Capítulo 51
No tenían idea como el tiempo había pasado tan rápido. Quizás entre viajes, salidas, risas, estudios, todo se había ido tan velozmente, pero lo habían pasado de maravilla. Se amaban, y disfrutaban demasiado juntos. ______ y Harry se encontraban besándose como si el mundo se fuera a acabar. Sus labios estaban tan hinchados que comenzaban a arder. La lujuria se apoderaba de ambos a medida que sus pasos los dirigían a la habitación de Harry. Tropezó intencionalmente contra su cama, y cayeron riéndose sobre la boca del otro.
-Me hiciste golpearme –dijo ella sobre sus labios –tonto.
-Lo siento –dijo divertido. –amor, tienes boquita de pato.
-Tú también –dijo ella rozándole los labios con la punta de los dedos. –dios, te ves tan sexy con la boca de pato.
-¿Tengo boca de pato? –preguntó divertido mientras estiraba más los labios, con expresión divertida. _____ rio y asintió. Harry le miró los labios y le dio un corto beso –te amo tanto preciosa. No puedo creer que mañana me voy…
-Pero recuerda que nos veremos pronto, lo he arreglado con papá –dijo ella tocándole la punta de la nariz. –ofreció enviarme el dinero para arrendar un apartamento, lejos de la casa de mamá.
-Gracias a Dios –dijo Harry acercándose a su boca. Le mordisqueo sensualmente el labio inferior. –no podría estar sin ti.
-¿Quién diría que Harry Styles sería tan cursi? –dijo ella susurrándole en el oído.
-Siempre he sido cursi, solo que supe ocultarlo muy bien –dijo el muchacho pasando su mano por el largo cabello de su novia.
-Sigo sin creer como nunca me había fijado en ti, si eres tan guapo –dijo ella sonriéndole mientras jugueteaba con los rulos del muchacho.
-Siempre supiste que era guapo, pero odiabas mi personalidad de casanova. –concluyó Harry –solo lo hacía porque tenía miedo de que me rechazarás preciosa.
-Es divertido recordarlo. Jamás creí que estuvieras enamorado de mí. Yo soy solo _____, mientras tú tenías a toda la secundaria a tus pies.
-Nunca fue suficiente, faltabas tú. Pese a que eras mi mejor amiga, yo quería besarte, quería poder demostrarte que yo no era esa máscara que los demás veían. Y después de todo lo que hice mal, tú seguías ahí y solías hablarme de que yo era bueno, solo que me gustaba hacer ****eces. Siempre fuiste una de las personas que sabía que en el fondo, no era así. Y eso fue lo que más me enamoró de ti, tú podías ver lo que otros no. –susurró Harry mientras la miraba fijamente. –no sabes como me moría por decirte que te amaba. Cuando salías con el imbécil de Ryan, fue un golpe bajo. Dolía verte con él, así que yo me tiraba alguna chica fácil para pasar el rato. Ni siquiera así salías de mi mente… y ¡dios! Como te deseaba, el día del baile de primavera, sentí que te violaría ahí mismo. Y el baile de fin de curso, revolucionó mis hormonas más que nunca. Ese sensual vestido rojo te quedaba perfecto… -le dijo en el oído.
-Gracias –dijo ella sintiendo sus mejillas colorarse. Harry sonrió con ternura -¿y tú? Debo admitir que a pesar de que no me gustabas, siempre pensé que eras guapo. Con traje, me hacías sentir extraña. Te veías tan jodidamente bien, que dudé si me gustabas o solo era el momento. –Harry sonrió –además, siempre fuiste atento y preocupado conmigo, aunque fueras un ****a en la secundaria.
-Te amo, te amo y te amo –dijo él atrapando sus labios con intensidad y pasión.
Esa noche, planearon tener una hermosa cena de despedida. Harry volvía a Londres, y según _____, ella iría uno o dos meses después. ______ preparó todo. Al fin y al cabo, era Harry el que se iba. Le preparó comida mexicana, la favorita del rizado. Apenas el llegó de la universidad, pues había hecho unos trámites para comprobar su regreso a Inglaterra, sonrió al ver la mesa con velas y a ella vestida para la ocasión. Llevaba un ligero vestido blanco, con un cinturón pequeño café, su cabello caía ondulado, y llevaba tacones. Se veía como una diosa.
