Love is War

11

Narra Sarg
Un leve movimiento continuo me hizo despertar, abrí mis ojos y tenía mi brazo sobre Hill que seguía en la misma posición de anoche y aún dormía pero estaba temblando y estaba pálida, que le sucede?

La moví un poco para que se despertara y cuando lo hizo comenzó a sudar
-¿Qué tienes? ¿Te sientes bien?- pregunte espantado, ella solo se puso en pie... o lo intento, no pudo, se desvaneció, rápido reaccione y la sostuve
-Sarg, necesito mi mochila, estoy fibrilando, ahí hay un botiquín
-Si,si ok, ire rápido, no empeores, la recosté en el arbusto y salí corriendo hacia la cabaña, aún era de madrugada por ahí de las 5 am, entre y busque las mochilas con la mirada pero todas las cosas estaban distribuidas en toda la habitación, tome dos mochilas y metí lo que pude, sin olvidar el botiquín, tome dos bicicletas y me dirigí a Hill lo más rápido que pude, al llegar recargue las bicicletas entre los árboles y arbustos, me puse a lado de Hill y ella estaba como la deje pero empeoraba su sudoracion, le brinde el botiquín y ella como si supiera cómo está saco un frasco pequeño con gotero, abrió la boca y se tomó dos, pasaron unos minutos para estar normal, ¡mi rostro era de sorpresa! ¡Que rápido se mejoró!
-¿Estas mejor?- pregunte sentándome a su lado
-Mejor, perdón si te espante o algo por el estilo
-Admitiré que si me dio miedo, ¿que sucedió?
-Ataque de principios de hipotermia
-¿Hipotermia? Te di mi chaqueta- ¿que? Busque mi chaqueta y no la tenía, pero ¿que rayos? Se la puse anoche
-¿Que buscas?
-anoche te puse mi chaqueta pero no está
-¿enserio? ¿Pero donde está?- dijo ella igual poniéndose en pie
-bueno da igual, te sientes bien?
-Si ¿y Tu pierna?
-como nueva- sonreí
-¿crees que deberíamos irnos de aquí?
-No lo sé, no se que hacer, no quiero arriesgarnos pero si ya se llevaron a Georgia y Felton no tardarán en regresar a dar un vistazo,  también debemos comunicarnos con Miller y avisarles de esto. Hill se puso frente a mi, tomó mis hombros y me vio a los ojos
-Sarg, respira, estaremos bien, confió en Dios que esto sólo es temporal, nada es para siempre me oíste?
-Gracias- sonreí y nos abrazamos, esto no es para siempre...

Narra Hillsong
Decidimos irnos del sendero y seguir nuestro camino a las afueras del condado, llamamos a Miller, bueno, Sarg hablo con él y Tiare logró saber de otro refugio en el condado 7 del noroeste del país, que ellos van hacia allí y nosotros también, nos tomará uno o dos días llegar, pero si no dormimos llegamos mañana en la tarde, vamos pedaleando muy ágilmente, Sarg enserio que se recuperó de su herida de bala, no es por presumir pero hice un buen trabajo. Salimos de la colina e mediodía, tomamos la autopista ahora abandonada pero nos fuimos en la orilla, donde están las reservas ecológicas, el camino estuvo fácil por qué ya había paso libre y era sólo de manejar la bicicleta, al terminar la autopista estaba la entrada al condado del este, tenemos que atravesar éste para llegar a nuestro destino, nos detuvimos a pensar que hacer, si continuamos o descansamos
-No lo sé Sarg, ¿tú que piensas? ¿Tu pierna aguantara? Hoy le has dado mucha presión
-Pero este condado es lo único que nos retiene del refugio, además atravesarlo sólo nos costará 4 horas y llegamos al 7
-Está bien, son a penas las 3pm, lograremos llegar
-Entonces, ¡vamos Hill!

Comenzamos a pedalear de nuevo, mis piernas ardían de todo el esfuerzo que han hecho hoy, no hemos comido nada pero no importa si llegamos al refugio habrá tiempo para eso.

Narra Sarg
Ya ha anochecido, son las 7pm ya deberíamos estar cerca, la ciudad está abandonada totalmente, sólo pocas personas andan por las aceras, no está tan mal como en nuestro condado, aquí aún es un poco más seguro, Hill se miraba agotada pero seguía, al llegar al límite del condado este y el 7, llamamos a Miller, nos dijo que vendría por nosotros, que de hecho el lugar era a pocas calles.
-Ahorita viene Miller, ¿como te sientes?- le pregunte a Hill mientras nos ocultamos en un muro en la entrada del 7
-Cansada y tú?
-Hambriento, podría comerme ese perro- le dije señalando a un perrito acostado debajo de un árbol, estaba solo, Hill lo vio y sin pensarlo dos veces se dirigió a él y lo tomo en sus brazos, era absurdo detenerla, de hecho ya venía de regreso, se volvió a sentar a mi lado y venía con una gran sonrisa
-¿Que haces?
-mírala, está sola, no puedo dejarla
-Está bien, ¿como se llamara?- acaricie a la cachorra de color negro y ojitos tiernos, parecía un osito, su pelaje era muy esponjoso, sonreí de solo saber que a veces hay cosas simples que te alegran el día
-Mmmm Sahi
-¿Sahi?
-Sii será tuyo y mío, Sahi- dijo decidida
-Sahi será- Reí y tome a la pequeña en mis brazos