El chico perfecto

Cap 24

Ha pasado una semana y no lo he visto. Me llama y envía mensajes pero no le respondo, viene a casa pero le digo a mi mama que no quiero verlo. No puedo creer que el me aya engañado es mi mejor amigo y me duele que me mienta.

No he visto ha nadie desde ese día y en la facultad no puedo seguir faltando tengo que retomar mi vida.

Al otro día es martes, me despierto temprano como siempre me aseó, visto, peino y me maquillo un poco para que no se vea lo mal que estoy. Bajó y hay esta mama.

Yo: bien día mami- finjo una sonrisa- hola Lucas ¿como están?

Mama: bien amor y tu como te sientes.

Yo: mejor hoy voy ha clases- término mi desayuno y salgo para coger el bus.

Ya en la universidad no me he topado ha ninguno de mis amigos. Y para mi mala suerte tengo clases con todos incluido ray.

Llego al salón antes que todos y me siento alejada de todo el mundo. Tocan la campana y los muchacho entra muy emocionados al verme se congelan y luego hacen una bulla, ray se que viéndome como si fuera un fantasma y yo evado su mirada.

Mari: ami que te paso nos tenías preocupados- inquiere para que le diga- que tienes te vez fatal.

Yo: gracias por recordármelo Mari- hablo con puro sarcasmo- y no me pasa nada.

Ray: ami por favor escúchame- súplica desesperado- sabes que yo no soy como el, nunca te haría algo así. Por favor sólo escúchame.

Yo: ok Raymond hablamos está noche- con eso el se sienta a mi lado y me pasa los apuntes de la semana que falté así como lo de las demás asignaturas.

El día pasa más lento de lo que imagine todo me aburre y no se qué hacer, debí quedarme en casa.

Tocan la campana y por fin se terminó el día o al menos eso pensé yo.

André: hola ami como estas preciosa?- pregunta el con cinismo - te extrañó sabe. Nunca pensé que íbamos a terminar así- yo lo miro sólo lo ignoro- saber que eres mía- grita con el ego más grande que un edificio.

Yo: nunca seré tuya y menos sabiendo que eres el peor de todos los mujeriegos- grito más fuerte que el- y aunque no lo fueras yo ya no te quiero, tu te encargaste de matar lo que sentía por ti superalo- y me voy dejándolo con la palabra en la boca.