-¡Wow! –exclamó mirándola. Ella se acercó y lo miró coqueta. Harry la tomó por la cintura y le plantó un beso en los labios –estás…
-¿Qué?
-Dios mío, estás bellísima. –dijo él. Le tomó la mano y la hizo dar una vuelta, admirando su belleza.
-Gracias por el cumplido –dijo guiñándole un ojo. Harry sonrió –siéntate amor, te traeré algo que te gusta mucho.
Sirvió comida, charlaron y rieron. Harry la observaba, grabando cada detalle de ella en sí mismo. Harry se sirvió una copa de vino. Tomó un sorbo sin dejar de observarla minuciosamente. ¿Cómo podía ser tan jodidamente hermosa?
-Está delicioso –dijo Harry sonriéndole a _____. Ella sonrió complacida.
-Me alegra que te guste –dijo ella. Harry tendió su mano sobre la mesa, y ella la tomó con gusto. El muchacho acarició con sus dedos el dorso de la mano de la chica. –Harry. –el la miró atento. –Quiero que vivas conmigo en el apartamento que tendré. –ella se mordió el labio coqueta, mientras él procesaba lo que ella había dicho ¿realmente quería vivir con él? Harry estaba callado, _____ en un principio pensó que no quería, pero él sonrió luego de eso.
-¿Enserio? –preguntó emocionado. Ella asintió –Amor… estaría encantado.
-Lo haremos –dijo ella. Terminaron de comer.
-¿Damos un paseo? –preguntó él. Ella sonrió y asintió. Harry tomó la mano de la chica y salieron del apartamento.
Nueva York era maravilloso de noche. Las luces de cada una de las publicidades y edificios iluminaban el lugar y le daban ese aspecto propio de una ciudad que está viva de noche. Harry pasó el brazo alrededor de su novia y le dio un beso en la frente. Extrañaría un poco Nueva York, aunque no cambiaba la vida más relajada de Londres. Aún así, lo había pasado de maravilla.
-Tengo una sorpresa para ti –dijo ella.
-¿Otra?
-Sí, sé que te gustará. –ella sonrió mientras sacaba algo de la cartera. Entonces tomó los papeles y se los enseñó. –iremos al piso más alto del Empire State. –Harry abrió los ojos como platos y sonrió. Se comenzó a reír. Era algo miedoso a las alturas, pero definitivamente no se perdería eso.
-Eres maravillosa –dijo embobado. La agarró por la cintura y le plantó un beso.
-Vamos, estamos en la hora –dijo ella agarrándole la mano. Caminaron hasta llegar a la Quinta avenida, con la calle West 34th Street y miraron el Empire State en todo su esplendor. Se dirigieron a la entrada, la emoción se hacía parte de ellos. Había una fila de personas, así que se pusieron allí. Se registraron en la entrada por el personal de seguridad, quienes les proporcionaron mapas, y algunos recuerdos del edificio. El edificio contaba con 73 ascensores. Así que los condujeron por los pasillos para ir al observatorio de la construcción. Harry estaba un poco nervioso, su miedo a las alturas le podía jugar una mala pasada. Tomó con más fuerza la mano de su novia cuando subieron al ascensor.
-Los ascensores son algo rápido ¿estarás bien? –preguntó _____. Harry asintió sacudiéndose su cabello con la mano, algo que solía hacer cuando estaba nervioso.
-Se tarda en subir cuarenta y cinco segundos al piso ochenta –aseguró un hombre del personal del edificio. A Harry casi se le salieron los ojos de sus cuencas. ¿45 SEGUNDOS? Dios, sintió que tendría un ataque cardíaco ahí mismo.
El ascensor llegó, junto a ellos subirían una pareja con un niño de alrededor de diez años y ellos. Harry tomó una bocanada de aire y entró.
-¿Listo? –preguntó _____ acercándose a él y poniéndose de puntillas. Le besó los labios suavemente.
-Eso creo. –dijo suspirando. El ascensor cerró las puertas, y apenas partió, todos soltaron un grito ahogado pues la sensación de vértigo por la ascensión se apoderó de ellos. _____ sonrió a Harry.
-¿Estás asustado amor? –preguntó. El negó pero ella rio pues sabía que Harry estaba algo asustado. –Tranquilo, mira hasta el niño tiene menos miedo –El muchacho pequeño se volteó y dio una sonrisa de suficiencia, _____ rio divertida. Las puertas se abrieron en el primer observatorio, era alrededor de veinte pisos más abajo del último. Harry rogó por salir, pero aun faltaba un poco. La familia bajó allí. Ellos siguieron en el ascensor hasta el final. El ascensor por fin se abrió, y una chica del personal del edificio los recibió.
-Bienvenidos al observatorio del piso más alto del edificio –dijo la muchacha de ojos celestes. Harry le dio una de sus sonrisas coquetas. ____le apretó la mano. Harry gimió suavemente y ____ sonrió con suficiencia. –si me siguen, podrán ver totalmente la vista de la ciudad.
Ambos sonrieron, mientras _____ sacaba la cámara de su bolso. Harry la miró sonriendo ante de alzar su vista ante la gran ciudad que se presentaba ante ellos.
-Espero que disfruten la vista –dijo la muchacha. Ellos estaban embobados. Podían ver la ciudad totalmente iluminada, y desde una altura inimaginable. _____ suspiró fuertemente por la sorpresa. Harry abrazó a _____ por la cintura, observando la imagen. Su miedo a las alturas desapareció al contemplar la maravillosa vista que tenían. _____ enfocó la cámara y tomó algunas fotos.
-Dios… esto es maravilloso –dijo Harry sorprendido. –Mira lo grande que luce la ciudad frente a nosotros… tan pequeños.
-Es increíble que mirando tan solo una ciudad, te imagines lo grande que es el mundo entero… -susurró ella. –y lo más increíble, es saber que el mundo es enorme, y haber tenido la suerte de haberte conocido… -dijo ella volteándose. Harry la miró con ternura, y se acercó a ella. Juntaron sus labios y se dieron un apasionado beso. Estaban en la cima del mundo, y hasta allí tenían que sellar su cariño. _____ sacó la cámara, rozaron sus labios y tomó la foto con toda la vista de la ciudad iluminada en fondo. Luego sonrieron a la cámara y sacaron otra foto.
-¿Puedes tomarnos una foto? –le preguntó Harry a la muchacha rubia. Ella les sonrió y asintió. Posaron para la foto abrazados, y luego besándose. Agradeció a la chica que lo miró algo embobada.
-Te amo –dijo ____ rodeándolo con sus brazos. Harry la levantó un poco y ella se rio divertida.
-Gracias a Dios, entre tantas personas, te conocí _____. –dijo Harry. Luego sacó algo de su bolsillo y dio una sonrisa. –tengo algo para ti. Cierra los ojos.
Ella lo hizo. Harry se dio la vuelta y sacó la cadena de oro que había comprado para su novia. La dejó caer en el pecho de ella. Sacó un espejo que le había robado de la cartera, y le mostró.
______ dio un grito ahogado. Era hermosa. La figura que había era una imitación en oro de una casa de lego. Volteó con los ojos algo llorosos.
-Sé que te gustan las casitas de lego. –dijo él cerca de ella –ya sabes lo que significa.
La canción, pensó ______. Lego House, de su cantante favorito Ed Sheeran. Era un gran significado para ella. Volteó la cadenita frente al espejo. Solo habían tres letras. H&_ La muchacha sonrió mordiéndose el labio y lo miró para agarrarlo por la nuca y darle un beso.
-Siempre te levantaré cuando te caigas, siempre haré lo mejor para ti. Y recuerda, siempre te voy a amar. Y ahora sé que te puedo amar mejor. –dijo haciendo una metáfora de la canción del pelirrojo. Ella lo abrazó fuerte.
-Te amo Harry –susurró en su oído.
-Te amo _____ -dijo. Unieron sus labios y se miraron con una enorme sonrisa.