MI hermosa dama

cuantas grocerias :)

Los dias pasaron sin novedad,hasta que una noche llegue con mucha hambre,me dirigí directo a la cocina y allí estaba ella.sentada tomando su mesa casi llena de botellas y fumando "que lindo paisaje",pense.
Estaba sorprendida que una mujer soltara tantas grocerias era obvio estaba discutiendo con su novio,me divertia la situación ya que, no era de mi pais y su acento era hermoso asi que las grocerias parecian adornos no se, a veces pienso que estoy loca. De pronto mi madre pasa el umbral de la cocina,hago como si nada y continuo comiendo. Ella se asoma la mira y espera que yo suelte mi veneno, siempre le daba mi opinion de las cosas aunque al final mi madre siempre hacía lo que se le venía en gana.
Yo: no entiendo como puedes tener una mujer así en la casa,pronto vere el desfile de hombres en su habitación.

Mi madre: no deberias hablar sin saber,sabes acaso que esta sola,no tiene familia ni amigos aqui. Yo también llegue joven a este país sin nadie y salí adelante, a lo mejor siente nostalgia por su vida porque no tratas de hablarle sean amigas.

En aquel momento la mire y su telefono luchaba por escapar de sus manos la discusión con su novio se había convertido en una ira incontrolable, varias veces lo tiro contral el piso y el aparato seguia resistiendo, al final se apago ella se levanto se despidio de mi mama entre tumbos y subió a su apartamento.

Mire a mi madre y le dije: ella y yo no tenemos nada en común para hablar esta loca,Te amo mama feliz noche.

Mientras me daba un baño, pensaba en toda la ridícula situación, la unica vez que me había separado de mi madre no cometí la estupidez de beber hasta caer en coma, no lo veia normal para una mujer.

En la mañana la volvi a ver desayunado con un notable dolor de cabeza,estaba recien bañada su largo cabello negro ondulado, su perfume en fin ya era tarde así que pase de largo sin ningún comentario. Ella me dedico una mirada llena de pena y molestia a la vez nunca la había visto sonreir que raro pense muy muy raro.
Llegando a la oficina estaba ali esperandome,abri rapido la oficina y la hice pasar.regalandome un tierno beso al cerrar la puerta.
Ali era una mujer de 1.60cm, delgada,ojos negros,cabello largo y muy sensual eso era lo que encantaba, como me hacía sentir el poder que me daba sobre su cuerpo,sobre ella que mas podia desear.mientras la acariciaba pensaba su marido debe ser un verdadero tonto al no valorar a esa bella mujer, aunque mejor para mi la podia tener a mi capricho.
La desnudaba poco a poco, mientras me besaba sin control yo era como su droga y ella mi escape, mi deseo. La tome de su cabello y la bese profundamente mientras se subía a mis piernas, baje por su cuello y me tope con sus senos hermosos perfectos para mis manos, con mi lengua recorria cada centimetro de ellos y en su pezón le dedicaba una mordida que de vez en vez incrementaba su fuerza. La acoste lentamente mientras mis manos no dejaban de acariciar sus piernas, le decia lo hermosa que era, lo sensual de su cuerpo mientras mis manos estaban en su entrepierna abriendo paso a su sexo, mientras besaba su cuello escuché un grito de placer estaba tan consentrada en mis besos que mis dedos ya la habían penetrado, Me encontraba en la gloria no queria mas hasta el momento en que ali me dijo al oido "quiero que me hagas tuya" ufff.  Me mato de placer.
Empecé a penetrarla con mucha fuerza, con pasión, con deseo era mia y punto. Me aparto un poco para respirar y yo la voltee acariciandole la espalda bajando por sus muslos, sintiendo su calor, su olor,lo recorri llegando a su sexo penetrandola fuertemente ella grito y yo la silencie con un beso, ya no podia esperar le di vuelta y bese su sexo, ese liquido intenso que distingue a todas las mujeres era dulce, y me aceleraba el corazon continúe hasta que su espalda se arqueo y gemidos de placer salieron de su boca.
Me dio un tierno beso, mientras yo me recuperaba pasaron unos minutos y recogimos la ropa entre risas,besos. Entro una llamada era su esposo quería saber donde se encontraba. Rapidamente le dijo que Estaba de compras y acordaron verse en unos minutos, la mire en gesto de desaprobación y me fui a buscar sus llaves.
No era que estaba enamorada, ni nada solo era el deseo de tenerla a mi lado poseer su cuerpo.
Nos despedimos y yo termine algunas cosas en la oficina para disimular mis encuentros amorosos y sali a directo a mi hogar sonriendo por el dulce encuentro con mi amante. La encontré a ella, tomando nuevamente esta vez con dos hombres, lo sabía era de esperarse una mujer tomando a diario era presa fácil de cualquier hombre.
Me hice la loca, salude y segui derecho cuando ella me dice.
-. Hola amargada porque no te sientas.

Gracias por leerme acepto cualquier comentario o ayuda.