甜蜜 ↬ RenChen [NCT Dream]

第二十三集

Hasta que por fin tocó la campana.

—¡Vamos a salir! —exclamaste tomándome de la mano.

—¡Que les vaya bien en la cita! —gritaron los demás como respuesta. Ambos solo sonreímos para salir.

Habíamos quedado en ir al parque.

Al llegar nos sentamos en una banca. Nos miramos mutuamente sonrientes, era nuestra primera cita; tú movías tus piernas como un niño pequeño.

—Eres muy bonito —dije lo que siempre pensé, pero nunca me atrevía a decir. Me sonreíste—. Me gusta tu sonrisa —seguías sonriendo, solo que tus mejillas tomaron un lindo color salmón.

El verano podía llegar a ser muy aburrido.

Veíamos a parejas pasar delante nuestra; todos estaban muy acaramelados. Sonreíste al ver a la pareja de abuelitos cogidos de la mano.

—Nosotros también estaremos siempre juntos como ellos —me dijiste, mientras seguías admirando aquella pareja. Sonreí.

—Promesa —te dije mientras te enseñaba mi meñique.

Juntaste nuestros meñiques. Esto era una promesa.

Te mire, estabas viendo una heladería.

Por lo que decidí, llevarte a comer helado de fresa.

—¡Vamos! —dije levantándome de la banca, cogiendo tu mano.

Ya una vez con nuestros helados. Volvimos a nuestro paseo, esta vez no dude en cogerte de la mano y entrelazar nuestros dedos. Tú sólo sonreíste por mi acción con tus mejillas color salmón; ibas mirando nuestro alrededor con tus brillantes ojos, llenos de curiosidad.

Iba mirándote secretamente de nuevo, iba pensando en ti secretamente nuevamente, perdiendo la noción del tiempo.

Me miraste. Ambos habíamos terminado nuestros respectivos helados. Y de la nada tu linda risa inundó nuestro alrededor.

—RenJun, eres un gato —y volviste a reírte. Te miré extraño; creo que me había manchado. Mis ojos se posaron en ti.

Eres tan brillante.

Y me ví sonreír inconscientemente de nuevo; esto solo pasa cuando estás junto a mí. Iba a la limpiar mi cara, pero tú me de tuviste.

—Si te limpias así, lo que se marchará esta vez será tu ropa —me sonreíste, mientras yo hacía lo mismo de vuelta.

Cogíste de tu bolsillo un pañuelo y sin mi aviso, me limpiaste delicadamente el rostro.

Creo que estoy rojo.

—¿Qué te apetece hacer ahora? —pregunté, aunque tú ya parecías cansado.

—Lo que tú quieras —sonreíste.

Cogí de tus ambas piernas delicadamente y sin aviso, ya estabas sobre mi espalda. No dijiste nada, creo que te sorprendí, puede que te haya disgustado.

Mis latidos aumentaron. ¿Puedes oírlos? Pues al parecer te habías apoyado en mí.

—RenJun, puedo oír tu corazón, esta latiendo muy rápido —hablaste, mientras tus manos rodeaban mi cuello.

—¿Sabes por qué? —te pregunté, pero tú no respondiste. A lo mejor te quedaste dormido.

Hoy era un día soleado, con un sol cálido; pero aún así esperaba con ganas una ducha de lluvia, para poder caminar junto a ti, debajo de un paraguas.

—Porque me gustas —contestaste, al final, después de unos minutos.

Nuestro amor, es un juego programado por Cupido.

—A mí también me gustas —respondí sonriendo.

—Pero ¿sabes...? No de esa manera. Te amo como mi mamá ama a mi papá. Te amo, como aquellos abuelitos que vimos en el parque —paré de andar, pude sentir tu cuerpo tensarse; estabas nervioso.

—Lo sé, yo siempre te he amado de esa manera.

Sentí cómo volvías a apoyarte en mí, esta vez tu cabeza apoyada en uno de mis hombros; tu respiración tocaba mi piel, haciendo que corrientes eléctricas recorriesen mi cuerpo.

Nuestro amor son dos estrellas con los ojos cerrados, destinadas a estar juntas.

—仁俊，当我男朋友吧 [RenJun, se mi novio.]

Newton dijo que había algo llamado gravedad. Creo que debido a ti, inicié a creer en esa teoría.

—笨蛋， 我已经是你男朋友了， 只是你还没发现 [tonto, ya soy tu novio, solo que aún no te habías dado cuenta].