¿Miedo de amar o miedo de lo que sentimos?

62 8 11
                                    

Pienso que no hay persona que tenga miedo de amar, sólo tienen miedo de que lo que sientan, no sea recíproco. No sea igual. Tienen miedo de sentirse humillados por lo que sienten, que no sea aceptado. Que tal vez para decir un "te amo" profundo y significativo, sea muy pronto.
Tienen miedo de que todo lo que empieza, tiene un fin. Queramos o no, todo empieza y acaba.
Tienen miedo de las personas, que cambian rápidamente de parecer. Que un día pueden decir un "te amo" sincero, y al día siguiente, decir que "no era lo que creían", que "no iba a funcionar". Tienen miedo al rechazo, al no sentirse amados de vuelta. Pero, ¿cómo no sentirse amados de vuelta, si no se aman ellos mismos? Creo que el amor más profundo, más sincero, y más real, es el que tenemos por nosotros mismos. Finalmente, seremos la única persona con la que compartamos la vida, que nos damos pequeños placeres día a día, consintiéndonos. Tenemos que aprender a amarnos, antes de amar a alguien más. Tenemos que valorarnos por lo que somos, sin conformarnos con menos. Disfrutar la vida como si no hubiera un mañana, como si cada día, fuera el último; nunca sabemos cuándo terminará el regalo llamado "vida".
Tal vez también es el miedo a lo que sentimos, que sea la primera vez que nos enamoramos, que nos entreguemos a una persona sin poner excusas, que seamos nosotros mismos con alguien. Es el miedo de que lo que sentimos, sea demasiado para el poco tiempo, o viceversa.
Tenemos miedo de tantas cosas, que nos perdemos de los pequeños placeres de la vida. El miedo a enamorarnos de la persona incorrecta, de que nos defrauden y desilusionen. No sabemos qué pasará a futuro.
Amar sin prejuicios, sin condiciones, entregar todo de nosotros, saber que nosotros dimos lo que pudimos y tenemos. Eso es amar. Confiar en la otra persona, encariñarnos sin temor, disfrutar el ser amados y el importarle a alguien. Porque no todo el tiempo le importamos a la gente, hay veces que la soledad nos ahoga, y nos sentimos solos, invadidos por la nostalgia.
También tenemos miedo de soltar lo que amamos, dejarlo ir, perderlo todo. Pero, queramos o no, soltar también es amar. Es valorar lo que tuvimos, y entender que no todo es para siempre. Saber que las cosas tienen un comienzo y un fin, y aprender a vivir con las pequeñas cosas que nos dejan las personas. Sean enseñanzas, marcas, recuerdos. Las personas que entran en nuestras vidas, siempre nos dejan algo. Y cada cosa, mínima o no, nos marca y define como las personas que somos. Cometemos errores, aprendemos, de eso se trata vivir.
Vivir sin miedo a equivocarnos, a tomar las decisiones incorrectas, a amar. Tenemos que empezar a valorar lo que es la vida, y entender que no es para siempre. Que el día que menos esperemos, se terminará. Nada mejor que morir sabiendo que hiciste lo que tú querías. Con errores y bajas. Vivimos como queremos; de eso se trata la libertad de ser quienes somos. ¿Tan larga creemos que es la vida?

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Sep 16, 2016 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Sobre amar y vivir. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora