FORGETTING IS NOT GOOD

Help me

Pi pi pi pi pi piiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiip...
Lentamente, esforzándome como nunca, abro los ojos y veo borrosamente a alguien diciéndome algo que no llego a oír.
Miro a mi alrededor.
¿Qué estoy haciendo con mi vida ? Solo me entran ganas de llorar llorar y llorar.
¿Qué estoy haciendo en un hospital? ¿Que hago aquí? No puedo con mi vida.
Haber Eyra recuerda.
Mmmmmmmmmmmmmmmmmmmmm.........
En mi cabeza aparecen imágenes de un almacén, muchos iPhones dentro de cajas, y mm, también dos tíos filipinos apuntándome con una pistola.
Mierda.
¿Aquí se acaba todo?
No puede ser, haber, concéntrate Eyra, tu puedes, vaaamooooos, venga, ánimo.
Pero nada.
Solo se me ocurre levantarme de la camilla en la que he estado estirada y sin saber que lo estaba durante un tiempo que tampoco sé.
Me levanto lentamente pero...
- No plis noooo, sit plis.
¿Soy yo o esa tía que acaba de venir corriendo y chillando me está hablando en inglés a mí, que soy pésima en este idioma pero que por lo menos me va mejor que el chino?
- Mm, hello, ¿sorry?
La tía debe haber notado mi hacento porque así de así se me ha puesto a hablar en español.
- ¿Hablas español?
- Oh sí, gracias a dios, hacía tanto tiempo que no oía hablar español a alguien que no fuera yo... porfin.
- Chica, ¿sabes dónde estás?
- Haber, contando que no soy idiota sé que estoy en un hospital pero como que no llego a saber nada más. ¿Me explica que hago aquí?
- Oh, haber, te han traído dos hombres filipinos, estabas inconsciente. Da gracias que sé hablar chino niña.
- ¿Y usted sabe que me ha pasado?
- Claro, me han contado que, ya que ellos eran los de seguridad de un almacén y oyeron ruídos, fueron corriendo y te encontraron ahí, y tu, al momento te desmayaste del susto y te quedaste inconsciente dos días.
- ¿QUÉ? ¿Y mi familia, y mis amigos?
- ¿Pero que te ha pasado querida?
- Pies mira, todo empezó cuando me encontré sola en una caja de cartón dentro de un camión y ...
Al acabar de contar toda la historia, la chica sonríe, yo creo que de pena, pero normal, yo sí que me doy pena. La chica es simpática, se agradecería al mundo tener más personas así.
- Haber, no te preocupes ni te agobies. Sobretodo no te pongas nerviosa. Te voy a traer una ficha médica para que rellenes todo lo que sepas. Será sobre ti, para poder ayudarte a volver a casa. Tranquila, todo saldrá bien.
- Vale, pero antes, ¿me puedes responder a una pregunta?
- Claro, dime.
- ¿Dónde estoy?
- Oh, estás en CHINA TOWN, NUEVA YORK, a más de 100.000.000.000 km de donde dices que vives.
Angustia no te apoderes de mí, no, ahora no.