Min Ho.
Tomó mi rostro entre sus manos y sus labios se posaron sobre los míos, tan suave, que era como sentir ser acariciado por el pétalo de una rosa, sus labios no se movían y simplemente se presionaban sobre los míos, mientras sentía sus lágrimas humedecer sus mejillas y las mías también, haciendo que me sienta culpable por haber hecho que llore otra vez, parecía que lo único que lograba era que llore, o al menos así era últimamente.
—Lo siento —dijo —tengo un examen.
Tomó su libreta y su libro, se incorporó, sin despedirse siquiera se fue, sabía que él no estaba enojado, y creo que debería estarlo, porque hace tan sólo unos minutos atrás le dije de todo, incluso que me engañaba, pero yo en el fondo sé que no lo hace, pero estaba enojado, pensé que el día de ayer se negó a ir a mi casa porque estaba con otro, en realidad lo estaba, pero no porque me esté engañando, sino por aquel trabajo grupal que yo tanto estaba detestando, ni si quiera estaban sólo los dos, también estaba mi hermana So Ran, aun así no dejé de llamarlo e insistir que vaya a casa, aún cuando me dijo que luego de terminar aquel trabajo tenía que estudiar para un examen del cual he visto a mi hermana días estudiar y decir que es difícil, pero ahí estaba yo insistiendo sin importarme que él también necesitaba atender lo suyo y no sólo estar pendiente de mí.
Miré su figura alejarse más, y como él pasaba el dorso de su mano por sus mejillas, limpiándose las lágrimas, haciéndome sentir miserable por haber hecho que llore una vez más, el viento despeinó su cabello castaño cuando él llegaba al bloque en el que estaba su salón, en el momento que el timbre sonó, únicamente lo observé desde mi lugar bajo nuestro árbol, yo no tenía deseos de entrar a clases, no después de haberlo hecho llorar.
Vi a mi hermana acercarse a él y tomar su rostro entre sus manos, dirigiendo su mira a mí luego de eso, él negó e intentó sujetarla del brazo pero ya So Ran se encontraba, se podría decir corriendo a mí, porque sus pasos eran rápidos y fuertes, llenos de decisión, por eso a veces dudaba que yo fuera el mayor, aunque sea por un minutos y trece segundos, pero aun así soy el mayor.
—¡Nuevamente lo hiciste! —Gritó señalándome con el dedo índice.
—So Ran —dije en un intento de que bajara la voz, ya mi conciencia me lo estaba reclamando, como para tener a alguien más diciéndomelo.
—¡Te dije que no lo hagas llorar de nuevo! —Empezó a golpearme con las palmas de sus manos, coloqué mi antebrazo como protección para que sus golpes no fueran en mi rostro, porque ni tiempo tuve de pararme y poder tener preeminencia de mi estatura.
—Noona, por favor —dijo él, ni siquiera lo vi acercarse, pero sabía que corrió hasta aquí, por la ligera agitación en su respiración —detente noona por favor —pidió nuevamente, tomando a mi hermana de los hombros para alejarla un poco y que dejara de golpearme —por favor.
—Te hizo llorar nuevamente Tae Min.
—Noona llegaremos tarde, el profesor no nos dejará entrar.
So Ran resopló enojada y lo tomó de la mano llevándolo con ella, pero antes de alejarse completamente me miró con claro enfado, sólo los vi volver por el camino que hicieron hasta aquí, y una vez más mis deseos de no entrar a clases predominaron, rodeé el árbol para sentarme nuevamente, no quería que si algún profesor me veía me reporte.
Intenté que la culpa por haber hecho que Tae Min llore disminuya pero me era casi imposible, porque su imagen con sus ojos cristalinos por las lágrimas venían a cada segundo, como siempre después de que él llorara y mi hermana se lo llevara lejos de mí, como si con ese acto lo estuviera protegiendo de un gran peligro, sé que So Ran quiere protegerlo y más si es de mí, porque ella se siente culpable cada vez que él llora por mi culpa, porque dice que de no haber insistido en que fuera a hacer la tarea aquella tarde en nuestra casa no lo hubiera conocido y así es, y yo estoy feliz de que ella sea persistente porque así lo conocí, cómo olvidarlo.
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I trust you.
FanfictionEl pasado puede haberte marcado, las personas pudieron hacerte daño, pero eso no quiere decir que todas son así, que no puedes confiar en las demás. Tae Min confía en Min Ho pero tiene miedo, porque no es fácil confiar y no temer, porque si al...