Yo conduzco.

---¿Y pagas también?.

---Pues si, pero sera de el nuevo lugar que han puesto.

Jack y Bluwen se levantaron de la banca y caminaron hacia el automovil, para diriguirse a degustar un pastel.

---¿Y como se llama?

---¿Quien?

---Vamos Jack, vi como mirabas a la cajera, le preguntaste su nombre ¿no?

---Claro que no, como iba a hacer eso, y yo estaba viendo el menu que estaba atras de ella.

---Como digas hombresito, ahora vamos adentro, tengo que contarte algo importante, no te olvides de bajar la despensa.

El Angel ExiliadoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora