A ella le gustaba sentarse a la orilla del mar
Por qué poco después que el se fue
Las voces ya no podía callar
Ellas eran sus nuevas amigas
Que invadían su mente
Que le hacían perder la cordura, ¡parecía demente!
Su mama le decía loca por las voces
Su papá le decía zorra por razones que ella desconoce.
Ella empezó a preguntarse
Si esas voces eran normal,
Si era normal cuando le decían que tenía que matarse
Y si esta está bien cuando le decían
Que tenía que cortarse, que no le dolería.