Un pequeño regalo

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Esa misma noche en la casa de Alpha se reunieron toda clase de unicornios solo para ver a la pequeña potrilla; todos hablaban y otros solo esperaban a que la potrilla bajara de su habitación.

- ¿Por qué tarda tanto la potrilla? - pregunta una de las unicornios.

- De seguro nos tiene miedo - dice otra unicornio - Alpha podrías ir por la potrilla. 

- Claro, solo debe de estar arreglándose el pelo jeje - dice Alpha retirándose de la sala y caminando en dirección hacia la habitación de la potrilla - Flabight todos te están esperando por que no bajas - dice entrando a la habitación.

- Mamá no quiero ir esto es incomodo - dice Flabight recostada en su cama. 

- Flabight solo sera por un tiempo te prometo que muy pronto no tendrás que usar estos vestidos - dice Alpha acercándose a la cama. 

- Lo prometes mamá - dice Flabight mirando a su madre.

- Claro mi pequeña solo se paciente -dice Alpha abrazando a su potrilla - Solo tienes que ser un poco mas paciente. 

- Esta bien mamá lo seré - dice la potrilla correspondiendo al abrazo de su madre - Y bien que estamos esperando hay una fiesta y podemos dejar a los invitados esperando - dice la potrilla bajando de su cama. 

- Esa es mi pequeña - dice Alpha mirando a la potrilla.

La noche paso y todos los presentes estaban divirtiéndose en la fiesta, y nadie sospechaba de que la potrilla fuera diferente a ellos y así termino la noche la potrilla quedo agotada quedando dormida en el sofá y todos se retiraron del lugar.

- Uff.... Esto fue agotador - dice Alpha cansada y voltea a ver a su potrilla recostada en el sofá durmiendo - Oh mi pequeña Flabight - da una pequeña risa y con su magia toma a la potrilla colocando la sobre su lomo y llevándola a su habitación - Descansa mi pequeña potrilla - la deja sobre su cama y la cubre con una sabana - Buenas noches mi pequeña - saliendo de la habitación y dirigiéndose a la suya - Estoy muy cansada - entrando a su habitación bostezando y quedando dormida en su cama.

Todo era paz y tranquilidad en la aldea nadie sospechaba de la pequeña, pero Alpha para asegurar no dejaba que la potrilla no saliera no podría tener amigos y no hablar con nadie; la potrilla se sentía un poco sola Alpha a ver que su hija no se sentía muy bien al estar encerrada se le ocurrió una idea para que su hija usara sus alas y ser libre. En el cuarto de la potrilla con su magia realizo una puerta que la podría llevar a una habitación amplia llena de nubes animales y varios tipos de plantas y para asegurar de que nadie viera esa puerta coloco un hechizo que solo ella y la potrilla podrían ver la puerta. 

- Gracias mamá estoy es muy lindo - dice Flabight volando de una nube a otra - No se que decir esto es muy divertido.

- Sabes que yo te daría lo que sea con solo verte feliz mi hijita - dice Alpha recostada debajo un árbol. 

Y así es como la pequeña potrilla paso parte de su infancia jugando en la habitación que su madre le había hecho para ella, era muy feliz sin ningún problema y nada de que preocuparse pero esa felicidad no duraría por mucho tiempo por que alguien daría a la luz el secreto de la pequeña potrilla. 

La historia de una alicornioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora