La Hija De Mi Esposa [Editando]

Capítulo 37

SARA

Ya pasaron dos horas desde que me reuní con Alejandro, y donde esté me daba aterradora noticia de que es el hermano de Ana Daniela y el hijo jelitimo perdido de Ana Lucrecia. Pero eso lo considero como cosas locas, pero bueno. Era mi deber entregarle la carta a Ana Daniela donde alejando lo cuenta todo, yo solo espero que ella lo perdone o más que me perdone a mi. Ya que ella una ves le entrege eso hará pregunta y todo. Y tendre que decirle que sabía todo. Menos el plan claro, no estaba al tanto de lo que Alejandro quería hacer. Pero bueno...... Que sea lo que Dios quiera.

Llegó al departamento y veo que Ana Daniela ya había llegado, porque su auto está parqueado en el parqueadero, me dispuse a subir con la carta en manos y de un momento a otro comienzo a temblar, pero.....¿porque rayos comence a temblar? Quizás es la sensación de lo que está por pasar ahora mismo cuando Cruze esa puerta. Pero al ver, no podía identificar lo que estaba viendo. Era Ana recostada en el sillón de la sala, llorando. ¿que habrá pasado? Entró y preguntó;

––Ana, ¿Porque estas llorando?

––Ya lo sabe, ––dijo ella acomodándose en el sillón y dejándome espacio para sentarme. ––Mamá ya lo sabe todo.

––¡Whatt!!!! ¿Como? Fue lo único que pregunte.

––No lo se, ella me llamó y me dijo que fuera a verla en cuanto pudiera, y........

ANA DANIELA

Recuerdo..........

Llegue a casa de mamá, y todo estaba silencioso. Toque la puerta, y me abrió margarita y me indicó donde estaría mi madre. Obvio lo estaría en el despacho, tocó la puerta y sólo escucho un limitante "pase" y entre. Al estar dentro del despacho de mi madre, algo me estaba provocando un especie de escalofríos, pero no sabía que era. Mamá me dice;

––¡Toma asiento Ana! ––dijo.

Yo solo hize lo que me pidió. Ella después se paró de su silla y comenzo a caminar de un lado a otro y dijo;

––Seguro ya sabes el porqué te llame ¿verdad? ––dijo ella parara detrás mío.

Sentía un hernome escalofríos.....

––Pues, la verdad no. ––dije aún sabiendo ya para que era.

––¿Porque lo hiciste? ¿Porque traiciónaste a tu madre de esa mala manera?.

Entonces volteo y la miro con cara de asombro.

––Si hija mía, ya lo se todo.

––Mama, Pue. ––no me dejó terminar la frase.

––ME SALISTE UNA MALA AGRADECIDA. ––dijo ella levantándome la voz.

Yo solo sollozaba...... Con la cabeza abajo.

––¿Como fuiste capaz de acostarte con mi marido? ––dijo ella aún detrás mío.

Abro los ojos como dos platos al saber lo que había dicho...

––Te dije que lo sé todo. Mi propia hija traiciónando su propia sangre.

––Mama, Puedo explicarte. ––decia mientras me paraba de mi silla y estaba frente a ella.

Ella solo se acercó y me dió una fuerte cachetada. Que la verdad no me dió tanto si no lo que ella dijo después;

––Eres una mal,,,,,,,,, p....... Z........ P........ Y seguía pegándome como si fuera una niña pequeña.