Me desperté e Ivan no estaba a mi lado, me iba a levantar para buscarlo, no antes sin estirarme, a penas puse mis dos pies en el suelo sentí una mano tomando mi tobillo, no pude evitar gritar y saltar en la cama, en eso sale Ivan de bajo de la cama riendo.
-¡Tonto! Casi me matas del susto!.-le grite mientras le lanzaba una almohada.
-Pobre de mi niña.-dice sarcástico mientras reía.
-Tonto.-dije dándole la espalda.
-¿Te as enojado?.-dice.
No le respondí, estaba algo molesta ya que casi me da un infartó.
-¿Leah? Mi amor responde.-dice poniéndose a mi frente.
Me voltie dándole la espalda y cruzando los brazos.
-Es imposible que te enojes.-dice para tomarme de la cintura y cargarme.
-Bajame!.-grité, me era inútil patalear.
Me lanzó a la cama y me comenzó a hacer cosquillas.
-Ivan...jajajaj...dejame...Jajaja. Tonto!...jaja.-dije apenas hablando.
-Estas enojada?.-dice con mirada retadora.
-Si!!...jajaja.-dije riendo.
-Bueno entonces no te dejare hasta que se te quite el enojo.-dice riendo.
-Me...jaja...enojare mas!!...jaja si sigues...-dije.
El me soltó, me levanto tomandome de la cintura y mirándome fijamente (quedando así solo que mirandose)
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-Sigues enojada?.-dice.
-Tu que crees.-respondí.
El me pego a la pared y comenzó a besarme, yo le seguí el beso no podía negarme, nos detuvimos por la falta de aire.
-Eres un tonto.-dije sonriendo.
-Pero soy tu tonto.-dice sonriendo.
-Te amo.-dije acariciando su nuca.
-Y yo a ti.-dice.
-¿Me perdonas?.-dice.
-Claro que si!.-dije riendo.
Él me abrazó y me beso.
-Espera aquí.-dice.
-¿A dónde vas?.-dije.
-Shh ahora subo.-dice para salir de la habitación.
No tardo ni 5 minutos cuando estaba detrás de la pared.
