▬prologue.

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| Se conoce como destino a la fuerza sobrenatural que actúa sobre los seres humanos y los sucesos que éstos enfrentan a lo largo de su vida. El destino sería una sucesión inevitable de acontecimientos de la que ninguna persona puede escapar. |

Beacon Hills nunca fue un pueblo normal pero la gente que residía ahí prefería ignorar las cosas que entre las sombras sucedían, se concentraban en sus pequeñas y frágiles vidas sin tener una idea de que sus pasos estaban ya escritos en el viento.

La familia Stilinski fue bendecida con el nacimiento de su segundo hijo, una hermosa y fuerte niña, la cual fue nombrada Riley por gusto de su padre o tal vez ese tenía que ser su nombre.

La felicidad es la clara definición de efímero, la familia cometió un error al creer que se podía cambiar lo escrito, el destino de Claudia Stilinski era ser diagnosticada con demencia frontal temporal exactamente seis meses después del nacimiento de su hija. La mayoría del tiempo estaba en el hospital mientras que su esposo estaba en la estación de policía trabajando largos turnos para pagar el costoso tratamiento de su esposa, el cual estaba destinado a fallar. El pequeño Stiles no solamente pasaba todo el día y toda la noche sentado al lado de su madre en una pequeña silla de madera, el cuidaba a Riley en el proceso. La noche que todos temían llegó, Claudia no pudo escapar de aquella fuerza que le impedía ser feliz y pasó a una mejor vida no sin antes confiarle un secreto a Stiles, un secreto el cual le hizo prometer que no le diría a nadie, un secreto con una magnitud inimaginable y con unas grandes repercusiones en el futuro. El mayor de los Stilinski no supo exactamente que contestarle a su madre, así que solo asintió y prometió que el cumpliría la misión tan importante que aquel secreto de su madre le estaba heredando.

El Sheriff no tenía la vida resuelta, su compañera había muerto dejándole una responsabilidad enorme y un hueco en su corazón, había noches en las que el lloraba su pérdida, bebía mientras le reclamaba al cielo en susurros que eran llevados por el viento hasta quedar atascados en alguna parte de la casa. Stiles solía distraer a Riley cuando los susurros se convertían en gritos, para que jamás escuchará el horrible sonido de su padre derrumbándose.

Fue durante su infancia cuando Stiles conoció a Scott en un pequeño patio de juegos de la escuela y se hicieron mejores amigos, fue también cuando Maya paseaba por la calle y escuchó el leve canto de Riley, entrando por su ventana y haciéndose mejores amigas. De nuevo, la gente que les prestaba atención cuestionaba su suerte, ¿por qué ellos tan jóvenes habían encontrado a sus otras mitades, a sus confidentes? Pero como ya mencioné antes, todo estaba planeado, ellos tendrían un destino que cumplir, un propósito más grande que ellos mismos, por eso debían estar juntos.

Aunque la gente que miraba más de cerca podía darse cuenta que las cosas cambiaron, las reglas cambiaron, el destino por primera vez había cometido un error, una simple decisión había provocado que aquel secreto que Stiles guardaba en lo profundo de su corazón saliera a la luz, creando todo un efecto domino, haciendo lo que cualquier persona había querido hacer desde el principio de los tiempos, cambiar los términos del destino.  

El mundo del lobo adolescente; Girl Meets World & Teen Wolf.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora