08 Te quiero

4.8K 169 7
                                    

Mis manos me sudaban, hacer trampa no es correcto pero la tentación fue mas grande, me siento muy mal pero lo hecho hecho está, entrego mi examen y salgo con pasos apresurados, llego al estacionamiento y busco con la mirada mi auto y no nada no se cual es, me siento mareada, todo me da vueltas, la sensación es horrible siento que en cualquier momento me caeré, unas fuertes manos me rodean la cintura y sin poder evitarlo más me desmayo.

Narra Eric

Estaba jugando Candy Crush Saga en mi iPad, mientras esperaba que Scarleth apareciera, veo que han pasado 45 min y no hay rastro de Scar, me empiezo a preocupar porque le di todas las respuestas, debió haber terminado hace 25 minutos, decido esperar la en la puerta del instituto pero el sol está demasiado fuerte así que me colocó debajo de un árbol cerca de la puerta del instituto, veo como Scarleth se acerca con pasos apresurados y como se detiene, la observo unos minutos y veo que está desorbitada, y mareada parece que se caerá corro hacia ella y la sostengo de la cintura para darle estabilidad y siento como se desmaya. La cargo y la recuesto en la parte trasera del vehículo, ¿Qué hago? ¿La llevo al hospital, a su casa, o a mi casa? Estaba en una batalla interna así que hice lo mas maduro y sensato, "de tin marin de do pingüe cucara macara títere fue yo no fui fue tete" gano llevarla al hospital así que encendí el motor y arranque como loco, llegue en menos de 6 minutos la cargué y la lleve a la sala de emergencia, espere por unos segundo que para mi fueron eternos, estar aquí me traía muy malos recuerdos *Somos prisioneros de nuestros recuerdos* esa jodida frase se repetía como CD rayado en mi cabeza.

Salió una enfermedad -Familiares de la Señorita Scarleth Mendoza- me pare de golpe -Soy un amigo- la enfermedad muy descaradamente me observo de pies a cabeza, me puse nervioso. -Sí ya despertó, puede pasar a verla-dice la enfermedad con voz coqueta, entro a la habitación y la veo toda pálida, me regala una sonrisa cansada -¿Cómo te sientes?- le pregunto mientras tomó asiento a su lado, se aclara la garganta-Un poco cansada, pero bien, eres un exagerado ¿porque me traes al hospital?

-Porque me preocupe por ti, además esa opción gano en el 'de tu Marín' y sabes que hay que obedecerle- ella suelta una pequeña risa -Ya vámonos, el olor a medicina me da asco- dice asiendo una mueca graciosa, asiento y le ayudo a colocarse en pie, veo como rueda los ojos -Puedo pararme sola, no estoy invalida tarado-Le sonrió ¿Qué me estas haciendo pequeña? Cada vez que estamos juntos sonrió lo hago involuntariamente es inevitable, espero no sean síntomas de "enamoramiento" .

Salimos del hospital y nos dirigimos a mi departamento, en todo el trayecto la he visto perdida y sin poder evitarlo le pregunto con la vista en la carretera-¿Te pasa algo?- veo de reojo como ella niega con la cabeza, suelta un suspiro -No me pasa nada- dice viéndome fijamente, estaciono el vehículo unas casas atrás del departamento y la veo a esos ojos negros como el carbón tan atrayentes que tiene -No debes fingir conmigo- ella frunce el ceño y con voz irritada pregunta -¿Por qué?- acomodó un mechón de su cabello atrás de la oreja- Porque yo jamás te juzgaría- le digo mientras tomó su mano y la miro fijamente- me importa lo que te pasa, quiero ser la persona que acudas cuando estés triste, enojada, confundida...quiero ser esa persona que este siempre para ti.-Algo cortante y con voz neutral dice-No me gusta hablar de mis problemas- Scarleth es como una caja fuerte, por fuera es de hierro parece que nada le afecta, indiferente y segura de sí misma pero por dentro es de vidrio tan frágil y débil, -¿Por que? ¿porque no te gusta hablar de ellos? Debes desahogarte- le digo acariciando la palma de su mano -Las personas tienen demasiados problemas como para que alguien venga a molestar los con los suyos, además ¿Qué tanto le puede importar a alguien lo que te pasa? Sí al final lo único que te dicen es que todo va a mejorar, que todo estará bien, ¿Qué saben ellos del dolor o sufrimiento que estas pasando sí no lo viven? Sólo te dan respuestas estúpidas de problemas que no les interesa,- dice Scarleth enojada, escuche cada palabra y ella tiene razón -Tu me importas, y prometo que no te diré una respuesta estúpida tratare con todas mis fuerzas solucionar eso que te afecta- le digo mientras beso su mano, ella sonríe y suelta un suspiro -Es mi madre, no me siento lista para hablarle después de todo lo que paso, tengo miedo a que me lastime.

-Habla con ella, es tu madre la mujer que te ama con todo su corazón, vamos Scar eres una guerrera podrás contra ello, hazlo hoy te iré a dejar a casa y sí no puedes o todo sale mal llámame que correré a buscarte- le digo depositando un beso en su coronilla, ella asiente y se abrocha el cinturón.

Narra Scarleth

Después de esa pequeña charla- discusión con Eric me sí cuenta que el tiene razón debo enfrentar a mi madre, hacer las pases -Eric, deje algunas cosas en tu departamento, si todo sale bien ¿me las puedes venir a dejar mañana?- le pregunto aún con la mirada en la ventana, siento como el coloca su mano en mi rodilla y da un pequeño apretón -Claro pequeña- es todo lo que dice y el resto del viaje vamos en silencio.

Al llegar enfrente de mi casa, me desabrocho el cinturón y le entrego el teléfono a Eric, abro la puerta y sin mirar atrás me dirijo decidida a la puerta, abro y encuentro a mi madre en el sillón -¿Dónde has estado?- pregunta aún sin voltearse, la ignoro y pregunto  -¿Qué hace aquí, madre?- ella me mira y hace un gesto para que me siente en el sillón frente a ella, obedezco y siento como mis piernas tiemblan, -parece que has visto un fantasma- dice mi madre divertida, ruedo los ojos -¿Que hace aquí?- vuelvo a preguntar con la mirada fija en ella -Visitando te, hija of course- dice mientras tomó un poco de ¿té? Creo -¿Cuando llego?- le pregunto mientras cruzo mi pierna y coloco mi mentón en mi mano -Ayer, pero tu abuela-mami Susan me dice que mi hija anda de vaga ¿se puede saber donde andabas?-frunzo el ceño, sé que es mi madre y todo eso pero es raro escuchar que me hable así con ese tono de advertencia, se supone que vamos hacer las pases a sí que inhalo y exhalo, tengo que controlar mis emociones es mi madre y le debo tener respeto -En casa de un amigo- digo encogiendo me de hombros, ella asiente y por primera vez en lo que va de la noche veo vulnerabilidad en ella, -Hija, yo te quiero y me duele tu indiferencia hacia mi, ¡SOY TU MADRE!- dice mientras solloza , no puedo contenerme más, me siento una bomba de tiempo que explotará en cualquier minuto 5...4....3...2..1 ¡BOOM!-Sí eres mi madre, una madre que me abandono, que piensa lo peor de mi, una madre ausente y la persona que creía que siempre iba a estar para mi fue la que más daño me hizo-con lágrimas en los ojos y con toda la rabia del mundo le reprocho todo, todo lo que llevo guardado hace 13 años-No te imaginas lo horrible que es pasar el día de la madre sin una en casa, como es llorar en silencio porque no tenía en quien desahogarme, como es guardarme todo el dolor y miedo porque no tenía a mi heroína, como mi cuerpo cambiaba y no tenía una madre que me enseñara, lo feo que era escuchar a mis amigas hablar de como compartían un día de compras, o una tarde de tomar café con sus madres y le contaban todo y ellas estaban ahí para aconsejarlas, no te imaginas la falta que me hacías, como veía que rehiciste tu vida nuevo esposo e hijos, como poco a poco me olvidabas,como llore el día que te fuiste, como cada día al volver del colegio esperaba una llamada, como me dolía que olvidaras mi cumpleaños, me hiciste tanto daño pero aún así te quiero, sabes algo madre, agradezco enormemente a Dios por mi tía y mi abuela que han sido mejor madre de lo que tu hubieses sido, de mi padre que a pesar de la distancia siempre estuvo para mi- Estaba sacando todo el dolor, recordando a mi tía en las noches que lloraba por mis padres como me acurrucaba y decía "Deja que duela, al final sólo será un recuerdo" "Ellos te aman, volverán y verán la hermosa mujer en la que te has convertido",mi madre me abrazo y aún llorando repetía -Perdóname, perdóname hija, te quiero- le correspondí el abrazo mientras llorábamos.

Las cosas se calmaron, pero mi madre y yo aún no rompíamos el abrazo, en un susurro pregunta -¿Estoy perdonada?-sorbo de mi nariz y asiento con la cabeza -Bueno que te parece sí mañana tenemos una tarde de chicas-dice mientras seca algunas lágrimas de mis mejias -Eso sería genial- le digo, me separo de ella y me dirijo a dormir a mi habitación

Mi perdición Donde viven las historias. Descúbrelo ahora