La luna debía estar ya en lo más alto del cielo aunque la aglomeración de nubes impidiera ver más allá de un opaco manchón blanco. Fuera del viejo edificio construido de rocas caía una torrencial lluvia que venía acompañada de sonidos de relámpagos y luces intensas que iluminaban la habitación por efímeros lapsos. KyungSoo dio una mirada al reloj digital que reposaba sobre una mesita, descubriendo con sorpresa que ya pasaba de la medianoche.
Era incapaz de conciliar el sueño.
El mes de junio traía consigo nostalgia. Durante la temporada de lluvias solía recordar lo años en que era más joven y los brazos protectores de su madre disipaban su temor por los truenos, pero ahora, estando allí sin ella todo era tan diferente. A pesar de que consideraba al internado como su segundo hogar y disfrutaba de estar allí con sus amigos, nunca sería lo mismo que su casa en la ciudad.
Tras divagar durante largos minutos, subiéndose la cobija hasta el cuello, decidió intentar dormir una vez más ya que al día siguiente tenía clase de literatura a las 7:00am. Comenzaba a lograrlo, pero entonces escuchó el sonido de sábanas ser revueltas seguido del rechinido de la otra cama que albergaba aquella habitación.
Bajo la absoluta oscuridad logró vislumbrar el cuerpo de su compañero de cuarto removiéndose. Oyó después respiraciones irregulares y un resoplido.
A pesar de que su relación con Kim JongIn no podía considerarse cercana ante sus ojos ni los de ningún otro, sintió empatía y quiso saber si algo le molestaba.
—¿Estás despierto todavía? —preguntó despegando la cabeza de la almohada tan solo unos segundos.
Hubo silencio por un par de minutos y creyó que el muchacho no estaba despierto como él pensaba, pero entonces vio que la silueta de su compañero se elevaba hasta quedar sentado.
—No tengo sueño.
Su voz fue tan queda que se quebró al final, aunque KyungSoo creía que también podía deberse a que JongIn estaba en una transición hacia la adultez y su voz cambiaba constantemente, volviéndose un poco más ronca cada día y sonando graciosa en algunas ocasiones.
—Yo tampoco —respondió al cabo de unos segundos con la vista fija en el techo, donde JongIn había pegado unas estrellas que brillaban—. No me gusta la lluvia, me da miedo.
—Yo... no es miedo, tan solo no me gusta.
Ambos miraron por la ventana y al notar que se encendía una luz en la torre del frente —donde se hallaban los dormitorios de los de tercero— mostrando la silueta de dos personas besándose, rieron de manera cordinada.
—Creo que no somos los únicos sin poder dormir.
—Eso parece, pero mañana tengo clases temprano, así que deberíamos dormir —dijo KyungSoo emitiendo un bostezo. Al fin sentía sueño.
—Deberíamos, pero no quiero. Oye hyung, ¿sabes por qué razón el profesor JinYoung renunció?
—Escuché algunos rumores de mis compañeros, pero todo parece descabellado, la verdad no sé.
Aquella noche continuaron charlando como si fueran un par de amigos y no solo compañeros de habitación. La conversación fluía de forma natural, quizá porque era de madrugada y ninguno razonaba realmente. Al final cayeron dormidos sin percatarse.
☔
Tenía tres horas libres después de la clase de literatura, de modo que aprovechó el tiempo para tomar un desayuno ligero y el resto lo empleó en lavar la ropa sucia en la lavandería del plantel escolar. Tras haber esperado alrededor de una hora mientras la secadora andaba, al fin terminó y colocó todas sus prendas dentro de un canasto para dirigirse a su habitación.
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Tardes de lluvia / KaiSoo (Odio-amor) Oneshot
Fanfiction"-Los que se pelean se quieren." Por culpa de Kim JongIn, Do KyungSoo es castigado sin ir al viaje escolar, de modo que deben quedarse juntos en el internado mientras los demás se divierten en la playa durante quince días. ☔Pareja: KaiSoo; ☔Géneros...