~Clark.
Llamada entrante
Miro la pantalla, no estoy de humor para soportar en este momento a Kendall. Vuelve a sonar el celular, lo miro, ningún mensaje.
Siento algo vibrar en mi bolsillo, lo saco, es el celular de Lucía. Enarco una ceja.
¿Por qué mi hermano la está llamando?
Apago el celular.
Alguien me lo arrebata.
Levanto la vista y me encuentro con unos hermosos ojos oscuros sin ninguna emoción en ellos. En una mano tiene el celular que me acaba de arrebatar, y en la otra tiene una maleta.
-Te vas?- pregunto asustado
Asiente sin decir ninguna palabra.
-No te vayas- me acerco a ella pero se aleja- no te vayas- le suplico
-No lo hagas más difícil de lo que ya es- dice con amargura
-Entonces no lo hagas- me acerco- quédate- le suplico
-No me puedo quedar- baja la vista
-Por qué?- pregunto
-Porque está no es mi casa- dice seria- nunca lo ha sido- no sube la vista
-Entonces está tampoco es mi casa-
-No lo hagas más difícil de lo que ya es- vuelve a decir
-Tenemos una apuesta- digo como excusa
-De todos modos solo quedaba una semana- levanta los hombros restándole importancia.
-Entonces solo quédate una semana- trato de convencerla
-No-
-No?- enarco una ceja- creí que cumplías las apuestas- suelto otra excusa
-Pues entonces tú has vuelto a ganar- levanta la vista- no me quedaré una semana más- dice convencida
-Qué es una semana comparado con lo que ya has pasado conmigo- digo serio
-No quiero pasar ni un segundo más contigo- dice con desprecio
-Pues yo no te libero de la apuesta- espeto molesto
-No te estoy pidiendo permiso para que me libres de la apuesta- dice seria- me voy y eso no se discute- me mira con rabia
-Pues no te dejaré ir- me acerco más a ella- no te vas!!- le tomo de la muñeca
-No eres nadie para retenerme en contra de mi voluntad!- grita molesta, se zafa del agarre – No vuelvas a tocarme!!- me mira con desprecio
-Tanto me odias para no querer estar ni siquiera a centímetros de mí- gruño, voltea la vista- tanto me odias!!- le grito, le vuelvo a tomar de la muñeca.
-Es por eso!!- forcejea- Porque quiero odiarte pero no puedo- le tiembla la voz, la suelto, le miro con la boca abierta
-No me odias- digo con evidente ilusión
Se queda callada, yo sigo paralizado. Finalmente, toma la maleta y comienza a caminar para la puerta, corro y la tomo entre mis brazos, ella comienza a gritar desesperada para que la suelte.
Me pega justo en el punto, automáticamente la suelto y sale corriendo.
-No lo hagas!!- grito
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Yo sin ti
Romance¿Qué pasaría si toda tu vida fuera un cuento que solo tú conoces? Eso es lo que sucede conmigo. He hecho tantas cosas que me gustaría contárselas a alguien ¿Pero y si no tienes a quien decírselas? No se, estas tu solo...en tu mente...en tus pensa...