Miércoles 08:00 P.m.
Estaba algo triste y a la vez muy emocionado porque se acercaba el fin de las vacaciones, es una mezcla rara de sentimientos, por un lado ya quería empezar mi último año en la escuela, que sería sensacional, lleno de fiestas, alcohol y mucho sexo, pero por otro lado empezarían de nuevo las materias, los profesores, las llegadas temprano, toda esa mierda de la que estaba cansado, por suerte era el último año.
- Ramón bájate de mi laptop -grité con una voz tan fuerte que mi hermana escuchó.
Solo era cuestión de segundos para que se apareciera esa loca en mi cuarto para empezar a darme un sermón e insultarme por haber interrumpido su video. Si, ella monta video todos los viernes en youtube, y es bastante famosa allí, debido a que es muy hermosa.
- ¿Cuántas veces te he dicho que no hagas ruido cuando estoy grabando Ronaldo? -gritó ella tan fuerte que sonó hasta en el último rincón de la casa.
- Lo siento, ¿Desde cuándo la casa es tuya? -dije en un tono burlón.
- No seas estúpido -dijo muy enojada, tanto que podía ver como salía humo de su cabeza al estilo de caricatura.
- Precisamente porque no lo soy, hago mi racionamiento -dije esperando que se enfureciera aún más.
- Vete a la mierda con tus palabras de genio, simplemente !CÁLLATE! -gritó cerrando la puerta de un gran golpe.
Ella tiene 16 años, es muy hermosa, soy su hermano mayor, después de Andrés, pero el ya dejó la casa hace unos cinco años y por lo tanto mi labor era protegerla, pero como en toda relación de hermanos debe haber peleas, nos llevamos muy bien, ella está en un año menos que yo en la escuela, le gusta todo acerca del mundo de la televisión y el modelaje, por eso me gusta molestarla con mis palabras técnicas, porque se que no sabe que significan, entonces la hago pensar, cosa que no le gusta mucho.
Sonó el timbre en cuestión de minutos después de la discusión con mi hermana, y allí estaban Leandro y otro amigo, Leandro es mi amigo de la infancia, lo conocí en España cuando viví allí, éramos muy pequeños, luego viaje a Inglaterra y lo dejé de ver como por 3 años, luego me enteré que estaba en el país y desde ese día tenemos una relación como de hermanos.
- ¿Listo para la fiesta, Rocky? -gritó Leandro desde el automóvil.
- Si, dame dos segundos. -dije con una gran expresión en mi rostro.
Subí a mi cuarto corriendo a buscar una chaqueta, y cuando estaba por bajar, apareció la silueta de mi hermana en su puerta.
- ¿A donde crees que vas? Mi mamá dijo que no podías ir a esa fiesta, tu ya sabes porque. -dijo ella en un tono bastante serio.
- Johanna -era el momento de utilizar toda mi capacidad de oratoria para convencerla, no me iba a perder la fiesta de Sergio, el novio de mi hermano que era multimillonario y daba las mejores fiestas del año- solo vives una vez, y debes hacer lo que quieres porque sino se te pasará la vida y no te darás cuenta, ellos no están nunca lo sabrán, vamos, ven conmigo.
- JA JA JA -dijo ella haciendo un espacio en cada sílaba- ¿En realidad crees que me convencerás para ir a ver como te follas a todas las niñas de la fiesta?.
- Me haces parecer a un violador psicópata que va por ahí buscando victimas, yo no hago nada soy todo un santo -dije sarcásticamente.
- ¿SANTO? Disculpa, la clase de santos como tu no van al cielo, te informo.
Volvió a sonar la bocina del automóvil y un grito de Leandro que por la distancia no alcance a entenderle nada.
- Entonces ¿Vas o no? -dije mientras me disponía a bajar las escaleras.