Fue una tarde depresiva, de esas que solo se me quitan caminando leyendo y llorando y cantando, salí en pleno sol por el parque de mi casa, me senté a leer y llorar por todo lo que me pasaba, cada 11:11 te deseaba cada día con más intensidad, hasta que decidí caminar mucho y al volver comiendo, te vi, si por mi casa nos quedamos viendo aunque a mí me dio mi ataque, me puse nerviosa escuche que me decías, sobrada estabas con tu amigo solo me reí y pase, jure que era el destino.
Eras mi sueño.