Capítulo final.

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Su respiración era agitada al momento que llegó a su auto. No le importó correr por aquel pasillo, ni bajar doce pisos por las escaleras, ni que toda aquella imagen que siempre portaba se viera opacada por cómo se veía en ese momento, pero todo le era difícil asimilar, desde haber visto a su exnovio fuera del ascensor hasta haber terminado dentro de su apartamento, incluso sus palabras, porque el chico lo había herido, él tuvo que obligarse a estar bien todavía cuando no lo estaba.

Tae Min.

Se quedó en el estacionamiento más tiempo del que hubiese imaginado, no podía conducir en el estado en el que se encontraba, ya que su chofer tenía el día libre, incluso llamó a su secretaria para decirle que no iría a trabajar en lo que quedaba del día porque no se encontraba bien. Tae Min lo había hecho sufrir demasiado en el momento en que se fue, incluso había perdido su trabajo porque por su estado depresivo dejó de ir a trabajar, teniendo que ser liquidado debido a que no querían a empleados "irresponsable", ya que él no dio una razón para hacerlo.

No podía aparecer así en su vida de un momento a otro, no era justo, aunque eso sería decir por verlo ahora frente a él, porque al ser modelo lo había visto en anuncios y en la televisión, sabía que le estaba yendo bien, que había cumplido su sueño o parte de él. Al menos sabía que si todo terminó entre ellos no fue en vano, Tae Min era famoso.

***

Estaba nervioso al pararse frente a aquella puerta, ni siquiera debería estar ahí y lo sabía, no hacía falta que alguien le dijera eso, tenía más que claro que el chico no lo quería ver, pero su lado masoquista decía que debía oírlo de sus labios, por la misma razón no le importó pagar a un detective para que trabajara lo más rápido posible y le consiguiera algo de información, algo que era muy importante para él.

Su dirección y su lugar de trabajo, era todo lo que consiguió el detective en tan solo una semana, era tan poco tiempo, no obstante, aquella información era muy valiosa para él, debía asumir que se sorprendió mucho del puesto que ocupaba, pero no dudaba de las capacidades que tenía para desempeñar aquel puesto, seguramente era el mejor.

Tocó el timbre. Se sentía nervioso, después de todo sabía que no lo quería ver, porque se apareció frente a él toda la semana, sin embargo, era ignorado, porque no era posible que alguien que estaba a solo un metro, no fuera visto, pero eso era lo que fingía el otro chico. Sabía que había alguien en el interior del apartamento, no solo por la información recibida por el detective sino también por la música clásica que se escuchaba, sonrió, eso no había cambiado.

*

Detuvo la música ganándose la mirada reprobatoria de su pareja, pero él solo le sonrió en forma de disculpa, comenzando con pasos de acuerdo a la nueva música colocada por él.

—Min Ho estaba en la mitad de una coreografía muy importante.

—Estabas en la mitad de una coreografía que te sale espectacular, pero ya hemos estado con la misma canción muchas horas, creo que mereces un descanso, ven.

Lo tomó de la mano y lo atrajo hacia él, empezando a dar vueltas por el apartamento, incluso tropezando algunas veces con el sofá, haciendo que Tae Min riera, porque él no bailaba ballet y mucho menos Min Ho, ni los pasos que hacían pertenecían al ballet, sin embargo, Min Ho parecía llevar un ritmo muy concentrado en aquellos giros.

Tae Min no era experto en ballet, pero conocía unos pocos movimientos sobre este, por lo que después de reírse, comenzó a seguirle el juego a su novio. Él no bailaba sobre las puntas de sus pies, pero tenía un buen relevé, siendo precisos sus movimientos, ganándose los aplausos del mejor público que podía tener, para terminar fundidos en un beso tan apasionado y él olvidándose de que se encontraba en medio de una coreografía importante para lo que se estaba exigiendo aun cuando ya estaba cansado.

Sorry, I got it wrong.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora