Antes De Que Me Olvide De Ti

Me estoy Voliendo Loco

Llegué a mi casa sorprendido de cuan enamorado sigo de ella, como es que pudo hacerme tal cosa, no es tan absurdo y alocado que la ... Es ella? En mi ventana? No, Joice recuerda que murió hace cuatro meses... No puedes estar tan loco de verle todo el tiempo. Aunque es ella, es su voz, son sus... No, no, no...

Recuerdo esa vez que ella me dijo.

- No se puede olvidar a alguien si no se quiere, y sabes? Para mi ha sido casi imposible.
- Si tu deseas hacerlo puedes.
el día que alguien te enamore en verdad, lo veras todo en tiempo y para colmo te creerás loco.
  - Tan graciosa.
- Ojalá alguien haga que te sientas perdidamente loco... Es mas un poco....

Que tan sabia era mi amor!... Te quiero aquí pricesa.

Poso mis pies en el suelo y miro detalladamente cada linea de mi pie izquierdo. Ella lo hacia todo el tiempo, ella incluía el suelo entre sus dedos para poder palpar lo poco que lograba. Además de hacer aquello que llamaba "dinámica tangible" lograba describir lo que veía cada que  lo hacia. Como amo a ese recuerdo hermoso de Ann.

Me dirijo rápidamente a mi ventana para asegurarme que en he perdido lo cabeza y no es así. Aun estoy cuerdo, según algunas investigaciones aun estoy cuerdo, claro si así me considero yo.

A demás creo que debí volverme loco desde que la vi.

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Estaba colega de la soga al cuello, su piel totalmente morada, prácticamente sin oxigeno vital. Sus ojos estaban abiertos y en ellos se alcanzaba a ver el dolor que sintió antes de partir. Su labios perfectamente dejaban ver lo traumático que se siente morir ahogado sin poder hacer mucho para salvarse.

En ese momento de desconsuelo me acerco a su mano para tomar lo único que aun conserva color de todo su cuerpo, pues de algún modo sus prendas de vestir perdieron la vida, perdieron el color al igual que Ann.

La carta que me había escrito antes de morir. Me senté a leerla bajo su cuerpo colgante, pues no podía hacer nada aun con su cuerpo o podían culparme de haberla matado quizá

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De mi ojo derecho sale una cristalina y salada pero bien formada lágrima, la cual moja mi mejilla sonrojada al ver la imagen de el amor de su vida muriendo. Esa lágrimas que te recuerdan que justo ese día le ibas a decir que te encantaba.

Vuelvo a mi cama y me recuesto mirando al techo perfectamente agrietado por las malas construcciones que ya han hecho en esta casa. Y entre tantas curvos veo su figura, su sonrisa y sus ojos mirándome mientras me pide ayuda para que no le permitiera colgar su cuerpo.

Giro de medio lado, para no sentirme tan incómodo sin su existencia entre mis brazos y nuevamente es ella. Estaba sentada justo al lado de mi cama, me pasa un escalofrío por todo el cuerpo.

Me siento ahogado, sin ganas, verla de nuevo me asusta. No sé que esta pasando conmigo, no se que hizo ella conmigo, probablemente estoy alucinando, ella esta esta muerta.

Muevo mi mando con ganas dirigiendo me hacia su torso. O bueno al que perece su torso, pero no siento nada. En verdad me estoy volviendo loco, nadie puede ver el reflejo de la persona que en algún momento amo. Necesito a un psicólogo para que me ayude con mis problemas, es mas necesito un psiquiatra, aunque... Que dirán mis amigos? Puedo perder todo menos mi vida social. Aunque que caso tiene la vida y mis amigos si no están ella.

Estoy tan cansado que mis ojos se van cerrando poco a poco. Y sin darme cuenta ya caí en un sueño profundo.

Estábamos ella y yo sentados en el parque donde nos conocimos, estaba vestida con su vestido blanco perla, tenia un labial rojo pasión, unos zapatos tan blancos como su vestido. En sus ojos se podía ver la delicadeza y el tiempo que toma para dedicarse. Sus cabellos rubios se movían al tiempo con el viento provocando tanta emoción en mi. Así como siempre lo ha hecho.

Miro a mi alrededor y solo la veo a ella hablando de los problemas que suceden en su casa. Intento moverme aunque siento mi cuerpo atorado en la silla. Quiero hablarle y tampoco puedo. Me empiezo a sentir ahogado, vuelvo a ver a mi alrededor y todo empieza a tornar un tono oscuro. Miro hacia Ann y ya no es ella. Simplemente esta deformada sus prendas son negras. Su cuerpo esta más largo provoca un terrible miedo en mi.

Logro despertarme antes de que el ente malo intente dañarme y esta mi madre mirándome con mido mientras dice:
- Amor... Me asustas, te sientes bien.
-  Claro madre - en ese momento posa su mano sobre mi frente.
- No estas bien, mira tu temperatura y además estas sudando...- No logro escuchar el resto, solo siento mi mundo volverse oscuro